Frente a los cerros de Cusco

Va buscando el sol y la luz. La narradora y editora peruana Karina Pacheco cambia su lugar de trabajo de la ma?ana a la tarde. ¡°Tengo dos rincones. En ¨¦ste por las ma?anas entra el sol y siento el calor en la espalda¡±, comenta sentada en un escritorio del segundo piso de un d¨²plex en Cusco, la ciudad donde naci¨® en 1969. Sin embargo, por las tardes lleva el ordenador al sal¨®n del primer piso, rodeada de cientos de libros y amplios ventanales con vista a los cerros de esta ciudad, la que m¨¢s r¨¦dito tur¨ªstico y orgullo reporta a Per¨². A esas horas, mientras la luz entra a chorros, extiende una manta y se acomoda boca abajo en un espacio en el que las plantas ¡°han ido encontrando su lugar¡±, en particular una de nombre cola de zorrillo que ha florecido en color rosa oscuro en el descansillo de la escalera.

Karina Pacheco tiene listos dos nuevos libros de su sello Ceques Editores: Cusco, espejo de cosmograf¨ªas, una antolog¨ªa de cuentos de 16 autores iberoamericanos, nacidos despu¨¦s de 1960, y una nueva edici¨®n de Gregorio Mamani-Asunta Huam¨¢n. Autobiograf¨ªa en quechua y castellano, una obra de la literatura testimonial ind¨ªgena andina, publicada por primera vez en 1977 por una pareja de antrop¨®logos cusque?os.

La antolog¨ªa, de 242 p¨¢ginas, incluye, entre otros, a Juan Gabriel V¨¢squez (Colombia), Javier Cercas, Eduardo Halfon (Guatemala), Edmundo Paz Sold¨¢n (Bolivia), Cristina Rivera Garza (M¨¦xico) y Leila Guenther (Brasil), con un pr¨®logo del peruano Fernando Iwasaki y presentaci¨®n de la editora.

Pacheco es tambi¨¦n autora de siete libros de narrativa, cinco de ellos novelas; la m¨¢s reciente, publicada en diciembre, es El bosque de tu nombre, una historia que transcurre en Guatemala, desde la d¨¦cada de los a?os sesenta hasta la actualidad, en medio de la guerra, el exilio y la b¨²squeda del sentido de quienes tuvieron que huir del pa¨ªs debido a la violencia.

Pacheco estudi¨® en Espa?a un doctorado en Antropolog¨ªa de Am¨¦rica y ha investigado sobre desarrollo, racismo y discriminaci¨®n, pero la literatura y la edici¨®n toman ahora su tiempo. Este a?o ha participado en las Ferias del Libro de Bogot¨¢, Antofagasta y Lima.

El nombre del sello que fund¨®, Ceques, es la palabra en quechua para las l¨ªneas imaginarias que sal¨ªan de Cusco y que organizaban los espacios sagrados y los calendarios religiosos, agr¨ªcolas y administrativos del imperio de los incas, del que esta ciudad era el ombligo. Su pretensi¨®n es editar desde este lugar, a 3.300 metros de altura, ¡°lo que ninguna editorial en Lima pueda hacer, dar cabida a peque?as y grandes estrellas¡± en literatura, historia y medioambiente. Las estrellas est¨¢n apareciendo en libros que dicen Peru llactapi qellqasqa, ¡°impreso en Per¨²¡± en quechua, desde el centro del mundo.