Calixto Ochoa, rey de la m¨²sica vallenata

?xitos como Los sabanales, El pirulino, El calabacito, Todo es para ti, La plata o El africano est¨¢n asociados a esta estrella del vallenato, una expresi¨®n de la m¨²sica de Colombia que le hizo decir a Garc¨ªa M¨¢rquez que Cien a?os de soledad no era sino un vallenato de 350 p¨¢ginas. Cuando van a cumplirse dos a?os de la muerte de Diomedes D¨ªaz, con solo 56, la m¨²sica vallenata pierde a otra de sus grandes figuras: Calixto Ochoa, de 81 a?os, falleci¨® el 18 de noviembre, en Sincelejo, capital del departamento colombiano de Sucre. El compositor, cantante y acordeonista, que festej¨® el ¨²ltimo cumplea?os con una parranda en su domicilio del barrio La Terraza, llevaba mucho tiempo ya retirado de las tarimas.

Calixto de Jes¨²s Ochoa Campo hab¨ªa nacido en 1934 en Valencia de Jes¨²s, departamento del Cesar. De ni?o sol¨ªa escapar de casa para ir a las parrandas en las que sus hermanos mayores, Juan y Rafael, tocaban el acorde¨®n hasta el amanecer. El conjunto vallenato estaba entonces compuesto por acorde¨®n, guacharaca ¡ªidi¨®fono de raspado¡ª y caja. Ochoa contaba que hab¨ªa aprendido a manejar el acorde¨®n a escondidas, mientras sus hermanos trabajaban en el monte. En cuanto consigui¨® los pesos necesarios se compr¨® uno, y tras actuar en fincas de la regi¨®n, decidi¨® marchar a la aventura. En compa?¨ªa de un amigo recorri¨® pueblos camino de la costa hasta llegar a Sincelejo. All¨ª se qued¨® a vivir y, con 21 a?os, grab¨® Lirio rojo, que despert¨® el inter¨¦s de Discos Fuentes. Por iniciativa del propietario de la disquera, pas¨® a integrar Los Corraleros de Majagual, una formaci¨®n hist¨®rica.

El primer Festival de la Leyenda Vallenata se celebr¨® en 1968 en la plaza Alfonso L¨®pez, de Valledupar. En 1970 la tercera edici¨®n vio c¨®mo Calixto Ochoa se coronaba Rey Vallenato. Hace m¨¢s de cuatro d¨¦cadas que Ochoa puso a bailar a buena parte del pa¨ªs. Y diez a?os desde que la fundaci¨®n del Festival lo declar¨® rey vitalicio junto a Rafael Escalona, Emiliano Zuleta Baquero, Leandro D¨ªaz y Adolfo Pacheco.

El Negro Cali, como tambi¨¦n se le conoc¨ªa, fue sin duda un compositor vers¨¢til, siempre con sabrosura y picaresca, ya que adem¨¢s de paseos, sones o cumbias, escribi¨® boleros, porros y pase¨ªtos, algunos de ellos versionados cientos de veces. Y, seg¨²n aseguraba, ten¨ªa muchas canciones a¨²n sin grabar por falta de tiempo. ¡°Mama, qu¨¦ ser¨¢ lo que quiere el negro¡±, dice el estribillo de El africano, n¨²mero que populariz¨® Wilfrido Vargas y que grabaron la Sonora Dinamita, Fruko y sus Tesos, Ray Conniff o Georgie Dann. El periodista William Rosado Rincones public¨® en 2012 una biograf¨ªa suya: El mundo de Calixto.