Intrusos
Hay obispos y curas que aprovechan sus homil¨ªas para hablar de pol¨ªtica, convirtiendo la misa en un mitin y a los feligreses en elegantes militantes vestidos de domingo. El intrusismo es rec¨ªproco porque tambi¨¦n hay pol¨ªticos que se meten en su terreno y encomiendan a una Virgen tareas de su estricta competencia, como la gesti¨®n econ¨®mica ¡ªv¨¦ase el emocionado agradecimiento de la ministra F¨¢tima B¨¢?ez a la del Roc¨ªo¡ª o incluso la lucha contra la delincuencia ¡ª?qu¨¦ otro motivo para conceder una medalla al m¨¦rito policial a Nuestra Se?ora Mar¨ªa Sant¨ªsima del Amor?¡ª. La televisi¨®n ha recogido ejemplos de ese intercambio de papeles.
As¨ª, al obispo de San Sebasti¨¢n, Jos¨¦ Ignacio Munilla, le pareci¨® que la misa de la virgen era la ocasi¨®n ideal para urgir al Gobierno a dejarse de ¡°titubeos¡± y aprobar ya la reforma de la ley del aborto. ¡°Calificar de progresista acabar con la vida humana en el seno materno es similar a reivindicar como progresista el derecho del empresario al despido libre¡±, a?adi¨®, solemne, desde el p¨²lpito. Ese mismo d¨ªa, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, pidi¨® a la Virgen de la Paloma trabajo para los madrile?os, y el consejero de Sanidad, salud para todos ellos: ¡°As¨ª ahorraremos dinero a las arcas porque no habr¨¢ que gastar para tratar a las personas¡±.
Algunos religiosos van demasiado lejos, como Jes¨²s Calvo, que en el programa La ratonera, de Alerta digital TV, calific¨® de castigo divino el c¨¢ncer del socialista Pedro Zerolo. El presentador, Armando Robles, confes¨® que no cambiar¨ªa la vida de su perro por la de Zerolo e inquiri¨® al cura si ese pensamiento era cristiano. El padre Calvo le dej¨® tranquilo. El obispado de Le¨®n le record¨® su deber de no hacer declaraciones ¡°de ¨ªndole pol¨ªtica¡±, pero Calvo no pudo resistir la tentaci¨®n de seguir ¡°aportando verdades¡± en La ratonera, como que el homosexual ¡°no tiene derecho a ejercer¡± o que el golpista Tejero es ¡°un gran hombre, t¨ªpicamente patriota¡±. El presentador festej¨® la rebeld¨ªa del cura: ¡°Seremos pocos, pero cada d¨ªa ladramos m¨¢s¡±. Fue la ¨²nica verdad que se oy¨® en su programa.
Tambi¨¦n a los pol¨ªticos les cuesta a veces acatar las formas de un Estado aconfesional. Pero todos deber¨ªan sacrificarse. Que cada mochuelo ejerza en su olivo: en la misa, misa, y en el mitin, mitin.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.