El realismo sucio de Latinoam¨¦rica

El realismo sucio llegado de Latinoam¨¦rica se ha convertido en protagonista de la jornada en la Mostra de Venecia, con la proyecci¨®n de la nueva pel¨ªcula del veterano cineasta mexicano Arturo Ripstein, La calle de la amargura, y el estreno en la secci¨®n competitiva del venezolano Lorenzo Vigas, que ha presentado, Desde all¨¢, su debut en el largometraje.

En La calle de la amargura, presentada fuera de competici¨®n, Ripstein regresa a esos bajos fondos mexicanos que tan bien ha retratado en su larga trayectoria con un relato inspirado en la cr¨®nica negra: el caso real de dos profesionales de la lucha libre que fueron encontrados en un barrio de la ciudad de M¨¦xico. Ripstein a?ade otros personajes, como dos prostitutas de buen coraz¨®n, un marido homosexual en el armario y una astuta farmac¨¦utica que dar¨¢ con la llave del crimen, que el director firma con ojo tierno y a la vez cruel, a trav¨¦s de una c¨¢mara flotante que se acerca y se aleja de ellos, como si dudara entre la empat¨ªa y la condena.

El cineasta mexicano tambi¨¦n recibe esta noche un premio especial de la Mostra para celebrar sus 50 a?os de carrera. A la hora de hacer balance, Ripstein ha dicho que nunca se ha sentido feliz detr¨¢s de la c¨¢mara. "Feliz es el ¨²nico t¨¦rmino que no es posible para definir mi trabajo. Uno se pone detr¨¢s de la c¨¢mara por desdichado, triste, vengativo y miedoso. Yo filmo por rencor, pero ser as¨ª de mala persona me hace muy feliz", ha bromeado en rueda de prensa.

Feliz es el ¨²nico t¨¦rmino que no es posible para definir mi trabajo Arturo Ripstein, cineasta

Con su ¨²ltima pel¨ªcula, Ripstein ha cumplido un sue?o largamente acariciado: rodar en blanco y negro. "Al ser hijo de productor, mi vida entera transcurri¨® en estudios de cine. Por aquel entonces, hace 65 a?os, no hab¨ªa color. Empec¨¦ a conocer el rostro de M¨¦xico en blanco y negro. De las muchas pel¨ªculas que he hecho, casi todas estaban pensadas en blanco y negro. Si no las hice fue porque no me dejaban", ha aclarado en rueda de prensa. "Picasso dijo una vez que el color debilita. Estoy de acuerdo. De hecho, la vida es en blanco y negro".

No debe de ser casualidad que La calle de la amargura beba del neorrealismo italiano y del expresionismo alem¨¢n, pero tambi¨¦n de la tradici¨®n de la picaresca y el tremendismo espa?ol. "Me siento mexican¨ªsima, pero mi verdadera patria es la lengua espa?ola. Esa tradici¨®n la llevamos inconscientemente en la sangre todos los que hablamos con la e?e", ha a?adido la guionista Paz Alicia Garciadiego, pareja del director, con quien forma un s¨®lido t¨¢ndem creativo desde hace d¨¦cadas.

Ambos se han referido al nuevo canon que parece invadir el cine latinoamericano desde hace unos a?os, representado tambi¨¦n por Lorenzo Vigas con Desde all¨¢, que se proyecta hoy en competici¨®n por el Le¨®n de Oro. Desde hace m¨¢s de una d¨¦cada, una nueva ola de directores mexicanos, argentinos, chilenos y brasile?os, asiduos en los principales festivales de cine europeos, se esfuerzan en describir la realidad cotidiana de sus respectivos pa¨ªses con un tono m¨¢s cercano al realismo sucio que al realismo m¨¢gico.

"Am¨¦rica Latina est¨¢ teniendo una mirada importante respecto al futuro de la cinematograf¨ªa. Por fin se nos empieza a escuchar y, sobre todo, a ver", ha declarado Ripstein, pese a creer que la propia noci¨®n de Latinoam¨¦rica es "puramente geopol¨ªtica" y niega las particularidades locales. En cambio, para Garciadiego todos los cines latinoamericanos tienen algo en com¨²n. "No creamos que somos tan distintos. Somos iguales. Haber sido colonia y habernos forjado creyendo que el par¨¢metro estaba de este lado del Atl¨¢ntico ha hecho que nos menospreciamos a nosotros mismos", ha dicho la guionista.

En esa nueva ola caben nombres como el de Lorenzo Vigas, moderadamente aplaudido en las proyecciones de Desde all¨¢, un debut en el que pone en escena la extra?a relaci¨®n que surge entre Armando, un homosexual incapaz de amar, que ofrece dinero a j¨®venes caraque?os a cambio de que le sigan a casa y se desnuden para ¨¦l, y Elder, un delincuente de poca monta que ve en ese hombre maduro y taciturno al padre que nunca tuvo. Crecer¨¢ entre ellos un v¨ªnculo de dependencia tirando a malsano, fundamentado primero en el dinero y despu¨¦s en la carencia afectiva. La pel¨ªcula admite lecturas freudianas, pero tambi¨¦n funciona como retrato de las profundas diferencias de clase que sacuden Venezuela.

En el equipo de Desde all¨¢ figuran nombres llegados de toda Latinoam¨¦rica: el mexicano Guillermo Arriaga (quien firm¨® Amores perros o Babel antes de su enfado con Alejandro Gonz¨¢lez I?¨¢rritu) colabor¨® en el guion, mientras que el joven cineasta mexicano Michel Franco coproduce la cinta, que ha montado la brasile?a Isabela Monteiro de Castro y que protagoniza el actor chileno Alfredo Castro, int¨¦rprete fetiche de Pablo Larra¨ªn.

"Hay algo com¨²n en el aire. Compartimos muchos problemas, pero por otro lado existe una gran desconexi¨®n entre nuestros pa¨ªses. En Venezuela no se ve cine colombiano, pese a estar a poca distancia, ni tampoco mexicano o chileno. Esta pel¨ªcula es un peque?o esfuerzo que demuestra que eso puede ocurrir, siempre que haya apoyo de una base social y pol¨ªtica", ha dicho Vigas desde la Mostra. Para Castro, los parecidos entre los integrantes de esta nueva ola son mayores que las diferencias. "Existe un punto de vista que todos comparten, una mirada pol¨ªtica, cr¨ªtica y desafiante. Por ejemplo, Desde all¨¢ sobrepasa la homosexualidad como tema principal. No se centra en lo rom¨¢ntico y prefiere inspeccionar profundamente lo social. La pel¨ªcula habla de supervivencia cotidiana, de c¨®mo nuestros j¨®venes, e incluso nosotros mismos, tenemos que sobrevivir, m¨¢s que vivir", ha concluido el actor.