¡°Con un par¡±
Nombres propios se pasean por los canales, nuevos y viejos, reiterando sus presencias y sus argumentos en cada una de las cadenas
No s¨¦ qu¨¦ dir¨ªa usted si pone el telediario de Ana Blanco y ve que lo presentan Andreu y Berto. Trato de imaginar igualmente la sorpresa que sufrir¨ªamos si a Pedro Piqueras lo suplanta (de vez en cuando, no siempre) El Gran Wyoming. Igualmente dar¨ªa qu¨¦ pensar que las ma?anas que presenta Mar¨ªa Casado estuviera llena a veces de los compa?eros que tiene Mamen Mendiz¨¢bal en las tardes de laSexta. Y as¨ª sucesivamente.
Pues eso que no pasa, y que no pasar¨ªa en los informativos, ocurre en otra banda de las teles espa?olas, la que se dedica al ramo de las tertulias. Nombres propios se pasean por los canales, nuevos y viejos, reiterando sus presencias y sus argumentos en cada una de las cadenas. Abres la tele por la ma?ana, y ah¨ª est¨¢n los que anoche estuvieron en otra. Pones la radio y de nuevo saltan esos nombres propios. Regresas por la tarde a casa y los oyes de nuevo, o los ves, en canales en los que no hab¨ªan estado por las ma?anas. Est¨¢, adem¨¢s, el caso de Marhuenda, cuyo don de la ubicuidad argumentativa est¨¢ ya en las enciclopedias.
Si ese ejercicio de asombrarse con la reiteraci¨®n de los nombres propios lo hiciera un ingl¨¦s que nunca vio aqu¨ª las televisiones se asombrar¨ªa a¨²n m¨¢s, pues en sus televisiones (y no s¨®lo en la p¨²blica) los periodistas cuentan informaciones (o lo que saben), mientras que las opiniones y los argumentos los ponen personas (y personalidades) que han tenido o tienen a su cargo la obligaci¨®n de investigar (en la pol¨ªtica, en la econom¨ªa o en las guerras) o son expertos en las sucesivas materias que est¨¢n en el candelabro.
Lo que pasa entre nosotros es mareante, debo decirlo; lo que me pregunto es por qu¨¦ las cadenas no han puesto coto, al menos, a las reiteraciones que permiten que est¨¦n los mismos en todas las cadenas del espectro. El jueves por la noche fui cambiando para verlos y en efecto ah¨ª los encontr¨¦, diciendo sus argumentos sobre las noticias del d¨ªa, los de la ma?ana y los de la tarde de nuevo por la noche. En una de estas uno clav¨® una flecha contra Miguel Blesa y dijo que este hab¨ªa llevado a cabo sus fechor¨ªas ¡°con un par¡±. Me levant¨¦ ayer con la intenci¨®n de verlo en otra cadena para comprobar si hab¨ªa avanzado algo en su argumento.
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