Ruven Afanador, el fot¨®grafo colombiano al que Gabo intimid¨®
El artista, que ha retratado a figuras como Bj?rk, Robert De Niro y Michael Jordan, revive su encuentro con el Nobel en 1991
Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez lo rescat¨®. El fot¨®grafo Ruven Afanador (Bucaramanga, 1959) ley¨® por primera vez un libro del escritor colombiano cuando se sinti¨® solo en el extranjero. Acababa de llegar a Estados Unidos, estaba en plena adolescencia y extra?aba su pa¨ªs. Dos obras del Nobel, que sus padres ten¨ªan guardadas, fueron su ¡°salvaci¨®n¡±. ¡°Se volvi¨® mi h¨¦roe¡±, asegura, con el tono de siempre: suave, pausado, el mismo con el que logra que le obedezca quien se pone ante su c¨¢mara. Unos 15 a?os despu¨¦s se encontr¨® ante el reto de fotografiar al escritor. Afanador record¨® la historia la semana pasada en Bogot¨¢, donde estuvo como invitado de BCapital, una feria de moda local.
¡°Qu¨¦date as¨ª¡ As¨ª¡ Una m¨¢s¡ Beautiful¡ M¨ªrame ac¨¢¡ Baja la cara¡ Una vez m¨¢s¡ As¨ª¡ Amazing¡±. Lo ha susurrado frente a Bj?rk, Robert De Niro, Sarah Jessica Parker, Al Pacino, Michael Jordan, Salma Hayek y Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, su h¨¦roe. Era Martin Scorsese a quien deb¨ªa fotografiar. Pero en ¨²ltimo momento su agente, que ya se hab¨ªa ilusionado con que Afanador trabajara con el director estadounidense, le dijo que hab¨ªan cambiado de personaje, que ser¨ªa al escritor de Cien a?os de soledad a quien deb¨ªa tomarle una foto. ¡°Era un sue?o. A¨²n no lo puedo creer¡±.
Historia de una imagen
Cuenta que viaj¨® seis d¨ªas antes de la cita a Ciudad de M¨¦xico y que le llev¨® una carta escrita en papel pergamino. ¡°No pod¨ªa dormir, caminaba por la ciudad, me imaginaba c¨®mo ser¨ªa¡±. Se le ocurrieron varias ideas para la imagen. Muchas m¨¢s cuando entr¨® a la casa del Nobel. Fue en 1991. ¡°Vi un fregadero hecho de piedra que me record¨® los que hab¨ªa en mi ciudad. Quise que posara ah¨ª, frente a ¨¦l, con una camiseta¡±. Pero Garc¨ªa M¨¢rquez no quiso. Le dec¨ªa que ¨¦l no iba a actuar. La ¨²ltima opci¨®n que le propuso fue posar delante de un ¨¢rbol de su jard¨ªn con una ruana colombiana encima. Afanador llevaba una, pero Gabo ten¨ªa la suya.
¡°Hab¨ªa llovido y las baldosas estaban mojadas. Me resbalaba, intentaba sobreponerme y me volv¨ªa a resbalar. En mi cabeza estaba que ¨¦l iba a darse cuenta de mis nervios y que iba a suspender la sesi¨®n¡±. Y la suspendi¨®. ¡°Uno no se desliza con los pies sino con la mente¡±, le dijo el escritor. Retomaron el trabajo y la foto qued¨®.
Adem¨¢s de hablar de su experiencia como fot¨®grafo de personalidades del cine, la moda, la literatura y la pol¨ªtica en revistas como Rolling Stone, GQ, Elle, The New Yorker o The New York Times Magazine, Afanador ha presentado el documental ?ngeles gitanos, el making-of del libro que lleva el mismo nombre y en el que retrata a 65 bailaores y cantaores sevillanos.
Pregona en sus im¨¢genes lo que confirma con sus palabras. Dice que siente devoci¨®n por Espa?a, por el flamenco, por los toreros y el toreo. ¡°Es de esos lugares donde uno se siente c¨®modo, hay una afinidad especial con las personas de all¨¢. Hay una conexi¨®n muy instintiva y muy familiar para m¨ª¡±, asegura.
¡°Me gusta much¨ªsimo el toreo, estoy totalmente en contra de que se proh¨ªba y me da tristeza que, por ejemplo, en Bogot¨¢ ya no exista¡±. Afanador defiende su postura con sus fotos. En 2001 public¨® Torero, con pr¨®logo del escritor colombiano H¨¦ctor Abad Faciolince. Con im¨¢genes en blanco y negro se acerca a la intimidad de j¨®venes matadores de toros de Colombia, Per¨², M¨¦xico y Espa?a. El fot¨®grafo colombiano m¨¢s famoso cuenta que hacer cine est¨¢ dejando de ser un vago pensamiento para convertirse en un hecho concreto. ¡°Ahora todo est¨¢ apuntando en esa direcci¨®n. Tengo el deseo y la idea. Eso quiere decir que suceder¨¢¡±. Y seguramente ser¨¢ en blanco y negro, como lo ha sido la mayor parte de su trabajo fotogr¨¢fico.
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