¡°El sue?o americano es quijotesco¡±
El escritor mexicano Ilan Stavans aborda la influencia de la obra de Cervantes en el mundo contempor¨¢neo
llan Stavans (Ciudad de M¨¦xico, 1961) es escritor, hispanista, profesor, ensayista y agitador cultural, pero sobre todo es un apasionado de El Quijote y del spanglish, dos asuntos que han marcado su carrera profesional. Hace 13 a?os escandaliz¨® a muchos cuando uni¨® ambas pasiones y empez¨® una traducci¨®n de la obra de Miguel de Cervantes al peculiar lenguaje h¨ªbrido. ¡°In un placete de La Mancha of which nombre no quiero remembrearme¡¡±, rezaba el inicio de la traducci¨®n. ¡°Casi me matan¡±, dice ahora entre risas Stavans, de 54 a?os y profesor del Amherst College, en Massachusetts.
Todav¨ªa hoy contin¨²a adelante con este proyecto, pero Stavans ha querido sacarse la espina de abordar el infinito mundo del personaje m¨¢s relevante de la literatura espa?ola. El resultado es Quixote: The novel and the world, un libro que explora la influencia de la obra de Cervantes en el mundo en los ¨²ltimos 400 a?os. ¡°Habiendo dedicado tanto tiempo a la cultura hisp¨¢nica, pens¨¦ que si no me met¨ªa con el monstruo, con la ballena de esa cultura, todo habr¨ªa sido en vano. No pod¨ªa esperar m¨¢s¡±, explica Stavans, que el domingo present¨® su obra en la Feria del Libro de Miami, una de las m¨¢s prestigiosas de Estados Unidos.
El ensayista reconoce que el libro es ¡°una carta de amor¡± a la novela de Cervantes, en la que ve influencias no solo en autores como Jorge Luis Borges, Vlad¨ªmir Nabokov o Gustave Flaubert, sino en la cultura popular como las pel¨ªculas de El Gordo y el Flaco o en el ballet y la pintura. ¡°La influencia de El Quijote es total en el mundo¡±, afirma.
Influencia en EE UU
Esta huella es firme, por supuesto, en la cultura hispana, pero la ve incluso m¨¢s arraigada en Estados Unidos. ¡°En el mundo anglosaj¨®n la influencia de El Quijote es todav¨ªa mayor. La novela es sobre un so?ador, un idealista. ?Y qu¨¦ es los Estados Unidos si no un pa¨ªs de idealistas? Por esa raz¨®n El Quijote vende y gusta tanto aqu¨ª. Si se busca en Google, el mero adjetivo quixotic (quijotesco) se asocia a grandes figuras, a activistas, a pol¨ªticos como Bill Clinton. Obama era el Quijote en 2008. El sue?o americano es un sue?o quijotesco¡±, afirma Stavans, que destaca que en estos cuatro siglos se han hecho 22 traducciones al ingl¨¦s de la obra, solo por detr¨¢s de la Biblia.
El escritor no tiene dudas, adem¨¢s, de que es la novela ¡°m¨¢s antiespa?ola de todas las novelas escritas en Espa?a¡±. ¡°Es una cr¨ªtica severa, cruda, despiadada de la Espa?a del siglo XVII, y sin embargo es la novela a la cual Espa?a, en momentos de desesperaci¨®n, como la Guerra del 98 o la reciente recesi¨®n econ¨®mica, acude para salvarse a s¨ª misma¡±.
Como ling¨¹ista, Stavans asegura que nadie ha escrito mejor en espa?ol que Cervantes, pero introduce un matiz destinado a los ortodoxos del lenguaje. ¡°En su ¨¦poca era considerado de segunda calidad. Lope lo rechazaba, la gente no le prestaba atenci¨®n. Era el equivalente del ingl¨¦s de Stephen King, un ingl¨¦s popular¡±. De hecho, en su obra elucubra con la posibilidad de que Cervantes hubiera escrito hoy El Quijote y su respuesta es desconcertante. ¡°Alg¨²n editor lo habr¨ªa rechazado o le habr¨ªa dicho que lo redujese. La estructura es ca¨®tica. Era un autor descuidado, que comete errores. A veces no sabe qu¨¦ pas¨® con el jumento de Sancho¡±, dice Stavans, que se conoce el libro al dedillo y concluye que el mundo contempor¨¢neo ser¨ªa incomprensible sin ¨¦l. ¡°Leo la novela una vez al a?o y cuando acabo pienso que me falta un a?o para seguir ley¨¦ndola. La primera vez pens¨¦ que era sobre un loco idealista y hoy que es sobre un cincuent¨®n, como yo, que no quiere abandonar sus sue?os. Es un libro que ha alterado el mundo¡±.
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