La cr¨ªtica londinense se rinde a las mujeres ¡®british¡¯ de Almod¨®var

A la segunda fue la vencida. Reescrita tras su decepcionante y fugaz paso por Nueva York en 2010, con un nuevo elenco encabezado por la poderosa actriz brit¨¢nica Tamsin Greig, se puede decir que la versi¨®n en clave de musical de la pel¨ªcula de Pedro Almod¨®var Mujeres al borde de un ataque de nervios, con partitura de David Yazbeck, libreto de Jeffrey Lane y dirigida por Bartlett Sher, triunf¨® el lunes en su estreno en el West End londinense. Las cr¨ªticas aparecidas a lo largo del martes en las ediciones digitales de los principales peri¨®dicos londinenses coinciden en elogiar una obra ¡°brillante¡±, ¡°magn¨ªfica¡± y ¡°enloquecidamente divertida¡±. Tanto es as¨ª que, seg¨²n recoge Paul Taylor en su cr¨ªtica en The Independent, el propio Bartlett Sher se permiti¨® referirse ir¨®nicamente al paso de la obra por Broadway en 2010 como ¡°el ensayo m¨¢s caro de la historia del teatro¡±.

El director ¡°se ha ganado el derecho a soltar esa ocurrencia¡±, opina Taylor, pues el estreno londinense ¡°posee un foco y una profundidad de la que lamentablemente carec¨ªa la sobreproducida encarnaci¨®n original¡± de Broadway. La nueva versi¨®n de la obra, en palabras de Taylor, ¡°es una celebraci¨®n gloriosamente amanerada, aunque sinceramente sentida, de los poderes de supervivencia y autoemancipaci¨®n de la mujer¡±. No es de extra?ar, concluye el cr¨ªtico del Independent, ¡°que Almod¨®var haya dado su bendici¨®n a esta versi¨®n vivificante¡± de su obra.

Dominic Cavendish a¨²n va m¨¢s lejos en sus elogios en el Daily Telegraph y considera que ¡°el recuento de chistes es mucho mayor que en la pel¨ªcula de 1988¡±, que supuso el despegue internacional de Pedro Almod¨®var. ¡°Desde el principio¡±, escribe el cr¨ªtico del rotativo centenario, ¡°hay movimiento, fluidez y una impredecible vitalidad¡±. Todo ello proporciona ¡°una velada de placer absoluto¡±.

Todas las rese?as coinciden en destacar el trabajo de Tamsin Greig en el papel de Pepa, la actriz de doblaje abandonada por su amante, interpretada por Carmen Maura en el filme espa?ol. Una actuaci¨®n ¡°formidable¡±, en palabras del cr¨ªtico del Independent. El de Greig, una actriz muy popular en Reino Unido, poco versada hasta la fecha en la comedia, constituye un ¡°impresionante debut en el g¨¦nero musical¡±, escribe Cavendish en el Telegraph. ¡°En ella recae el peso principal de la obra¡±, opina Michael Billington en The Guardian. Su ¡°vivaracha actuaci¨®n¡±, prosigue Billington, ¡°nos recuerda que el musical, como la pel¨ªcula de Almod¨®var, es en ¨²ltima instancia un tributo a la capacidad de supervivencia de su hero¨ªna¡±.

Si bien esencialmente elogiosa -le otorga tres estrellas sobre cinco y la califica en el titular de ¡°chifladamente divertida¡±-, la cr¨ªtica del Guardian es quiz¨¢ la menos entusiasta de las publicadas ayer en los principales peri¨®dicos, al introducir una pega al proyecto. Este, seg¨²n Billington, ¡°sigue sin resolver un problema b¨¢sico: c¨®mo incorporar canciones sin ralentizar la inercia de la trama¡±.

Pedro Almod¨®var asisti¨® anoche al estreno, en un abarrotado Playhouse Theatre, con la tranquilidad de haber visto ya el montaje en dos funciones previas. De modo que no debi¨® de sorprenderle que, cuando al final de la representaci¨®n fue invitado a saludar desde el escenario, rodeado de sus versionadores y de sus nuevas chicas almod¨®var con acento british, el patio de butacas entero puesto en pie le brindara una entregada ovaci¨®n. Para el cineasta espa?ol, el resultado de la adaptaci¨®n es ¡°maravilloso¡± y constituye un ¡°homenaje incre¨ªble¡± a su pa¨ªs.

Desconocedores a¨²n de las elogiosas cr¨ªticas del d¨ªa siguiente, las indisimuladas sonrisas de los amigos que acompa?aban a Pedro Almod¨®var ¨CRosy de Palma, Rosario Flores, Boris Izaguirre- ya auguraban un happy ending en la fiesta posterior al estreno, celebrada en la imponente biblioteca del One Whitehall Place, un elegante palacio construido en 1885 para albergar el Club Liberal Nacional.

Rebajada la sobriedad del espacio por los arpegios de una guitarra espa?ola ¨Cun recurso un poco facil¨®n de m¨¢s-, se sirvieron croquetas y alb¨®ndigas (?de chorizo!), acompa?adas de chupitos de gazpacho. Este, sin embargo, carec¨ªa de aquel genial ingrediente secreto ideado por el padre manchego de la criatura. Ese pu?ado de valiums, triturados junto al tomate, el pepino, el pimiento y el ajo, que aportan a Mujeres al borde de un ataque de nervios ese saz¨®n de disparate para celebrar el poder de las mujeres y el vigor del Madrid de finales de los ochenta que, desde ayer, se a?ora tambi¨¦n en Londres.