Arturo Ripstein, en vena
La pel¨ªcula es un cat¨¢logo hermoso y procaz, desequilibrado y arrebatado, descarnado y lujurioso, del cine del mexicano
Casi como un gui?o a la obra de Luis Bu?uel, primoroso y desvergonzado padre de su propio cine, como un homenaje a El ¨¢ngel exterminador y su m¨ªtica calle de La Providencia, Arturo Ripstein ha titulado su ¨²ltima pel¨ªcula La calle de la amargura. Los de la Providencia bu?ueliana eran unos burgueses que, por la fuerza del surrealismo, se degradaban hasta convertirse en desechos. Los de la Amargura de Ripstein siempre han habitado el reino de la podredumbre. Inspirada en un hecho real (el asesinato de dos luchadores, gemelos y enanos), la pel¨ªcula es un cat¨¢logo hermoso y procaz, desequilibrado y arrebatado, descarnado y lujurioso, tanto de los modos de articular historias del autor de Principio y fin y La reina de la noche, como de su visi¨®n de M¨¦xico como tierra de violencia.
LA CALLE DE LA AMARGURA
Direcci¨®n: Arturo Ripstein.
Int¨¦rpretes: Patricia Reyes Sp¨ªndola, Arcelia Ram¨ªrez, Silvia Pasquel, Alberto Estrella.
G¨¦nero: drama. M¨¦xico, 2015.
Duraci¨®n: 99 minutos.
En su presentaci¨®n en el Festival de Venecia, donde se le otorg¨® un Premio Especial a su carrera, Ripstein afirm¨® hacer cine "desde el rencor". Declaraci¨®n nada novedosa para los habituales de su obra, que, si no lo sab¨ªamos, al menos lo intu¨ªamos, pero que desvela a un autor tan satisfecho de su propio malestar que es incluso capaz de conformarlo como sello de estilo. Como sus habituales juegos con los espejos y esos personajes en fuera de campo que entran en el encuadre por la fuerza de su imagen reflejada. Como la agilidad y fluidez de su c¨¢mara, que sigue a sus criaturas no con el objetivo en el cogote, a la manera de los hermanos Dardenne, sino a unos metros, con la parsimonia de la elegancia. Como sus corralas de vecinos a la deriva. Como su apoteosis de la miseria social y moral. Rodada en blanco y negro, y con un deficiente sonido (en el pase para la prensa se agradec¨ªan los subt¨ªtulos en ingl¨¦s), La calle de la amargura es pura y simplemente el universo de ahora y de siempre de Arturo Ripstein.
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