La Cultura baila sobre el precipicio
Creadores y miembros de la industria cultural reflexionan sobre la cercan¨ªa al abismo del sector en un encuentro en Madrid
El precipicio est¨¢ cada vez m¨¢s cerca. Sin embargo, nunca llega. Tan dram¨¢tico t¨¦rmino se ha referido tantas veces a la Cultura en Espa?a a lo largo de los ¨²ltimos a?os que muchos han dejado de cre¨¦rselo. ¡°La palabra abismo est¨¢ un poco devaluada, porque siempre estamos asomados a ello¡±, afirm¨® Luz S¨¢nchez-Mellado, periodista de EL PA?S, al introducir el encuentro ?Cultura o barbarie? Diez propuestas al borde del abismo,?organizado por la Fundaci¨®n Santillana en colaboraci¨®n con la Fundaci¨®n Alternativas. "?Tan mal estamos?", interpel¨® la moderadora.
La r¨¢faga de respuestas que se escuch¨® en la charla, celebrada en el Museo Reina Sof¨ªa, dej¨® poco espacio para el optimismo, aunque s¨ª sugiri¨® algunos senderos para alejarse del barranco. ¡°La situaci¨®n es mala, estamos a la deriva¡±, afirm¨® C¨¦sar Antonio Molina, escritor y director de la Casa del Lector, adem¨¢s de exministro de Cultura. ¡°Estamos en un momento de extrema debilidad¡±, a?adi¨® Rosina G¨®mez-Baeza, presidenta de Factor¨ªa Cultural, Vivero de Industrias Creativas. ¡°El abismo est¨¢ muy cerca. Se revierte con un modelo distinto, de crecimiento pausado, con una econom¨ªa distributiva, que empiece desde lo micro¡±, defendi¨® Santiago Eraso, director de contenidos de Madrid Destino, la empresa encargada de la gesti¨®n tur¨ªstica y cultural de la capital. "Lo que nos apremia", plante¨® Basilio Baltasar, director de la Fundaci¨®n Santillana, "es la conciencia de un dilema que se impone de un modo rotundo: una sociedad inculta es una sociedad fracasada".
Los n¨²meros quiz¨¢s no contesten a la pregunta fundamental, pero s¨ª ofrecen pistas. Pr¨¢cticamente todas las artes han perdido entre una tercera y una quinta parte de su p¨²blico, sus representaciones y su facturaci¨®n en el ¨²ltimo lustro, seg¨²n el Anuario 2015 de la SGAE, aunque el propio documento demuestre que 2014 supuso una ligera recuperaci¨®n sobre todo para el cine, el teatro y la venta de m¨²sica grabada. Y el anuario de estad¨ªsticas culturales, publicado justo hoy por el Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, recoge el gasto medio de los espa?oles en el sector: 260,1 euros en 2014, es decir, seis menos que el a?o anterior y sobre todo casi cien menos respecto a los 368 de 2009.
En la lista de los enemigos que han llevado la Cultura hasta el precipicio aparecieron varios de los sospechosos habituales de estas conferencias: el IVA cultural al 21%, la ausencia de pol¨ªticas adecuadas o de un ministerio ad hoc o las descargas ilegales. ¡°Lo que est¨¢ matando a la cultura es la pirater¨ªa, consentida y estimulada¡±, declar¨® Juan Cruz, periodista y escritor, adjunto a la direcci¨®n de EL PA?S. Cruz record¨® el da?o que hizo ¡°aquel grupo editorial¡± que colg¨® en la Gran V¨ªa madrile?a un cartel que rezaba ¡°la cultura es gratis¡± y destac¨® otro problema clave: ¡°La cultura de la cantidad. Parece que los museos son m¨¢s importantes, o los conciertos m¨¢s duraderos en la memoria de la gente si muchos los consumen¡±. El periodista subray¨® las culpas de los propios medios de comunicaci¨®n y, m¨¢s en general, de todos, por no luchar para revertir esta situaci¨®n.
Hubo otros dos elementos en que coincidieron los invitados. ¡°Nunca entiendo por qu¨¦ la cultura no se trata como valor estrat¨¦gico de este pa¨ªs¡±, asegur¨® Jos¨¦ Manuel G¨®mez Bravo, director de Propiedad Intelectual del Grupo Prisa ¨Ceditor de este diario-. Su afirmaci¨®n se ve reforzada por otra cifra del anuario de estad¨ªsticas culturales: el sector representa el 3,4% del PIB (un 0,1% menos que en 2013) y emple¨® el a?o pasado a 511.800 personas, un 5,6% m¨¢s que en 2013 y un 3% del total espa?ol. As¨ª, Carmen Alborch, exministra de Cultura, senadora del PSOE y profesora, subray¨® el valor de la cultura como ¡°bien com¨²n, derecho y tambi¨¦n recurso¡±. Y una y otra vez los conferenciantes insistieron en la importancia de las artes para la identidad del pa¨ªs y la llamada Marca Espa?a.
Finalmente, la soluci¨®n m¨¢s consensuada parec¨ªa pasar por una relaci¨®n m¨¢s estrecha con la educaci¨®n. C¨¦sar Antonio Molina fue el que pidi¨® con m¨¢s insistencia que artes y ense?anza vayan de la mano, con un ejemplo emblem¨¢tico: ¡°Se habla de que en Siria se est¨¢ destruyendo patrimonio cultural. ?Pero de qu¨¦ sirve si los ni?os no saben qu¨¦ es Siria, o Palmira, o el Imperio Romano?¡±. De ah¨ª que cuando S¨¢nchez-Mellado pidi¨® a los invitados una ¡°carta a los Reyes Magos¡± -es decir a quienes ganen las elecciones generales del pr¨®ximo 20 de diciembre- casi todos desearan ¡°un pacto de Estado para la Cultura y la Educaci¨®n¡±. Quiz¨¢s suene a utop¨ªa, o milagro. Pero dicen que en Navidad a veces ocurren.
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