Hombres del Oeste
Rafael Romero Marchent, actor, director y guionista, imparte clases de direcci¨®n e interpretaci¨®n

A los 88 a?os este actor, director, guionista y doblador sigue en activo dando clases de interpretaci¨®n y direcci¨®n. Pero le domina la melancol¨ªa. ¡°No soporto la soledad, la tristeza de llegar a casa y no encontrar a nadie a quien contarle lo que ha sucedido durante el d¨ªa, compartir las ilusiones y tambi¨¦n los desencantos¡¡± Lo vive as¨ª desde que hace ahora 25 a?os enviudara de la actriz y vedette Maruja Tamayo, cuya larga enfermedad le fue retirando a ¨¦l del cine.
¡°He intervenido en m¨¢s de 300 pel¨ªculas¡±, recuerda, aunque es dif¨ªcil concretar con ¨¦l t¨ªtulos, repartos o fechas, especialmente las m¨¢s recientes. Rememora con claridad que a los veinte a?os decidi¨® abandonar la carrera de Medicina para convertirse en actor, aunque la sigui¨® estudiando por libre a?o tras a?o. Su padre era tambi¨¦n del gremio del cine ¡ªhab¨ªa fundado en 1939 la revista Radiocinema, que desapareci¨® 25 a?os despu¨¦s¡ª, pero no contempl¨® con buenos ojos la vocaci¨®n del muchacho. S¨®lo cambi¨® de idea cuando le vio protagonizando la pel¨ªcula de Edgar Neville El traje de luces, en 1947. La figura ani?ada de Rafael Romero Marchent se hizo habitual en el cine espa?ol de aquellos a?os en que le encargaban personajes que muchas veces no respond¨ªan a su edad real. ¡°Tuve que rechazar algunos. El director Antonio del Amo quiso que interpretara a un muchacho de quince a?os cuando yo ya estaba cerca de los treinta¡¡±
Triunf¨® igualmente en el teatro, en las compa?¨ªas de Tina Gasc¨®, Amparo Rivelles o Lolita Villaespesa, entre otras, y en el mundo del doblaje: la voz de Antonio Molina era en el cine la suya, ¡°cuando ¨¦l no cantaba, claro est¨¢¡±, precisa con guasa. Hace unos pocos a?os Rafael Romero Marchent quiso volver al teatro y escribi¨® un mon¨®logo sobre su vida, Recuerdos, ¡°pero me pareci¨® que ver a un tipo hablando durante hora y media podr¨ªa aburrir hasta a las vacas, y lo transform¨¦ en una pel¨ªcula¡±. ?l la dirigi¨® e interpret¨® y desde hace cuatro a?os intenta darle salida comercial.
Porque Rafael Romero Marchent es ante todo director de cine. Alentado por su hermano mayor, Joaqu¨ªn Luis, ya fallecido, que fue pionero en la realizaci¨®n de westerns europeos, dirigi¨® en 1965 su primer largo, El ocaso de un pistolero, al que siguieron otros treinta, algunos muy notables y no siempre relacionados con este g¨¦nero. Por ejemplo, dos pel¨ªculas con Lina Morgan en las que ella no hac¨ªa ¡°de Lina Morgan¡± ¡ªImposible para una solterona y Un d¨ªa con Sergio¡ª puede que por eso no tuvieran gran ¨¦xito. Fue muy popular, en cambio, la serie Ca?as y barro en 1978, de la que habla con entusiasmo: ¡°Tuvo muchos premios internacionales, y eso que la rodamos con muy pocos medios y un equipo escaso; yo tuve hasta que empujar la barcaza como hombre buzo porque los actores no sab¨ªan manejarla¡±. Sin olvidar la serie Curro Jim¨¦nez, que codirigi¨® con otros, pero fue ¨¦l quien finalmente la llev¨® tambi¨¦n al cine: ¡°Me eligieron a m¨ª¡±, presume satisfecho.
¡°Los westerns fueron desapareciendo como todo, pero es que tambi¨¦n dej¨® de haber actores que montaran bien a caballo, o buenos especialistas¡ pero en cualquier caso el western siempre tendr¨¢ ¨¦xito porque es un g¨¦nero inmortal¡±. Escribi¨® todos los guiones de las pel¨ªculas que ha dirigido y no le ha quedado, seg¨²n confiesa, ning¨²n proyecto por realizar. Al igual que su hermano Joaqu¨ªn Luis, las historias que desarrollaban en el Oeste americano ¡°eran ante todo historias de seres humanos, de personajes que podr¨ªan existir en otros lugares o ¨¦pocas¡±. En diversos g¨¦neros trabaj¨® Romero Marchent con ¨¦xito: Tu Dios y mi infierno o La noche de los cien p¨¢jaros, que narraban t¨®rridas historias pasionales, la comedia La boda o la vida, el musical Dos pistolas gemelas, o el cine de misterio ¡ªSanto contra el doctor Muerte, Cazar un gato negro, Disco rojo y Un par de zapatos del 32, cuyo protagonista fue el oscarizado Ray Milland, ¡°un hombre muy cort¨¦s, a quien yo le dec¨ªa que a mi juicio el mejor actor hab¨ªa sido siempre Spencer Tracy porque nunca hac¨ªa de s¨ª mismo. Ya s¨¦ que era alcoh¨®lico en la vida real pero en la pantalla nunca lo parec¨ªa¡±¡ª.
Las nuevas generaciones
A Rafael Romero Marchent no le interesa especialmente el cine actual ¡°porque no est¨¢ bien hecho¡±, ni los actores de hoy en d¨ªa ¡°porque no vocalizan¡±. Ve por lo tanto pocas pel¨ªculas ¡°salvo alguna en televisi¨®n¡±. Pero necesita estar activo para descansar su cabeza. Por eso sigue dando clases a cineastas j¨®venes (¡°aunque haya cambiado la forma de hacer cine las leyes b¨¢sicas son inalterables¡±), y est¨¢ felizmente involucrado en la pel¨ªcula sobre la militante comunista Amada Garc¨ªa Rodr¨ªguez, fusilada por los falangistas durante la guerra, que va a realizar pr¨®ximamente el novel Jorge N¨²?ez y en la que ¨¦l interpretar¨¢ a un duro general fascista. Su ¨²ltima aparici¨®n como actor fue en Tiovivo c. 1950, de Jos¨¦ Luis Garci, o en la serie Cu¨¦ntame c¨®mo pas¨®.
Mientras llega ese nuevo rodaje se entretiene en el casino viendo la manera que tienen de apostar los clientes chinos o jugando ¨¦l mismo a las maquinitas, o mirando de soslayo a las jovencitas que pasan por su lado, lo que confiesa con expresi¨®n p¨ªcara. Le interesa todo lo que le pueda sacar de s¨ª mismo. ¡°Mi familia no es ya una saga¡±. Dos hermanos directores, una hermana montadora¡ ¡°Lo fue, eso s¨ª. Pero ahora soy el ¨²nico que queda¡±. Y me despide con un abrazo fuerte. ¡°Ya es lo ¨²nico en lo que creo realmente, en la amistad¡±.
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