Un arquitecto cosmopolita en un medio rural
La Fundaci¨®n Barri¨¦ repasa la obra del proyectista espa?ol Manuel Gallego
La prudencia, la modestia y seguramente la sabidur¨ªa se escuchan en un tono m¨¢s bajo que la osad¨ªa. Quiz¨¢ por ello ahora, como reacci¨®n frente al exceso arquitect¨®nico, su mensaje llega a las salas de exposici¨®n. Tras las muestras sobre David Chipperfield y Rafael Moneo, la Fundaci¨®n Barri¨¦ de A Coru?a ha inaugurado una retrospectiva que repasa la trayectoria de la estrella de la arquitectura gallega, Manuel Gallego, un arquitecto que habiendo construido s¨®lo en Galicia, ha logrado convertirse en un referente de la arquitectura nacional.
Formado en el taller madrile?o de Alejandro de la Sota y en el de Erling Viksj? en Oslo, Gallego (Carballino, Orense, 1936) dise?¨® el Museo de Bellas Artes de A Coru?a (1997), el Ayuntamiento de la Illa de Arousa (2008) y el Museo de las Peregrinaciones de Santiago (2012). Tambi¨¦n es autor de la vivienda del Presidente de la Xunta de Galicia (2002). Fue el propio Manuel Fraga quien le hizo ese encargo que, por ideolog¨ªa, a este arquitecto lo llen¨® de dudas. Lo resolvi¨® firmando una vivienda que representa m¨¢s a un lugar que a una persona.
"No quer¨ªa representar al poder sino al ciudadano al que sirve el poder". Por eso recurri¨® a la lecci¨®n de la cultura popular: "Que no fuera grandilocuente, que pasara desapercibida, que supiera convivir", explica. Eso es lo que ha hecho siempre. Ha defendido el contexto arquitect¨®nico ¡ª"el clima por encima de la forma"¡ª y ha conseguido reputaci¨®n nacional tanto por sus renuncias como por sus conquistas.
Premio Nacional de Arquitectura en 1997 y Medalla de Oro de la Disciplina 2011, Manuel Gallego, que estudi¨® en Madrid porque cuando lo hizo no exist¨ªa una escuela en Galicia, ha levantado toda su obra en su regi¨®n. Sin embargo, su fama nacional obedece a que sus edificios est¨¢n m¨¢s arraigados por la puesta al d¨ªa de la tradici¨®n y el conocimiento del lugar que por una evocaci¨®n directa de la misma. Con todo, ¨¦l cuenta que tiene dudas de que la arquitectura se pueda explicar. "Se tiene que sentir, y lo que te la hace sentir es la claridad de las ideas, no las formas extravagantes", se?ala. En esta retrospectiva ¨¦l mismo ha hecho de comisario "porque quiero contar c¨®mo lo veo yo". "Cada obra es una sorpresa, esa es la ¨²nica manera de trabajar", asegura. "Quieres que cada nuevo edificio tenga algo nuevo que te sorprenda a ti mismo". Y para ¨¦l, lo nuevo "es lo que sale de dentro de uno. Lo que nace sentido hace las cosas nuevas", argumenta.
Defiende el contexto arquitect¨®nico, ¡°el clima por encima de la forma¡±
Hasta 1980 A Coru?a no tuvo Escuela Superior de Arquitectura y, no por casualidad, fue la Fundaci¨®n Pedro Barri¨¦ de la Maza la que la construy¨® y equip¨® como ya hab¨ªa hecho, cinco a?os antes, con la Escuela Universitaria de Arquitectura T¨¦cnica. Tras esas primeras inversiones en la formaci¨®n de los futuros proyectistas, esta instituci¨®n comenz¨® una labor de divulgaci¨®n apostando, en pleno apogeo de la burbuja arquitect¨®nica, por acercar al gran p¨²blico la obra de creadores que han reivindicado con su trabajo el genius loci, es decir, la cultura del lugar. As¨ª, es de rigor que ahora le toque a Gallego la oportunidad de valorar su trayectoria.
Muestra clara y directa
Manuel Gallego. Arquitectura 1967-2015 es la primera retrospectiva sobre este proyectista que en diciembre cumplir¨¢ 79 a?os. Como ¨¦l mismo, tambi¨¦n la exposici¨®n es clara y directa. Una gran imagen de cada uno de los 22 proyectos seleccionados (viviendas de los inicios y espacios colectivos de la madurez) trata de acercar al espectador no a la forma del edificio sino al clima que ¨¦ste consigue.
El arquitecto atl¨¢ntico siempre ha defendido que, lejos de experimentos y teor¨ªas, "la arquitectura es la creaci¨®n de un lugar para usar y vivir". Por eso habla m¨¢s de luz y ambiente que de planos, secciones o formas. El ambiente es para ¨¦l lo que define la arquitectura. Lo que intenta encerrar en sus edificios y lo que trata de transmitir ahora que pasa revista a su obra.
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