Abel Pintos: ¡°Me llev¨® diez a?os en Argentina vivir lo que hoy estoy viviendo en Espa?a¡±
El cantante argentino se presenta este cuatro de junio en la Sala Galileo de Madrid. Ha transitado del folklore al pop "de manera natural", dice.
No lo parece, pero s¨ª. Ese chico sentado en un sof¨¢ blanco de una cafeter¨ªa de la Gran V¨ªa madrile?a ¡ªflaco, rapado y risue?o¡ª es el mismo que no hace mucho llen¨® el estadio de f¨²tbol ?nico de La Plata y siete veces el Luna Park de Buenos Aires. Se llama Abel Pintos y lleva 20 de sus 31 a?os dedicado a la m¨²sica. Est¨¢ en Espa?a por segunda vez, hace unos d¨ªas ofreci¨® un concierto en Barcelona y este cuatro de junio lo har¨¢ en la Sala Galileo de Madrid. Abel (Sony Music) es su primer disco publicado en nuestro pa¨ªs, pero es el noveno en su carrera. Sus canciones son un torbellino sentimental que conservan el toque del folklore argentino en el que se inici¨®. Ha grabado un tema con La Oreja de Van Gogh y otro con India Mart¨ªnez, pero su trayectoria en solitario basta y sobra para ganarse un sitio en el Olimpo Pop. Y sin embargo, cuando era ni?o, lo que m¨¢s deseaba era tener una carnicer¨ªa.
"Escribo mucho del amor porque considero que el amor es todo lo inherente y lo adherente al ser humano."
Pregunta. ?Y se dedic¨® a cantar porque no logr¨® ese sue?o?
Respuesta. [r¨ªe] Bueno, eso fue en la ¨¦poca en la que colaboraba en la carnicer¨ªa de un amigo, al que admiraba mucho, y era una especie de superh¨¦roe para m¨ª. En Argentina, un carnicero es una gente muy respetada y querida, tanto c¨®mo un m¨¦dico. Pero al mismo tiempo me di cuenta de que la m¨²sica me permit¨ªa expresarse libremente, porque era un ni?o bastante introvertido. Y me di cuenta que quer¨ªa utilizar esa herramienta para desarrollarme como ser humano durante toda mi vida. Y entonces me promet¨ª que iba a tener una carnicer¨ªa y que iba a cantar. Pero claramente tiene m¨¢s fundamento lo de la m¨²sica. La carnicer¨ªa era una fantas¨ªa exclusiva de la ni?ez. Siempre pongo el mismo ejemplo: cuando era ni?o, o me hacia carnicero o me hac¨ªa s¨²per h¨¦roe o me hac¨ªa m¨²sico. Eleg¨ª la m¨²sica como una plataforma para experimentar todo en la vida. Las giras me gustan mucho La primera vez que fui a un boliche, fue de gira. Hacer m¨²sica me entretiene, me estimula y hasta me abstrae de la realidad.
P. ?C¨®mo fue el tr¨¢nsito del folklore al pop?
R. Natural. Tuvo mucho que ver cuando empec¨¦ a escribir canciones. Eleg¨ª el folklore como ra¨ªz de mi m¨²sica por Mercedes Sosa, que es mi ¨ªdolo fundamental en la m¨²sica. La escuch¨¦ y no sab¨ªa qu¨¦ tipo de m¨²sica hac¨ªa. Se lo pregunt¨¦ a mi pap¨¢ y me dijo: folklore. Pero cuando empec¨¦ a escribir canciones empezaron a salir otras influencias que yo ten¨ªa: pop, baladas, tango¡ entonces por eso fue una transici¨®n natural. Y hoy, en mis conciertos, sigo cantando pop y folklore.
P. Dicen que todo se lo debe a un casete que pas¨® de mano en mano¡
R. S¨ª, es como de pel¨ªcula. Yo ten¨ªa 13 a?os y en ese pueblo donde crec¨ª, Ingeniero White, hay un teatro muy bonito. Un d¨ªa fue a cantar un cantante de tango muy famoso que se llama Ra¨²l Lavi¨¦ y yo ped¨ª que me dejaran colaborar en el teatro. Me dijeron: necesitamos mozos que ayuden a servir comidas t¨ªpicas al artista. Comiendo, un periodista le dijo a Ra¨²l: el chico que te est¨¢ sirviendo la comida es nuestro valor local. Yo le dije que s¨ª y le di un demo que luego ¨¦l escuch¨® conmigo para que yo supiera que ¨¦l no lo iba a tirar. Me dijo: yo no produzco artistas pero le dar¨¦ esto a alguien que te pueda echar una mano. Al d¨ªa siguiente, en Buenos Aires, se encontr¨® con un productor muy importante a quien no hab¨ªa visto en diez a?os. Se llamaba Pity I?urrigaro. Pity lo escuch¨® y me llam¨® y me contrat¨® en su productora y luego fuimos a Sony a firmar un contrato. As¨ª hice mi primer disco y comenc¨¦ una gira. Es como una pel¨ªcula, lo s¨¦. Pero es real.
P. Lleva dos d¨¦cadas en esta profesi¨®n, pero desde hace un tiempo arrasa. ?En qu¨¦ momento ocurri¨® el boom?
R. Es que no hubo, en realidad, un momento explosivo. Cinco a?os atr¨¢s, que parece nada, yo grav¨¦ un disco que se llama Reevoluci¨®n, con doble e, ?viste?, y es verdad que ese ¨¢lbum signific¨® un momento bisagra en mi carrera. Algo cambi¨®. Empec¨¦ a ser m¨¢s popular, empec¨¦ a sonar en las radios. Ya ten¨ªa una buena convocatoria, pero mis discos no se vend¨ªan tanto. O sea: lo que cambi¨® fue la parte comercial. Y al siguiente disco todo fue mejor: gan¨¦ un Gardel de Oro [el premio m¨¢s importante de la m¨²sica en Argentina]. Y al siguiente, que es este, todo es mayor. Pero me queda mucho por hacer todav¨ªa en Argentina. No estoy aqu¨ª porque all¨¢ ya hice todo y ahora busco estar en otros pa¨ªses.
P. Esa popularidad cada vez mayor ha suscitado el inter¨¦s de su vida privada y hasta se han circulado fotos ¨ªntimas. ?Por qu¨¦ ser¨¢ que la sexualidad de un apersona sigue siendo objeto de morbo?
R. Lo has definido bien. Fue morbo. Yo no soy homosexual y alguien, qui¨¦n sabe por qu¨¦, sac¨® esas fotos. No soy una persona que elija exponer las cosas que no se exponen naturalmente. Pero alguien quiso crear una historia. No era una historia cierta. Si yo fuera homosexual no me hubiese preocupado. No soy homosexual, pero tampoco me preocupa. Yo s¨¦ c¨®mo es mi vida. Pero supongo que eso es parte de querer conocer lo que no se ve de alguien, ?no? A todos nos encanta ir m¨¢s all¨¢ del misterio. Cuando un artista no cuenta porque s¨ª con qui¨¦n estuvo la noche anterior, se crea cierta curiosidad. Es como ir de invitado a una casa y estar en el comedor y querer saber c¨®mo es el cuarto o el ba?o¡ Yo conf¨ªo en el respeto que siento por el p¨²blico y en el respeto que el p¨²blico siente por m¨ª. A ambos nos interesa la m¨²sica. No m¨¢s cosas.
P. ?C¨®mo conecta con la gente?
R. Con los conceptos que voy sacando de la vida en general. Escribo mucho del amor porque considero que el amor es todo lo inherente y lo adherente al ser humano. Desde ah¨ª escribo. Es un tema complejo y completo al mismo tiempo. Y a partir de ¨¦l se puede hablar de todo.
P. ?C¨®mo hace una canci¨®n?
R. Es un proceso bastante curioso. Yo no compongo con instrumentos, porque mi desarrollo en los instrumentos es muy limitado. Entonces, canto las canciones. Las canciones llegan, suceden, no lo planeo. Yo corro mucho y corriendo he escrito muchas canciones. Pero dura 10 minutos ese proceso. Una vez que llega, sale. Toco el piano y la guitarra, pero no soy virtuoso en los dos. Y no s¨¦ acompa?arme como para poder hacer una canci¨®n.
P. Despu¨¦s de haber actuado ante miles de personas viene a Espa?a a presentarse ante unos cientos. A estas alturas de su carrera, ?lleva bien los contrastes?
R. Bueno, s¨®lo es un contraste en cuanto a la cantidad de gente. Pero vos pens¨¢ esto: yo vengo a Madrid por segunda vez en mi vida y ya voy a tocar en una sala con la misma capacidad de una en argentina que me llev¨® diez a?os llenar, y yo vengo ac¨¢ a llenar la Galieo al instante. Me llev¨® diez a?os en Argentina vivir lo que hoy estoy viviendo en Madrid. Y pienso volver en septiembre.
Babelia
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