Genios sin trucos
Con tan buenos mimbres, 'Cuando ¨¦ramos los mejores', sobre la vida de ¡®Magic¡¯ Johnson y Larry Bird, no emociona. La narraci¨®n es lineal
A veces los fantasmas se transforman en hombres de carne y hueso que dan m¨¢s miedo que cualquier esp¨ªritu. Earving ¡®Magic¡¯ Johnson creci¨® lanzando sonrisas mientras escuchaba que seguro que hab¨ªa alguien trabajando m¨¢s que ¨¦l para ser el mejor jugador de baloncesto del mundo. Y lo hab¨ªa. Al otro lado del pa¨ªs, Larry Bird, hijo de un padre que no hab¨ªa superado la Guerra de Corea y se hab¨ªa suicidado, viv¨ªa por y para tirar a canasta. Aquel chaval jugaba con metralleta. Magic, con su varita m¨¢gica. El destino les lanz¨® a competir al mismo tiempo. Y se pegaron. Y se insultaron. Y conocieron el sida. Y vieron a compa?eros que le daban a las drogas. E intentaron odiarse. Sentir asco por el otro. Despreciarle y minimizarle. Y no lo consiguieron. Por extra?o que parezca, Magic y Bird, negro y blanco, locuaz y callado, r¨¢pido y lento, se hicieron la pareja de amigos m¨¢s extra?a que ha dado el baloncesto.
Cuando ¨¦ramos los mejores (Contra), su biograf¨ªa compartida, tiene un argumento tan raro como cierto en el caso de Bird y Magic: que a veces uno convive tanto con sus fantasmas como para que acaben siendo parte de uno mismo.
Magic conoci¨® al jugador que deb¨ªa ser su N¨¦mesis a trav¨¦s de la portada del Sports Illustrated. En ella posaba un adolescente desconocido con mirada t¨ªmida. Le acompa?aban dos animadoras. ¡°El arma secreta¡±, se le¨ªa. Todav¨ªa eran jugadores universitarios, pero all¨ª estaba el hombre con el que pelear¨ªa durante 15 a?os por los t¨ªtulos de la NBA (cinco para Magic, tres para Bird); el rival con el que revitalizar¨ªa una Liga hundida por las drogas, la violencia y los problemas raciales; y el amigo con el que ganar¨ªa el oro ol¨ªmpico en Barcelona. Bird, Larry Bird.
Quien no conozca este pulso tit¨¢nico tiene aqu¨ª una puerta perfecta para adentrarse en una relaci¨®n sorprendente
Con tan buenos mimbres, Cuando ¨¦ramos los mejores no emociona. El libro est¨¢ lleno de an¨¦cdotas sobre las estrellas de los Lakers de Los ?ngeles y los Celtics de Boston. Abundan tambi¨¦n las confesiones de los dos protagonistas y los datos estad¨ªsticos. La narraci¨®n, sin embargo, es lineal. Recorre el enfrentamiento casi temporada a temporada. Eso le quita tensi¨®n. No se escuchan los gritos del Garden insultando a los Lakers, no se acelera el coraz¨®n cuando entra el ¨²ltimo tiro, no abruma la precisi¨®n quir¨²rgica de Bird disparando sin fallo. Esta es una relaci¨®n de la que ya se sabe casi todo, porque se vivi¨® frente a las c¨¢maras y marc¨® la explosi¨®n comercial y televisiva del baloncesto. El libro la recorre con minuciosidad, pero sin la chispa del deporte en directo ni la novedad del periodismo de investigaci¨®n.
Quien no conozca este pulso tit¨¢nico tiene aqu¨ª una puerta perfecta para adentrarse en una relaci¨®n sorprendente. Los seguidores de la NBA, sin embargo, solo podr¨¢n rebobinar la pel¨ªcula de su propia memoria. Tampoco es mal negocio. Ah¨ª est¨¢n los Lakers recibiendo llamadas de madrugada en su hotel de Boston para que lleguen sin dormir a la final. El entrenador Pat Riley persiguiendo a Magic para hablarle de baloncesto hasta en vacaciones. Las aventuras de los Juegos de Barcelona. El Bird de French Lick, al que su madre dej¨® de hablar dos meses por no haberse convertido en el primer miembro de la familia que terminaba la Universidad. El contraste entre el Magic amante de los focos y el Bird introvertido. Y los cinco verbos que sirvieron para construir el puente entre dos mundos tan distintos. Pasar el bal¨®n. Morir por recuperar el bal¨®n. Ganar antes que respirar. Perseguir a Magic. Perseguir a Bird. Cazar al fantasma para demostrar que t¨² tambi¨¦n has trabajado duro.
Cuando ¨¦ramos los mejores. Earvin "Magic" Johnson, Larry Bird, Jackie MacMullan. Contra. Barcelona, 2015. 368 p¨¢gs. 21.90 euros
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