Padilla, Abell¨¢n y El Fandi se reparten nueve orejas en la Cubierta de Legan¨¦s

Los diestros Juan Jos¨¦ Padilla, Miguel Abell¨¢n y David Fandila El Fandi ofrecieron una entretenida tarde de toros en la localidad madrile?a de Legan¨¦s, en la que se repartieron un total de nueve orejas.

Con tres cuartos de entrada, se lidiaron toros de Carlos N¨²?ez, discretos de presentaci¨®n y, salvo el noble segundo, en general de poco juego por su falta de raza.

Juan Jos¨¦ Padilla: estocada ligeramente tendida (dos orejas); casi entera tendida (dos orejas). Miguel Abell¨¢n: estocada (dos orejas); pinchazo y estocada traserilla (ovaci¨®n). El Fandi: estocada atravesada (dos orejas tras aviso); pinchazo hondo (oreja).

Apost¨® la empresa y el ayuntamiento de Legan¨¦s por dar una corrida de toros por sus fiestas de San Nicasio, y le sali¨® bordado. El planteamiento no pod¨ªa ser mejor, con una terna medi¨¢tica y de mucho tir¨®n, lo que se demostr¨® en la taquilla, con los tres cuartos del aforo del coso de La Cubierta.

Gran ambiente en la plaza, que disfrut¨® con la entrega de Padilla, el buen toreo de Abell¨¢n y el pundonor del Fandi, que acabaron imponi¨¦ndose a una corrida de Carlos N¨²?¨¦z a la que le falt¨® casta y fondo. Las nueve orejas concedidas, muy baratas la gran mayor¨ªa, hablan por s¨ª solas de la entretenida tarde que vivi¨® la localidad.

Padilla tuvo esforzarse para imponerse al manso y remiso primero, un animal que pronto marc¨® su querencia a tablas, y se defendi¨® a base de arreones y echando la cara por las nubes. El jerezano protagoniz¨® una labor dispuesta y muy comunicativa con el respetable, que, tras una estocada, le premi¨® con las dos orejas.

De hinojos recibi¨® Padilla al cuarto, al que quit¨® por bonitas y airosas navarras. Con los palos anduvo sobrado, y sentado en el estribo arranc¨® otra faena de muleta de notable entrega ante un toro top¨®n y sin clase.

Abell¨¢n realiz¨® lo m¨¢s torero de la funci¨®n, especialmente con su noble y manejable primero, al que no le sobraron las fuerzas, y al que supo afianzar en un inicio de mucho mimo por el derecho, para acabar cuaj¨¢ndolo muy bien con la mano izquierda. Aprovech¨® las veinte embestidas que tuvo el astado, y se recre¨® en la interpretaci¨®n de un toreo reposado, cadencioso y de mucho gusto, de bellos y toreros embroques. El quinto fue el m¨¢s deslucido del env¨ªo. Un toro inc¨®modo que no regal¨® ni una sola embestida.

El Fandi no quiso quedarse a la zaga, y ya en su primero despleg¨® todas sus armas, con una larga cambiada en el recibo, enjundiosas ver¨®nicas, y vistoso y vibrante quite por lopecinas. Con las banderillas fue todo un espect¨¢culo, a pesar de que el astado mostr¨® su descastada condici¨®n. No le import¨® al granadino, que, a base de cambiar terrenos y apostar por la corta distancia, se impuso a la situaci¨®n en una labor inteligente y entregada.

El tercio de banderillas en el sexto fue la apoteosis. Al toro, sin raza alguna pero muy noble, le costaba perseguir los enga?os, pero el buen hacer y el oficio del torero hicieron que su labor tuviera argumento e inter¨¦s.

Exitosa encerrona de Alberto G¨®mez

El matador de toros valenciano Alberto G¨®mez sald¨® con cuatro orejas la tarde en la que se encerr¨® con seis toros en solitario en Utiel (Valencia) para recaudar fondos para la Federaci¨®n Espa?ola de Padres de Ni?os con C¨¢ncer (ASPANION).

Con poco p¨²blico, se lidiaron cuatro toros de Guadalmena y dos -segundo y cuarto- de Torrehandilla, bien presentados y de buen juego en l¨ªneas generales; destac¨® el cuarto por su nobleza, y fue premiado con la vuelta al ruedo.

El balance art¨ªstico de Alberto G¨®mez, que actu¨® en solitario, fue el siguiente: pinchazo y estocada (ovaci¨®n); pinchazo y estocada (oreja tras aviso); estocada (dos orejas); media (oreja con petici¨®n de la segunda); dos pinchazos y estocada (ovaci¨®n); y media, estocada y tres descabellos (ovaci¨®n).

Aunque el p¨²blico no respondi¨®, Alberto G¨®mez tuvo una actuaci¨®n seria, y demostr¨® que est¨¢ preparado para asumir mayores empresas. Se le vio suelto, con oficio, y aprovech¨® las notables condiciones de los toros corridos en tercer y cuarto lugares.