Una gran jaima saharaui en mitad de El Retiro
Federico Guzm¨¢n inaugura en el Palacio de Cristal del Reina Sof¨ªa una instalaci¨®n ef¨ªmera
Cuando a finales de 1975, los saharauis tuvieron que abandonar las ciudades para instalarse en el desierto, muchos de ellos lo hicieron con lo que llevaban puesto. No llevaban nada con lo que montar refugios para guarecerse en el exilio. Las mujeres recurrieron entonces a sus melhfas (vestimenta tradicional saharaui) para montar tiendas improvisadas, rudimentarias jaimas, bajo las que instalarse con sus familias. El artista Federico Guzm¨¢n (Sevilla, 1964) refiri¨® ayer esta historia, conocida por ¨¦l por una pol¨ªtica saharaui, durante la inauguraci¨®n de una espectacular instalaci¨®n titulada Tuiza. Las culturas de la Jaima, dentro del palacio de Cristal del parque de El Retiro, en Madrid.
Tuiza significa solidario colectivo y hace referencia a reunirse, participar y construir algo entre todos, y precisamente di¨¢logo es el mensaje ¨²ltimo de esta pieza construida expresamente para esta exposici¨®n con la que Federico Guzman quiere recordar que la diversidad cultural existe para que aprendamos unos de otros. La exposici¨®n, que permanecer¨¢ abierta desde hoy viernes hasta el 30 de agosto, es una coproducci¨®n entre el Reina Sof¨ªa y la Fundaci¨®n Donostia/San Sebasti¨¢n, Capital cultural 2016.
Entre casta?os de indias, cedros, cipreses o sauces en su m¨¢ximo esplendor primaveral, la jaima asoma como un gigantesco objeto pict¨®rico. La techumbre est¨¢ realizada con un fin¨ªsimo y semitransparente tejido acr¨ªlico decorado con peque?os metidos geom¨¦tricos multicolores. En las jaibas tradicionales, as¨ª son tambi¨¦n los laterales. Pero para su pieza, Federico Guzm¨¢n ha preferido recurrir a melhfas tejidas por colectivos de mujeres de Bojador que han dise?ado y tejido las telas para este proyecto espec¨ªfico. ¡°Yo quer¨ªa que los motivos fueran m¨¢s reivindicativos¡±, explica el artista. ¡°Pero ellas eligieron hablar en sus telas de los motivos que mueves sus vidas: el repeto a los ancianos, el cari?o por los hijos, el amor por sus semejantes¡±.
Dentro de la Jaima, el visitante se encuentra con un confortable recinto ocupado por alfombras orientales, cojines, alfombras de rezo, mesas-soporte de juegos de t¨¦, asientos forrados de brocado y una moqueta de colores c¨¢lidos que se extiende por todo el suelo. El espacio ha sido concebido como una invitaci¨®n al di¨¢logo con todos los visitantes y una oportunidad para escuchar historias y teor¨ªas que no est¨¢n escritas en ning¨²n sitio. Es cultura oral para una instalaci¨®n ef¨ªmera en la que hasta el 30 de agosto se celebrar¨¢n recitales de poes¨ªa, conferencias, proyecciones de cine y recitales de m¨²sica, dentro de un programa que permanece abierto a sugerencias.
Manuel Borja-Villel, director del Reina Sof¨ªa, se?ala que el Palacio de Cristal es una estructura de vidrio del XIX que representa a la Europa de los grandes imperios y que, con esta exposici¨®n, est¨¢ ocupada por una edificaci¨®n absolutamente distinta. Esta jaima es una arquitectura n¨®mada que cuenta relatos que solo se encuentran en la tradici¨®n toral. Es una representaci¨®n dirigida a los que no tienen voz y lo que se perciba dentro tiene que ver con el intercambio y la negociaci¨®n. Este proyecto est¨¢ en la l¨ªnea del museo de replantear el proceso de colonizaci¨®n que ya hemos visto en otras exposiciones¡±.
Jo?o Fernandez, subdirector del museo y comisario de esta exposici¨®n, conocedor del Federico Guzm¨¢n y su obra desde hace 18 a?os, asegura que este artista tiene una manera de entender el arte conseguida a partir de los trabajos realizados en Nueva York y Bogot¨¢. ¡°Presenta otras formas de ver el mundo a partir de la obra art¨ªstica. El resultado es una coreograf¨ªa entre el lenguaje del artista y las culturas con las que dialoga. Aqu¨ª tenemos una jaiba y una plaza desde las que abordar tanto denuncias sociales como historias ¨ªntimas¡±.
Babelia
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