Interpol y Tori Amos dan m¨¢s gasolina a la fiesta del Primavera
El tr¨ªo y la cantante estadounidenses reivindican el concepto del festival con sus conciertos
Aunque son una especie de cl¨¢sicos en vida, tanto por sus visitas a Espa?a como por la celebraci¨®n de su existencia en buena parte del mundo del indie-rock, el concierto de Interpol era anoche uno de los m¨¢s esperados entre todos los del Primavera Sound. Y, ciertamente, es dif¨ªcil dar m¨¢s motivos como los que ellos dieron sobre el escenario para que se justifique un festival repleto de propuestas pero homog¨¦neo en el concepto de apoyar la m¨²sica independiente, de acento indie en todas sus vertientes.
En ese amplio caj¨®n que es el indie-rock, no es de extra?ar que se vea al tr¨ªo de Nueva York como una certeza, una apuesta segura. Anoche, lo demostraron con un concierto s¨®lido, sin fisuras, que arranc¨® con Angels y desde entonces entr¨® en tropel gracias a una tensi¨®n el¨¦ctrica a prueba de bombas, ejemplificadas en temas como Evil, Everything is wrong y Pionner. Siempre se ha dicho de ellos que guardan una hipn¨®tica oscuridad, inspirada en esa ola post-punk, pero ayer se notaba una luz en esa contundencia con la que alcanzaban notables momentos de cl¨ªmax sonoro, al m¨¢s puro estilo Pixies.
Lo mismo, o incluso m¨¢s, se puede decir de Tori Amos, que nunca antes hab¨ªa tocado en Espa?a tras una carrera de m¨¢s de cuarto de siglo. Su presencia y su actuaci¨®n cargaron de razones a este macroevento musical. Fue un concierto que fue de menos a m¨¢s, entrando en calor a medida que ca¨ªa la noche sobre Barcelona. Y la estadounidense, con su caracter¨ªstica melena pelirroja y su magnetismo innegable, no decepcion¨®.
Tal y como la revista Q se encarg¨® de mostrar en esa portada con Amos, Bj?rk y PJ Harvey, la pelirroja representa la tercera v¨ªa en ese pop-rock de autora, de marcado car¨¢cter y nada propenso a reivindicarse en bases cl¨¢sicas, a la que han acudido otras autoras como Neko Case o Fiona Apple. Aunque en ella anidan algunos ecos de Carole King o Joni Mitchell, la compositora ha confeccionado una obra con un sello propio, muy reconocible, sustentado en su impagable voz, tan poderosa como sugerente. Incluso se podr¨ªa decir, vista su actuaci¨®n sobre el escenario del Primavera Sound y en canciones que sonaron intensas, como la querid¨ªsima por su p¨²blico Silent all these years, que es su mejor arma, m¨¢s todav¨ªa que su defensa del piano, su elemento distintivo en el mundo del pop. Icicle o Crycifing tambi¨¦n fueron de lo mejor del concierto, mostrando en este sentido que el piano o el ¨®rgano, as¨ª como las bases electr¨®nicas, sirven para acompa?ar en muchas ocasiones los grandes registros de su garganta. Sus lamentos, entre el juego de teclas, fueron lo m¨¢s emotivo.
Babelia
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