Una antolog¨ªa personal y en familia

Una antolog¨ªa pero no una cualquiera. Dice Serrat que la selecci¨®n del medio centenar de canciones que forman Antolog¨ªa desordenada, entre las m¨¢s de 600 composiciones de su cancionero, es ¡°una elecci¨®n personal y cada quien tendr¨¢ la suya¡±, y as¨ª es, pero tan personal como esta elecci¨®n ha sido la gente con la que ha decidido rodearse para celebrar sus cincuenta a?os en los escenarios. Porque m¨¢s de la mitad de su nuevo cu¨¢druple ¨¢lbum est¨¢ compartido con otros m¨²sicos en duetos, que le dan una enriquecedora personalidad a una obra sin precedentes en su carrera.

A diferencia del t¨ªpico recopilatorio, Antolog¨ªa desordenada es un trabajo en familia, lleno de voces y di¨¢logos, donde muchas almas se juntan para formar una sola bajo la lumbre del cancionero de Serrat. ¡°Es un maestro de verdad¡±, asegura V¨ªctor Manuel, que pone su voz en Hoy puede ser un gran d¨ªa. ¡°Ahora, se emplea con mucha ligereza el calificativo de maestro pero con ¨¦l es justo. Su trayectoria es popular y culta al tiempo¡±, a?ade. El propio Miguel R¨ªos, que ya hab¨ªa grabado sus primeras versiones de twist bajo el seud¨®nimo de Mike R¨ªos antes de que el cantautor catal¨¢n editase sus primeras canciones en 1965, asegura que es ¡°un referente indiscutible de la evoluci¨®n cultural del pa¨ªs¡±.

En total, son 31 duetos, de los cuales seis de ellos conservan sus registros originales. Es el caso del d¨²o con Noa en Es caprichoso el azar; con Mina, en Sin piedad; o con Soledad Gim¨¦nez, en Pendiente de ti, grabada en 1992 para el ¨¢lbum Utop¨ªa. ¡°Fue muy divertido. Me llam¨® por tel¨¦fono a casa y me dijo que era Joan Manuel Serrat. ?No le conoc¨ªa de nada y no me lo esperaba! ?Casi me caigo al suelo! Le admiraba much¨ªsimo. El primer disco que me compr¨¦ fue de ¨¦l¡±, recuerda entre risas Soledad Gim¨¦nez, que, en esa ¨¦poca, estaba empezando a saborear el ¨¦xito de Presuntos Implicados y se traslad¨® a Madrid desde Valencia con todos sus ¡°respetos y miedos¡± al tratarse de una colaboraci¨®n de tal envergadura, pero pronto se le quitaron porque se encontr¨® con un hombre ilusionado con el proyecto y ¡°muy trabajador¡±.

Otro trabajador de la m¨²sica, de la misma generaci¨®n de Serrat y que guarda muchas vivencias con ¨¦l, es Miguel R¨ªos, quien comparte micr¨®fono en Cantares, que mantiene su formato original de la gira El gusto es nuestro de 1996, en la que tambi¨¦n participaron V¨ªctor Manuel y Ana Bel¨¦n. ¡°Es uno de los temas m¨¢s emblem¨¢ticos de su carrera. Lo hab¨ªa versionado en mi disco Conciertos de Rock y Amor, en 1972, porque pens¨¦ que ten¨ªa una lectura blues, a lo Blood, Sweat & Tears, salvando las distancias¡±, asegura R¨ªos. ¡°No s¨®lo recuerdo la emoci¨®n que me produc¨ªa cantar los versos de Machado con Serrat. Ten¨ªa la sensaci¨®n de ser el receptor de la fuerte corriente emocional que la canci¨®n provocaba en el p¨²blico. Sent¨ªa una descarga de placer¡±, recuerda.

De esa exitosa gira es tambi¨¦n Hoy puede ser un gran d¨ªa, la ¨²ltima canci¨®n a m¨¢s de una voz que se ofrece en su presentaci¨®n original. En este caso, es m¨¢s que un dueto porque toma cariz de parranda orquestal en las gargantas de Ana Bel¨¦n, V¨ªctor Manuel, el propio R¨ªos y El Nano. ¡°Cuando se arm¨® el repertorio todos tuvimos voz, elegimos las canciones a cantar individualmente y tambi¨¦n las que nos parec¨ªan que pod¨ªan compartirse. Joan propuso compartir Hoy puede ser un gran d¨ªa y todos decidimos que podr¨ªamos abrir el concierto con ella¡±, cuenta V¨ªctor Manuel. ¡°Aquellos conciertos fueron espectaculares y el entusiasmo del p¨²blico indescriptible. Fuimos, creo, muy felices con aquel trabajo¡±, apunta. El cantante asturiano aprovecha para contar alguna an¨¦cdota: ¡°A menudo nos confunden, bueno, m¨¢s que confundirnos hay gente que se hace un nudo y pueden situarle a ¨¦l como pareja de Ana Bel¨¦n y a m¨ª llamarme V¨ªctor Manuel Serrat. Hemos viajado mucho juntos, incluidas familias y, claro, alrededor hay muchas historias. El otro d¨ªa encontr¨¦ una foto en la que tambi¨¦n est¨¢ Miguel R¨ªos, una portada de Cambio 16 de 1981, donde nos trataban de ¡®resucitados¡¯".

El resto del cancionero a dos voces ha requerido el paso del artista invitado por el estudio de grabaci¨®n durante m¨¢s de cuatro meses en este a?o. Para la ocasi¨®n, Serrat no se ha andado con medias tintas y ha llamado a toda una legi¨®n de amigos y compa?eros de profesi¨®n con los que tiene una relaci¨®n especial, dotando a Antolog¨ªa desordenada de un colorido sin igual. Hay grandes estrellas del pop espa?ol como Alejandro Sanz, que interpreta Romance de curro de Palmo, Pablo Albor¨¢n, que canta en catal¨¢n Paraules D¡¯Amor, Dani Mart¨ªn, que se atreve con Se?ora, o Estopa, que se ponen al servicio en Me¡¯n vaig a peu. Tambi¨¦n se citan viejos camaradas, como Luis Eduardo Aute, que encara Y el amor, Dulce Pontes, con su fado en A ese p¨¢jaro dorado, o el hombre con el que form¨® La Orquesta del Titanic, el Zipi cuando Serrat hace de Zape, es decir, Joaqu¨ªn Sabina, que canta Me gusta todo de ti.

Latinoam¨¦rica, que tanto le ha dado a Serrat despu¨¦s de que el franquismo le condenase al ostracismo por criticar los ¨²ltimos fusilamientos del r¨¦gimen, est¨¢ fabulosamente representada con tres pesos pesados de la canci¨®n de autor. La argentina Mercedes Sosa, conocida como La voz de Am¨¦rica, canta Aquellas peque?as cosas (en su formato original grabada antes de su fallecimiento en 2009) que sol¨ªa interpretar en sus directos en memoria de su madre, y los cubanos Pablo Milan¨¦s, con Te guste o no, y Silvio Rodr¨ªguez, galardonado junto con el propio Serrat como el mejor cantautor hispanoamericano de la segunda mitad del siglo XX y que canta Luc¨ªa, una de las grandes confesiones de amor de nuestra m¨²sica. Pero tambi¨¦n est¨¢n los raperos de Calle 13 con Algo personal.

El mundo del flamenco tambi¨¦n arropa a Serrat. Miguel Poveda comparte El meu carrer y Carmen Linares hace lo suyo en La saeta. Lolita Flores acompa?a al compositor de Poble Sec en su composici¨®n m¨¢s c¨¦lebre, Mediterr¨¢neo, considerada por algunas publicaciones musicales como la mejor canci¨®n de la historia de la m¨²sica espa?ola. ¡°Ha sido un regalo. Me llam¨® Javier Lim¨®n y me dijo que Serrat quer¨ªa cantar conmigo Mediterr¨¢neo¡±, cuenta Lolita, que pas¨® por el estudio el pasado verano. ¡°Me volv¨ª loca porque cantarla con ¨¦l era una de las ilusiones de mi vida. Esta canci¨®n me ha dado much¨ªsimo. La cant¨¦ en la pel¨ªcula Rencor y, pr¨¢cticamente, me vali¨® el Goya. Pero, realmente, era todo nervios junto a ¨¦l. Cuando me met¨ª en el estudio, temblaba¡±, reconoce.

Todos son amigos, incluido el presentador de televisi¨®n Andreu Buenafuente que participa en Perque la gent s¡¯avorreix tant, pero tambi¨¦n admiradores. Porque todos los que forman parte de este ambicioso proyecto ven a Serrat como una figura imprescindible de la m¨²sica espa?ola del ¨²ltimo medio siglo. La cantante Silvia P¨¦rez Cruz, que pone su voz en Plany al mar, asegura que la m¨²sica del compositor catal¨¢n ha sido ¡°banda sonora¡± de su vida. ¡°Ten¨ªa que dejar de pensar con qui¨¦n estaba cantando. Era como un fotomontaje¡±, dice. ¡°Pensaba que si mi padre lo viera alucinar¨ªa mientras mi madre estaba encantada. Se me cruzaban dos dimensiones. Porque Serrat siempre estuvo presente en mi vida. Mis padres lo cantaban en el coche y en casa, cuando nos reun¨ªamos en el sal¨®n a cantar en vez de ver la televisi¨®n. Serrat me lleg¨® a trav¨¦s de la voz de mi madre y la guitarra de mi padre¡±, cuenta. Lo mismo le pasa a Lolita: ¡°La primera vez que le escuch¨¦ fue en el Palacio de la M¨²sica cuando ten¨ªa 12 a?os. Mi padre me traduc¨ªa sus discos del catal¨¢n al castellano¡±. Incluso m¨²sicos de la generaci¨®n de El Nano sit¨²an la importancia de su obra desde sus primeros d¨ªas. ¡°Ha sido importante para m¨ª, es como un hermano mayor que, por donde t¨² vas, ¨¦l ya ha pasado. Pero sobre todo es un referente en Espa?a y Latinoam¨¦rica para millones de personas. Yo, que le segu¨ªa antes de conocerlo personalmente, estaba viendo su concierto en el Teatro Carlos III de Madrid el d¨ªa que se deslumbr¨® y cantando se cay¨® al foso de la orquesta¡±, cuenta V¨ªctor Manuel.

El m¨²sico que comenz¨® como un alumno de Jacques Brel capaz de componer rumba catalana o trasladar la l¨ªrica de poetas como Antonio Machado, Rafael Alberti o Josep Carner al cancionero popular, el int¨¦rprete que cre¨® un nuevo modelo de cantante del pueblo con su car¨¢cter na?f y sus gritos generacionales, el cantor de la esperanza y la libertad, ese artista irrepetible, celebra medio siglo en los escenarios mientras la m¨²sica espa?ola y latinoamericana reconocen su legado inigualable. ¡°Es el autor m¨¢s grande en nuestra lengua¡±, asegura Soledad Gim¨¦nez. ¡°Serrat es el poeta de este siglo¡±, afirma Lolita. ¡°Est¨¢ enredado en el inconsciente colectivo de un pu?ado de generaciones y forma parte de la banda sonora D'un temps, d'un pa¨ªs¡±, afirma Miguel R¨ªos. Una banda sonora a la que ahora todos cantan en Antolog¨ªa desordenada.