Hilos
La buena conversaci¨®n se desata en la confianza. Y en ocasiones el sof¨¢ Chester propicia tambi¨¦n esa rara y valiosa condici¨®n
La vida trenza hilos lejanos. Es quiz¨¢ el mayor de sus secretos. Pas¨® durante la entrevista de Luz Casal en el Chester de Risto Mejide. Ese sof¨¢ es a veces un asiento de clavos, donde el invitado, inc¨®modo, se pregunta en silencio por qu¨¦ ha aceptado venir. Tiene que ver con la autoridad que el anfitri¨®n se arroga, capaz de anunciarle a Alberto Sanju¨¢n que no le consideraba merecedor de ser invitado al programa o de soltarle a Luz que no ten¨ªa el cuerpo de una mujer deseable. Suena en ocasiones a una obligaci¨®n para no sonar a entrevistador pasteloso, para que nadie se olvide de que al frente del programa hay un juez implacable. Pero la buena conversaci¨®n no encuentra ah¨ª su mejor baza. Produce atasco, autodefensa, reserva y finalmente una cortes¨ªa algo impostada para salir del paso.
La buena conversaci¨®n se desata en la confianza. Y en ocasiones el sof¨¢ Chester propicia tambi¨¦n esa rara y valiosa condici¨®n, pero solo cuando escuchar y poner a escuchar a los espectadores es m¨¢s importante que todo lo dem¨¢s. No hay ya en la televisi¨®n espacios de entrevista, y si los hay est¨¢n condicionados a una dictadura del formato trabado, donde al espectador se le considera un tonto incapaz de concentrarse m¨¢s de dos minutos sobre un mismo asunto. Incluso se incluyen titulares rotulados en pantalla para que ese espectador, tratado de bobo a toda hora, caiga en la cuenta de lo m¨¢s importante que est¨¢ diciendo el invitado. Pero Luz Casal es anguila que escapa hacia su propio r¨ªo, convencida de que para gozar de una larga carrera musical, lo mejor es no despistar demasiado sobre la esencia de una voz.
Al final del programa el sof¨¢ se subasta en favor de causas humanitarias. Luz, que lleg¨® a considerar el c¨¢ncer que padece como un impuesto, una tasa que pagar, decidi¨® donarlo al centro de bioqu¨ªmica que el investigador Carlos L¨®pez Ot¨ªn dirige en la Universidad de Oviedo. Es ah¨ª donde se trenza ese hilo m¨¢gico, que lleva desde una cantante de voz prodigiosa hasta un sabio discreto empe?ado en conocer algo m¨¢s de la gen¨¦tica humana. La vida establece v¨ªnculos insospechados, porque hacer amigos es quiz¨¢ la mejor tarea a la que dedicarse mientras se sobrevive.
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