John Hughes, el cineasta que dignific¨® la adolescencia

Con un pu?ado de pel¨ªculas (realiz¨® ocho en siete a?os), John Hughes ocupa un lugar especial en la historia del cine: se le reconoce por haber sentado las bases de lo que llamamos la teenage comedy [comedia de adolescentes] gracias a una trilog¨ªa m¨¢gica, divertida y sensible ¡ªDiecis¨¦is velas (1984), El club de los cinco (1985), su obra maestra, y Todo en un d¨ªa (1986)¡ª a la que hay que a?adir La chica de rosa (1986), que escribi¨® y produjo para Howard Deutch.

Por primera vez se describ¨ªa a los adolescentes como seres humanos, sensibles y que piensan. Por fin, un director daba consistencia a unos personajes complejos que se atrev¨ªan a expresar dudas y desavenencias. Antes de que apareciese, las pel¨ªculas dirigidas a los adolescentes se parec¨ªan m¨¢s a la serie de Porky¡¯s, en las que la principal preocupaci¨®n de los personajes era tener una relaci¨®n sexual. En Hughes, el tema del sexo se convirti¨® en secundario, e incluso ni se mencionaba. No centraba su pel¨ªcula en las estrellas del instituto, sino en los desconocidos y en los marginados, los que antes solo aparec¨ªan en papeles secundarios como hazmerre¨ªr de los dem¨¢s. Los j¨®venes espectadores se identificaban totalmente con ellos.

Todav¨ªa hoy en d¨ªa, cerca de 30 a?os despu¨¦s de que se rodasen, sus pel¨ªculas siguen conmoviendo a muchos de quienes las descubren. En las p¨¢ginas de Internet dedicadas a ¨¦l aparecen a menudo las mismas frases, que se resumen as¨ª: ¡°Tus pel¨ªculas me han ayudado a vivir¡±. Para explicar tama?o ¨¦xito, John Hughes ten¨ªa una respuesta muy sencilla: ¡°Siempre he intentado ser fiel a mi memoria y a lo que he vivido, y tambi¨¦n ser lo m¨¢s honesto posible con el p¨²blico¡±. Esa es su gran fuerza, y David Dobkin, el director de De boda en boda (2005), la resume perfectamente: ¡°Hughes hac¨ªa las pel¨ªculas para ¨¦l, pero cuando las ve¨ªas siempre te daba la impresi¨®n de que las hac¨ªa especialmente para ti¡±.

Despu¨¦s de dejar el mundo de la adolescencia se interes¨® por los adultos con Mejor solo que mal acompa?ado, y m¨¢s concretamente con La loca aventura del matrimonio (1988), un filme agridulce que pod¨ªa considerarse una continuaci¨®n de sus pel¨ªculas adolescentes y en el que describ¨ªa la dif¨ªcil entrada de una pareja joven en el mundo de los adultos.

A lo largo de su carrera, John Hughes demostr¨® ser un guionista prol¨ªfico (31 en 21 a?os) y extremadamente veloz (escribi¨® el gui¨®n de El club de los cinco en dos d¨ªas). Uno de sus guiones, realizado por Chris Columbus en 1990, le catapult¨® a otra dimensi¨®n. Solo en casa, con Macaulay Culkin, gener¨® en aquel entonces m¨¢s de 500 millones de d¨®lares en todo el mundo y supuso el principio del fin para John Hughes. Todo lo que escribi¨® despu¨¦s fue invariablemente malo, y olvid¨® la sensibilidad y la finura que hicieron destacar a sus anteriores proyectos. Todo eso desapareci¨® y fue sustituido por unos gags est¨²pidos en guiones que parec¨ªan calcados unos de otros. La m¨¢quina se rompi¨®, y el artesano se convirti¨® en un industrial.

En 1991 realiz¨® su octava y ¨²ltima pel¨ªcula como director, que fue la peor: La peque?a p¨ªcara (1991). Cansado, y despu¨¦s de este fracaso tanto art¨ªstico como comercial, se retir¨® poco a poco de la vida p¨²blica. Se neg¨® a conceder entrevistas, se encerr¨® en su casa de las afueras de Chicago, alejado de la industria hollywoodiense y se content¨® con escribir comedias est¨²pidas (Los 101 d¨¢lmatas, Beethoven, Flubber y el profesor chiflado...), pero que segu¨ªan teniendo ¨¦xito.

En 1998, probablemente hastiado de las grandes pel¨ªculas familiares que realizaba en cadena, volvi¨® a un proyecto m¨¢s personal al escribir y producir Objetivo: la roca (in¨¦dito en Espa?a), dirigido por Bill Ryan, que trataba de una noche en una c¨¢rcel. Esta pel¨ªcula, que fue un terrible fracaso (5.000 d¨®lares en la taquilla estadounidense), fue su ¨²ltimo guion para el cine. Como anunci¨® en 1994 (¡°Cuando ya no tenga nada que decir, desaparecer¨¦ en una nube de humo¡±), abandon¨® el mundo del cine para dedicarse plenamente a su familia.

El gran p¨²blico solo volvi¨® a o¨ªr hablar de ¨¦l el d¨ªa en que muri¨®, una ma?ana de agosto de 2009, v¨ªctima de una crisis cardiaca a los 59 a?os sobre una acera de Nueva York.

Con el paso del tiempo, John Hughes ha pasado de la categor¨ªa de cineasta con talento a la de autor de referencia del cine estadounidense. Hoy en d¨ªa, muchas de las personalidades m¨¢s importantes de Hollywood (Ben Stiller, Wes Anderson y Judd Apatow, entre otros) reconocen la enorme influencia que las pel¨ªculas de Hughes han tenido en sus obras. El punto culminante de este reconocimiento tard¨ªo fue el hermoso homenaje que recibi¨® en los Oscars de 2010... a t¨ªtulo p¨®stumo.

Philippe Bouthi¨¨rees periodista franc¨¦s.