Adolphe Sax, padre del saxof¨®n
Creador y obra protagonizan el ¨²ltimo doodle, por el aniversario del nacimiento del inventor
Hay inventos e inventores que bien valen un doodle, pero, m¨¢s all¨¢ de este juguete visual y anecd¨®tico con el que nos busca sorprender Google casi cada d¨ªa, hay inventos e inventores que bien valen un monumento. Es el caso del saxof¨®n y su creador, Adolphe Sax, que protagonizan el ¨²ltimo doodle de Google y adem¨¢s est¨¢n representados desde hace a?os a trav¨¦s de una estatua de bronce en la localidad belga de Dinant, a algo m¨¢s de 100 kil¨®metros al sur de Bruselas. All¨ª, a orillas del r¨ªo Mosa, Sax, uno de los luthieres m¨¢s famosos de la historia, fabric¨® el saxof¨®n en 1840 cuando buscaba mejorar el sonido del clarinete, instrumento que hab¨ªa estudiado y sol¨ªa tocar en el Conservatorio Real de Bruselas.
El nombre de saxof¨®n viene de su nombre, Sax, y de fono, que significa sonido. Ser¨ªa algo as¨ª como el ¡°sonido de Sax¡±. Un sonido que ten¨ªa el car¨¢cter del clarinete, aunque era m¨¢s afilado, pero que pod¨ªa aproximarse a la intensidad que se alcanzaba con un instrumento de cuerda. Con el saxof¨®n, Sax, que tambi¨¦n invent¨® con menos fortuna una especie de trompa con forma de saxo, hall¨® un lugar de encuentro para sonoridades dispares y, con el tiempo, dio con el instrumento ideal para el jazz. Porque el saxof¨®n, ¡°un instrumento de cobre y en forma de cono parab¨®lico¡± como lo describi¨® el propio Sax, es puro jazz: posee la fuerza expresiva de la trompeta y la agilidad del clarinete.
Es el sonido del jazz moderno. Porque el invento de Sax tard¨® muchos a?os en introducirse en el mundo jazz¨ªstico. A la sombra del clarinete y visto como un instrumento menor, que propiciaba una dulcificaci¨®n sonora, no fue hasta la eclosi¨®n del conocido como estilo de Chicago en los a?os 20 del siglo pasado cuando el saxof¨®n adquiri¨® importancia. En un estilo donde lo que predominaba era lo particular frente a las bandas, un instrumento como el saxof¨®n encontr¨® su sitio, impulsado por j¨®venes y entusiastas m¨²sicos blancos imitando a sus h¨¦roes de Nueva Orleans. Los m¨¢s puristas apuntaron que a partir de esta forma de solos y dar vueltas con el instrumento mor¨ªa el jazz pero lo ¨²nico cierto es que abri¨® todo un mundo de posibilidades. Incluso se cre¨® cierta epidemia por la saxoman¨ªa en esa ¨¦poca, con otra gran cuna como Kansas City, mientras, fuera de este entorno, una obra maestra de 1924 como Rapsodie in Blue, de Gershwin, empleaba tres saxofones.
Entendido el jazz como una especie de conversaci¨®n entre instrumentos, el saxof¨®n adquiri¨® una categor¨ªa de maestro a partir de grandes solistas como Lester Young, Charlie Parker o Colemann Hawkins. Pero no son los ¨²nicos nombres a destacar con letras de oro en el g¨¦nero. Partiendo de la base de que en el jazz hay saxof¨®n soprano, alto, tenor y bar¨ªtono, otros magos del instrumento han sido Cannoball Aderley, Ornette Coleman, Stan Getz, Johnny Hodges, Gerry Mulligan, Sonny Rollins, Wayne Shorter, Ben Webster o John Coltrane. Escuchando a cualquiera de ellos uno se da cuenta de que el jazz jam¨¢s hubiese sido lo mismo en el siglo XX sin el saxof¨®n. De hecho, Ornete Colemann dec¨ªa que ¡°las mejores declaraciones que hab¨ªan hecho los negros acerca del alma las hab¨ªan expresado en el saxo¡±. M¨¢s all¨¢ de colores, razas y g¨¦neros, el vol¨¢til timbre del saxof¨®n ayud¨® a la m¨²sica contempor¨¢nea a ampliar su espectro sonoro y extender el campo de las combinaciones sonoras. Y algo m¨¢s. Si uno se sumerge en obras como Body and Soul de Coleman Hawkins, Saxophone Colossus de Sonny Rollins, Something Else de Cannonball Adderley o A Love Supreme de John Coltrane, sentir¨¢ una verdad irrefutable: el mundo es un lugar mejor gracias al sonido del saxo.
??? ?? Quintento de Saxof¨®n para celebrar el 201.? aniversario de Adolphe Sax ?Refresca y ver¨¢s! #GoogleDoodle pic.twitter.com/TSEE6l3eQK
— Google Espa?a (@GoogleES) November 6, 2015
Babelia
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