Ceremonioso encuentro entre Mozart y El Greco
La m¨²sica y la pintura se han hecho un gui?o, lo cual nunca est¨¢ de m¨¢s
La memoria se proyecta hacia el presente en las exposiciones pict¨®ricas que conmemoran el cuarto centenario del fallecimiento de El Greco. Sea en las muestras del Museo del Prado, de la Real Academia de Bellas Artes o del Museo de Santa Cruz de Toledo, actualmente en activo, los di¨¢logos culturales traspasan las fronteras del tiempo y se pueden admirar las pinturas de El Greco desde perspectivas conceptuales o desde su influencia con el paso de los siglos. Todo ello da personalidad a una celebraci¨®n que no se ha limitado en sus actos estelares a una recopilaci¨®n de las obras m¨¢s destacadas del pintor sino que ha ido m¨¢s all¨¢. Ha ¡°actualizado¡± la pintura de El Greco, por decirlo de alguna manera, tanto desde la reflexi¨®n como desde la contemplaci¨®n.
En ese planteamiento art¨ªsticamente interdisciplinar la m¨²sica tambi¨¦n ha tenido su lugar, no tanto, al menos en sus reivindicaciones principales, como una recreaci¨®n de las preferencias del pintor o del reflejo musical de la ¨¦poca, sino m¨¢s bien en el lado ritual, ceremonial si se quiere, que los espacios ligados al pintor permiten. En ese contexto se sit¨²an los dos conciertos en la Catedral de Toledo, el de abril con Riccardo Muti y el de ahora en setiembre con Ivor Bolton. M¨¢s que una relaci¨®n con El Greco lo que prima es el recuerdo p¨®stumo. De ah¨ª la idoneidad del formato de R¨¦quiem. Primero fue el de Verdi y ahora el de Mozart. Se viven estas impactantes obras de otra manera a cuando se escuchan en una sala de conciertos. La ac¨²stica de una catedral es diferente por las dimensiones del espacio y sus consiguientes reverberaciones o dispersiones del sonido. La dimensi¨®n trascendental destaca sobre las dem¨¢s. E impone emocionalmente
R?QUIEM
De Wolfgang Amadeus Mozart. Director: Ivor Bolton. Con Camilla Tilling, Ann Hallenberg, David Alegret y Alastair Miles. Orquesta y coro del Teatro Real de Madrid. Fundaci¨®n El Greco 2014. Catedral de Toledo, 20 de setiembre.
El ritual se intensific¨® a¨²n m¨¢s con la presencia de do?a Sof¨ªa, recibida por los asistentes con evidente afecto, y de un considerable n¨²mero de pol¨ªticos, sacerdotes y caras famosas. Desde el punto de vista musical, la interpretaci¨®n fue aceptable en l¨ªneas generales, lo cual es ya suficientemente meritorio dadas las circunstancias espaciales. El cuarteto de solistas estuvo particularmente acertado, en especial la soprano sueca Camilla Tilling, muy en estilo mozartiano, y el tenor catal¨¢n David Alegret, con un timbre plet¨®rico de transparencia. No desmerecieron en absoluto Hallenberg y Miles. Desde mi percepci¨®n -muy particular por las consideraciones ac¨²sticas aludidas- la orquesta estuvo m¨¢s entonada que el coro. No porque este lo hiciese mal, sino porque tuvo m¨¢s altibajos y cierta monoton¨ªa emocional. La orquesta, sin embargo, se prest¨® con m¨¢s regularidad al criterio extrovertido y animoso de Bolton, con correcci¨®n y dominio en todo momento, y con alg¨²n detalle ligeramente superficial en funci¨®n de la comunicaci¨®n inmediata.
No hay m¨¢s conciertos en la Catedral dentro de la programaci¨®n musical del Centenario de El Greco, pero s¨ª los hay en otros lugares de Toledo como el teatro Rojas y las iglesias de Santo Tom¨¦ o San Pedro M¨¢rtir. El ciclo se cierra precisamente en esta ¨²ltima iglesia el 8 de diciembre con un grupo tan excelente como es La Grande Chapelle dirigido por Albert Recasens. La Catedral se ha reservado los dos momentos estelares, los m¨¢s espectaculares, los m¨¢s ceremoniosos. La invitaci¨®n a la orquesta y coro titulares del Teatro Real, con su nuevo director, parece una elecci¨®n oportuna. As¨ª se establecen lazos de comunicaci¨®n para que iniciativas de este tipo no sean experiencias aisladas. El p¨²blico estuvo respetuoso y concentrado y, a juzgar por los aplausos, disfrut¨® de lo lindo. Las tres exposiciones de El Greco m¨¢s arriba citadas est¨¢n esperando a los que no las hayan visto. Mozart ha hecho un poco en esta ocasi¨®n de intermediario animador. La m¨²sica y la pintura se han hecho un gui?o, lo cual nunca est¨¢ de m¨¢s.
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