Daevid Allen, m¨²sico visionario
Fue miembro fundador de Soft Machine y cabecilla del grupo Gong, donde cre¨® una mitolog¨ªa fantasiosa
Daevid Allen, m¨²sico inclasificable, falleci¨® en su Australia natal el pasado viernes, con 77 a?os. En febrero, hab¨ªa anunciado que se extend¨ªa el c¨¢ncer que padec¨ªa y que renunciaba a nuevos tratamientos para prepararse a bien morir. Lo hizo acompa?ado por hijos, nietos y amigos, que anunciaron en Facebook que habr¨ªa m¨¢s celebraciones que llanto.
En 1961, Australia era un lugar provinciano y asfixiante. Allen viaj¨® a Europa para integrarse en la beat generation. Tocaba entonces guitarra de jazz pero, como muchos de sus coet¨¢neos, fue evolucionando hacia un rock idiosincr¨¢sico, al mismo tiempo que se integraba en lo que luego se conocer¨ªa como el movimiento hippy.
Conviene recordar que aquellos c¨ªrculos beat eran minoritarios, perfectamente accesibles a alguien tan encantador como Daevid, que trat¨® a ilustres trotamundos como Allen Ginsberg o William Burroughs. En 1966, tom¨® un nombre inventado por Burroughs para crear en Cambridge The Soft Machine, con Mike Ratledge, Robert Wyatt y Kevin Ayers. A la vuelta de unas actuaciones en Francia, los aduaneros le impidieron entrar en el Reino Unido, alegando que no hab¨ªa renovado su visado. Nadie se lo tom¨® como algo dram¨¢tico: Daevid pudo as¨ª participar -de manera afable, nada de violencia- en los sucesos de Mayo del 68.
Fue el catalizador de dos
Durante la resaca de aquellos hechos, las autoridades francesas iniciaron la caza de "extranjeros indeseables". Daevid y su paciente compa?era, la londinense Gilli Smyth, entonces una profesora en La Sorbona, huyeron hac¨ªa Dei¨¤, donde el escritor Robert Graves hab¨ªa creado un microclima de tolerancia al que se acog¨ªan muchas almas perdidas. En Mallorca naci¨® Gong, supuestamente tras un encuentro con el jazzman parisiense Didier Malherbe, que resid¨ªa en una cueva. Gracias a la labia de Daevid, Gong lo mismo grababa en BYG, sello dedicado al free jazz, que en Virgin, entonces un experimento contracultural alentado por Richard Branson.
Durante sus inicios, Gong funcion¨® como una comuna en el sur de Francia. Allen desarroll¨® una cosmogon¨ªa que part¨ªa de la "tetera celestial", una analog¨ªa creada por Bertrand Russell en sus pol¨¦micas sobre la existencia de Dios. En sucesivos discos, con mucho humor, Allen fue narrando las aventuras de Zero The Hero y su acercamiento al Planeta Gong, mediante episodios de drogas y sexo. Marcadas discretamente por el budismo, sus grabaciones reflejaban los viajes f¨ªsicos del grupo y su cambiante formaci¨®n. M¨¢s que un gur¨², Daevid funcionaba como un cham¨¢n de pacotilla ; nadie se le tomaba en serio si se colocaba el famoso gorro con h¨¦lices de duendecillo.
Con varias paradas, Gong se mantuvo hasta el presente. Bajo el paraguas del nombre se cobijaron escisiones y proyectos paralelos: Paragong, Pierre Moerlen¡¯s Gong, Planet Gong, Mother Gong, New York Gong, Maison Gong, Gong Global Family. En aquel grupo proteico se integraron m¨²sicos del calibre de Pip Pyle, Tim Blake, Chris Cutler y Steve Hillage, que luego protagonizar¨ªa una exitosa carrera como solista.
Daevid Allen encarnaba una l¨²dica idea del rock psicod¨¦lico que no reconoc¨ªa l¨ªmites: trabaj¨® incluso con Euterpe, grupo mallorqu¨ªn de renovadores del folk espa?ol. Se adaptaba a las circunstancias y al sonido dominante en sus diversos lugares de residencia. Voluntariamente alejado del rock business convencional, se manten¨ªa con actuaciones y la edici¨®n de numerosas grabaciones de audio y video.
Una de sus autoediciones fue el libro Gong dreaming I, que cubr¨ªa desde los inicios de Soft Machine a la fundaci¨®n de Gong. Lejos de cualquier pretensi¨®n historicista, Aellen enhebraba "visiones, alucinaciones y recuerdos personales". Con modestia, reconoc¨ªa que "hay mejores guitarristas, cantantes, compositores y contadores de histor¨ªas en todos los lugares que yo visito". Pero solo ¨¦l tuvo la fortuna de ser catalizador de dos de los grupos esenciales del underground europeo.
Babelia
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