Celia Blanco: ¡°Para m¨ª, Christian Grey es un maltratador¡±
Durante a?os hizo periodismo en televisi¨®n hasta que un d¨ªa se acab¨®. Le dijeron que quer¨ªan chicas ¡°m¨¢s fresquitas¡±. Ahora triunfa en la radio con un programa sobre sexo
El periodismo ha sido el segundo campo laboral ¨Ctras la construcci¨®n¨C que m¨¢s ha sufrido la crisis en Espa?a. As¨ª que m¨¢s que una reconversi¨®n industrial individualizada, algunos trabajadores ha tenido que afrontar el "renovarse o morir" a cara de perro. Periodista de cine en Antena 3, reportera de Madrid directo y de Fabricando Made in Spain, Celia Blanco ha pasado por todas las cadenas. ¡°Hasta que tras 21 a?os la tele me escupi¨®¡±. Entre medias le bull¨ªa en la cabeza aunar dos pasiones: literatura ¨Ces fan de Hanif Kureishi¨C y sexo. Acab¨® haci¨¦ndolo en un blog que se convirti¨® en un libro, ¡®Con dos tacones¡¯ (La Esfera libros), que apuntaba reveladoramente en su subt¨ªtulo ¡°Cuando dejamos de so?ar con ser princesas¡± y en el que ficcionaba ¡°las fantas¨ªas sexuales de un nutrido n¨²mero de mujeres¡±. Y de ah¨ª surgi¨® ¡®Contigo dentro¡¯, el programa de la Cadena SER.
Pregunta. ?Y c¨®mo ha llegado hasta aqu¨ª?
DNI urgente
Celia Blanco (Madrid, 1973). Ha pasado por todas las cadenas de televisi¨®n, y se hizo popular por entrevistar a Juli¨¢n Mu?oz, por retransmitir las cabalgatas de reyes o por sus reportajes sobre cundas o la prostituci¨®n. En 2010 abri¨® un blog que devino en libro en 2014 y de ah¨ª surgi¨® Contigo dentro, el programa de la Cadena SER que los domingos de madrugada re¨²ne a 391.000 oyentes, seg¨²n el ¨²ltimo Estudio General de Medios.
Respuesta. La gente que me conoce lo ve¨ªa venir, porque acababa hablando siempre de lo mismo y logrando un ambiente de confianza. Con 15 a?os empec¨¦ a leer El V¨ªbora y descubr¨ª a Moebius, a Milo Manara, a Clara de Noche¡ Una sexualidad gr¨¢fica que me interes¨® mucho. Bueno, le¨ª Ada o el ardor, de Nabokov, con 13 a?os, una edad no muy acorde para ese libro. En realidad, no ten¨ªa dinero para un terapeuta e hice lo que el 98% de los blogueros: escribir para expresarme. Las redes sociales me ayudaron, porque es raro encontrar una mujer que hable as¨ª.
P. ?Por eso dej¨® la televisi¨®n?
R. No, a m¨ª la tele me escupi¨®. A los 41 a?os me dijeron que quer¨ªan periodistas ¡°m¨¢s fresquitas¡±, que en mi lectura es que hiciesen preguntas m¨¢s tontas. Soy seria y contundente, de voz grave, lo que en televisi¨®n chocaba. Y nunca me explotado ni mis piernas ni mis tetas. Soy forofa de la radio, e invent¨¦ el programa que yo deseaba escuchar.
P. ?Y c¨®mo se hace el periodismo de campo en el sexo?
R. Como en cualquier otro. Como cuando hac¨ªa cine o temas de prostituci¨®n en Madrid directo y me iba al pol¨ªgono Marconi. En el sexo, igual: vas a org¨ªas, a saber qu¨¦ es el BDSM [lo que vulgarmente se conoce como sadomasoquismo], o a sesiones de?spanking [azotes], porque tienes que conocer a gente. ?Se dan situaciones curiosas? S¨ª. Est¨¢s en una cena familiar, te levantas y tu chico le explica a tu suegra: ¡°Se va a trabajar. Es que ha quedado para ver una org¨ªa¡±.
P. En Espa?a, el sexo es un tema delicado. La gente no es tan abierta como su suegra.
R. Muy delicado. Me ha costado m¨¢s que una mujer d¨¦ testimonio en la radio sobre su vida sexual ¨Cy eso que mantengo los anonimatos- que entrevistar a una estrella de Hollywood. El sexo nos cuesta verbalizarlo.
P. ?Por el origen mediterr¨¢neo? ?Por el catolicismo?
R. Por la religi¨®n, que ha dejado un poso de siglos. Incluso los m¨¢s progresistas, que luchan contra la castraci¨®n mental que supone ese pasado, han sido educados de esa manera. Y la base est¨¢ en la educaci¨®n. Encuentro gran diferencia entre los europeos n¨®rdicos y los espa?oles en cuanto al sexo porque llevamos el sentimiento de culpa impreso en nuestra carne. En cuanto esa carne florece, nos da pudor reconocer que siendo mujer hayamos tenido relaciones con otras mujeres o que adem¨¢s de los besos a algunas les atraiga que les hagan da?o en un determinado momento o en una determinada situaci¨®n.
P. ?Habr¨¢ un cambio?
R. Ahora por fin hemos llegado una generaci¨®n de padres que no le estamos transmitiendo eso a nuestros hijos: porque no creemos en Dios, o porque llevan la religi¨®n de otra manera. Tengo muchas esperanzas en quienes vienen detr¨¢s. No puedes sentirte culpable porque te guste un placer, sea cual sea.
P. ?Es periodista dedicada al sexo o experta en sexo?
R. Periodista. Me molesta que cuando est¨¦s trabajando, porque sepas describir una org¨ªa se crean que van a tener sexo contigo. Y eso pasa continuamente. Que yo me acueste con quien me da la gana no significa que me tiro a todo lo que se menea.
P. ?Lo m¨¢s extra?o que ha visto como periodista?
R. Algunas cosas de BDSM. A m¨ª el dolor no me gusta, y cuando he visto esa tortura me choca. Ver un chico con un cepo en el pene me sorprendi¨®. El resto han sido sorpresas gratas y me lo he pasado y me lo paso muy bien.
¡°A veces los hombres saben m¨¢s de cl¨ªtoris que muchas chicas¡±
P. ?Por qu¨¦ en Espa?a las grandes divulgadoras de sexo han sido mujeres?
R. Porque hablamos m¨¢s de sexo. Las mujeres charlamos con m¨¢s tranquilidad, y es cierto que resulta menos agresivo para el oyente de la radio. Es curioso: luego no somos quienes imponemos en el terreno sexual. Nos cuesta m¨¢s reconocer carencias o deseos. Nuestro sexo es el gran desconocido en las mujeres. A veces los hombres saben m¨¢s de cl¨ªtoris que muchas chicas.
P. ?Cu¨¢nto da?o han hecho en el sexo las pel¨ªculas de Hollywood y ¡®Cincuenta sombras de Grey¡¯?
R. Mucho. El libro ha explicado err¨®neamente qu¨¦ es el BDSM. En la vida real es m¨¢s sincero, para m¨ª Grey es un maltratador. Y del cine, mejor ni empezar: el hombre de tu vida se encuentra de otra manera, no como en las manidas comedias rom¨¢nticas.
P. ?C¨®mo lleva compartir nombre con una ex actriz porno?
R. Nos conocemos y nos llevamos muy bien. El de ella es un seud¨®nimo. A m¨ª me ha provocado varios acosos telef¨®nicos¡ y conseguir buenas mesas en algunos restaurantes. Cuando llego al local, las expectativas se derrumban.
Babelia
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