M¨¦xico DF, depuradora emocional
Francisco Goldman es un conductor biso?o, la v¨ªctima de una paliza y el sabueso de un crimen en ¡®El Circuito Interior¡¯, cr¨®nica sentimental de una ciudad
Una hora antes de la entrevista, el reportero tom¨® un taxi para acudir al encuentro con el escritor Francisco Goldman. Uno o dos minutos despu¨¦s, mientras ojeaba el tel¨¦fono, su taxi, conducido por un se?or mayor, fue embestido por una furgoneta. No pas¨® nada, una puerta hundida. Tambi¨¦n una pregunta: ?C¨®mo, cu¨¢nto, de qu¨¦ manera amar a esta ciudad?
Goldman, Boston, 1954, hijo de un jud¨ªo de origen ruso y de una emigrante guatemalteca, la quiere como es. ¡°Siempre ha sido mi refugio. Cuando cubr¨ªa las guerras de Centroam¨¦rica ven¨ªa a descansar de aquel asco, y tambi¨¦n me ha servido para escapar del asco de ser norteamericano¡±.
El reportero accidentado le pregunta si no le parece una ciudad agresiva. ¡°Yo no encuentro el DF agresivo. Nueva York es agresivo. Todo el mundo te grita, son hostiles, cada uno a lo suyo. Esa codicia, ese ultramaterialismo¡±. Parte del a?o vive en Brooklyn. Pero dice que Nueva York se ha vuelto un lugar de ricos ¡°est¨¦ril¡± para la creaci¨®n. La ciudad que ¨¦l adora, ¡°a d¨®nde llevo 20 a?os huyendo para encontrar una vibra creativa¡±, es la Ciudad de M¨¦xico, M¨¦xico DF.
M¨¦xico DF es mi refugio. Nueva York es hostil, codiciosa, ultramaterialista
El Circuito Interior (Turner) es una cr¨®nica sentimental del DF que continua el hilo de la anterior novela de Goldman, D¨ª su nombre (Sexto Piso, 2012), en la que contaba su historia de amor con la joven escritora mexicana Aura Estrada y el final de esa historia de amor: a ella la mat¨® una ola en 2007, cuando estaban a punto de cumplir dos a?os casados.
Si D¨ª su nombre es la narraci¨®n del duelo del escritor, El Circuito Interior, nombre de una circunvalaci¨®n de la capital mexicana y t¨ªtulo de un poema de Efra¨ªn Huerta, cuenta c¨®mo Goldman se relacion¨® con la ciudad para afrontar su duelo. Despu¨¦s de que ella muriera lleg¨® a pensar en irse del DF para recomenzar en otro sitio. ¡°Era demasiado dif¨ªcil estar siempre topando con los espantos de nuestra felicidad¡±, dice. Pens¨® en Ciudad Ho Chi Minh. Finalmente se aferr¨® al DF. En el verano de 2012 puso un particular cierre simb¨®lico a su duelo y en el de 2013 conoci¨® de otra manera la ciudad reporteando el duelo de los otros: los familiares de 13 j¨®venes asesinados. Las aventuras del autor durante esos dos veranos componen su Circuito Interior.
El cierre simb¨®lico del duelo consisti¨® en enfrentarse a un miedo ¨ªntimo y comprensible: conducir por el DF. En el verano de 2012 se cumpl¨ªan cinco a?os de la muerte de su esposa y, a¨²n traumatizado por su p¨¦rdida, decidi¨® ir a clases para aprender a manejar coches de cambio manual y lanzarse a las calles eligiendo destino al azar: apuntando a ciegas con el dedo en un mapa. No aprendi¨® en manual, as¨ª que acab¨® fluyendo por el DF en autom¨¢tico. Ante Goldman, el pandemonio: ¡°Los cruces como tent¨¢culos de pulpo y las avenidas semejantes a las pistas de los derbies de demolici¨®n; los coches entrecruz¨¢ndose desde todas direcciones al mismo tiempo, y sin chocar, como si fuesen fantasmas¡±, escribe en el libro.
Despu¨¦s de la muere de su esposa Aura pens¨® en irse del DF. Se plante¨® mudarse a Ciudad Ho Chi Minh
Tambi¨¦n fue el verano de 2012 el de su contacto con el movimiento estudiantil. Tirando de su lado de periodista, el escritor y colaborador de The New Yorker sigui¨® de cerca la versi¨®n mexicana de Los Indignados y de Occupy Wall Street, el fen¨®meno contestatario #YoSoy132. Ese verano ¨C¡°una lenta y alcoh¨®lica ca¨ªda en el abismo¡±¨C incluy¨® un hito bochornoso pero sanador, seg¨²n ¨¦l, en su proceso de duelo: una noche se meti¨® en un partybus de ni?os ricos y los ni?os ricos acabaron d¨¢ndole una paliza.
Pas¨® un a?o y ocurri¨® la matanza del Heavens, el asesinato de un grupo de j¨®venes de un barrio popular. El autor de La larga noche de los pollos blancos (1992), El Esposo Divino (2004) o El arte del asesinato pol¨ªtico (2007) se adentr¨® en Tepito, el legendario barrio bravo del que era la mayor¨ªa de las v¨ªctimas, y recopil¨® conjeturas, emociones, escenas: ¡°Un joven con el que me cruc¨¦ llevaba una cr¨ªa de halc¨®n posada en un palo, y del cuello le colgaba una jaula llena de loros y pollos de b¨²ho¡±. Para Goldman, el caso Heavens fue otra exploraci¨®n del duelo y una ventana a los problemas sociopol¨ªticos de M¨¦xico entrevistos a trav¨¦s de la madeja de poderes de la capital.
El nuevo libro de Goldman es una cr¨®nica de dolor, amor y pol¨ªtica que empieza con 14 palabras del poema de Efra¨ªn Huerta: ¡°Amor se llama / el circuito, el corto, el cort¨ªsimo / circuito interior en que ardemos¡±.
Un ojo en la ficci¨®n, otro en la realidad
¨C En la carrera de Franciso Goldman el periodismo ha tenido una presencia constante. Ha publicado en medios como Harper¡¯s, The New Yorker o The New York Times Magazine.
¨C Su primer ¨¦xito fue publicar unos cuentos de amor en la revista Esquire.
¨C Esquire lo mand¨® a continuaci¨®n a cubrir la guerra de Guatemala, el pa¨ªs de su madre. Durante los a?os 80 fue reportero en los conflictos centroamericanos.
¨C Su principal trabajo period¨ªstico ha sido ¡®El arte del asesinato pol¨ªtico¡¯ (Anagrama, 2009), sobre la muerte del arzobispo guatemalteco Juan Gerardi.
¨C Con ¡®El Circuito Interior¡¯, una cr¨®nica personal de M¨¦xico DF, prolonga su lazo con el periodismo narrativo.
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