Herralde recibe la medalla de oro del C¨ªrculo de Bellas Artes
El editor recibe el reconocimiento de la instituci¨®n madrile?a por su trayectoria de 50 a?os
Casi medio siglo aglutinando libros dan para algo m¨¢s que un reconocimiento, aunque el de ayer no estuvo nada mal para Jorge Herralde (Barcelona, 1936). Cinco d¨¦cadas de independencia, juicio, estilo, referencia llevan el nombre de este editor al frente de Anagrama. Recibi¨® ayer la Medalla de Oro del C¨ªrculo de Bellas Artes, un reconocimiento madrile?o para la globalidad con marca profundamente catalana de la literatura que se publica en espa?ol.
Lo arroparon tres autores de su cat¨¢logo pioneros, fieles a la marca Herralde, como son Soledad Pu¨¦rtolas, Vicente Molina Foix, Vicente Verd¨², y Juan Cruz, adjunto al director de EL PA?S. En pleno relevo dentro de la casa que cre¨® en 1969, Herralde no se ve aun de retirada. ¡°El d¨ªa a d¨ªa sigue siendo muy intenso¡±, asegura.
Conserva su media equilibrada. ¡°Unas 70 novedades y 30 o 35 libros de bolsillo al a?o. Para que nos d¨¦ tiempo a cuidar como es debido a todos los autores¡±. Marca de la casa: ¡°Hacer convivir el trabajo artesanal que supone crear un libro con la publicaci¨®n a gran escala¡±. En ese modelo sostenible y exitoso, Herralde ha sobrevivido con independencia a las fusiones o las absorciones de los grandes y ha unido el futuro de su firma a la italiana Feltrinelli. ¡°Cuando comenc¨¦ en los sesenta, tres eran mis modelos de editores: Fran?ois Maspero, que acaba de morir, Feltrinelli y Pepe Mart¨ªnez, impulsor de Ruedo Ib¨¦rico¡±.
Comenz¨® en su particular cruzada de compromiso con la izquierda editando mucho ensayo, mucha pol¨ªtica, sociolog¨ªa¡ Un negocio que no daba para alegr¨ªas que llenaran el bolsillo, pero que hac¨ªan de la edici¨®n un asunto de barricada. ¡°Los a?os ochenta fueron diferentes. Decidimos aglutinar aquella naciente nueva narrativa espa?ola de la que nos llegaban ya s¨ªntomas¡±, comenta. Al tiempo, introdujo en Espa?a y Am¨¦rica Latina a un gran mapa de autores internacionales que tradujo con enorme ¨¦xito.
El recuerdo de su sinton¨ªa con el Madrid de los a?os setenta ¡ªque ha durado hasta hoy¡ª le lleva a recordar a sus amigos de Enlace y a las reuniones organizadas en torno al abrigo de Pedro Altares en Cuadernos para el di¨¢logo. ¡°Nos acog¨ªan a m¨ª y a seis editores catalanes m¨¢s dentro de su c¨ªrculo¡±. El relevo lo tiene ya anunciado. Silvia Ses¨¦ se har¨¢ cargo de Anagrama cuando se retire en a?o y medio.
Babelia
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