Charles Perrault y los finales que no te cont¨® Disney

Google rinde homenaje al escritor franc¨¦s Charles Perrault en el aniversario n¨²mero 388 de su nacimiento con un doodle que ilustra sus cuentos. Perrault es reconocido por escribir cuentos infantiles como Caperucita Roja, La Cenicienta, La Bella Durmiente, El Gato con Botas, Pulgarcito, aunque no se le atribuye a ¨¦l la creaci¨®n original de todas las historias.

A sus 55 a?os, escribi¨® Cuentos del Pasado, m¨¢s conocidos como Cuentos de Mam¨¢ Ganso y donde se encuentran la mayor¨ªa de sus historias m¨¢s famosos. Sus versiones eran m¨¢s crueles y poco tienen que ver los cuentos con finales felices que ahora muestra Disney.

En homenaje a Perrault, a continuaci¨®n reproducimos un texto publicado en EL PA?S por Lola Gal¨¢n en 1977 que cuenta la verdadera historia de Caperucita Roja.

La imposible muerte de Caperucita

Trescientos a?os despu¨¦s de que Charles Perrault escribiera los cuentos qu¨¦ por transmisi¨®n oral hab¨ªan ido conserv¨¢ndose a lo largo de la Historia, los t¨ªtulos de estos relatos siguen siendo el gran hallazgo de la literatura infantil de nuestros d¨ªas. A pesar de las nuevas ideas en pedagog¨ªa, a pesar de las nuevas concepciones respecto a la mentalidad infantil, los cuentos de nuestro hijos han sido nuestros cuentos, como lo fueron de nuestros padres y de nuestros abuelos.

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La maldad en los cuentos infantiles sirve de pedagog¨ªa

Al margen de honrosas excepciones de escritoras como Gloria Fuertes o Ana Mar¨ªa Matute, dedicadas, sobre todo en el caso de la primera, a la literatura infantil, lo cierto es que este inmenso y problem¨¢tico campo sigue casi desierto de novedades, mientras se actualizan y remozan Caperucitas, Cenicientas o Heidis, en un alarde preocupante de falta de imaginaci¨®n.

Existen, c¨®mo no, algunas muestras dignas de autores como Saint-Exup¨¦ry, que de vez en cuando hicieron una escapada a la infancia, pero sin dejar por ello de perpetuar en su obra un mundo adulto, caso de El peque?o pr¨ªncipe, o Jacques Prevert, que un buen d¨ªa nos escribe Cuentos para chicos traviesos, pero el ni?o como lectores un sujeto dif¨ªcil y pr¨¢cticamente desconocido.

No hace mucho han aparecido en el mercado espa?ol, editados por Lumen, unos pocos cuentos escritos por dos feministas italianas, Adela Turin y Nella Bosnia, con un marcado inter¨¦s por romper con el cero ideol¨®gico que desde la infancia se dedica a establecer papeles, a construir un mundo de ni?os y ni?as, de futuros hombres y mujeres perfectamente definidos.

Una feliz cat¨¢strofe, Rosa caramelo, con un breve apunte ?a favor de las ni?as?, y Arturo, y Clementina, dos tortugas problem¨¢ticas e ins¨®litas, son los primeros t¨ªtulos de esta v¨ªa nueva que no acaba de ser aceptada.

El verdadero libro infantil es la televisi¨®n

En la misma l¨ªnea, y tambi¨¦n publicado por Lumen, est¨¢ Los tambores, aunque en este caso el tema es la guerra, y la tesis es de un marcado antibelicismo, que dif¨ªcilmente puede competir con las historietas de h¨¦roes m¨¢s o menos c¨®micos tipo Ast¨¦rix o personajes televisivos, todos ellos en una l¨ªnea combativa y guerrera cien por cien.

Porque, todo hay que decirlo, el verdadero libro infantil es la televisi¨®n. Su influencia es decisiva y total a la hora de comprar un cuento u otro.

Teatro infantil

Un libro de verdadero inter¨¦s es la Antolog¨ªa de teatro infantil, realizada por Carlos Luis Aladro. Se trata de una deliciosa recopilaci¨®n de textos breves, de los muchos cientos de piezas teatrales escritas por ni?os de ocho y nueve a?os y representadas entre 1960-1971 por el Teatro Experimental Infantil, en el colegio de Nuestra Se?ora de? Pilar y en las escuelas Santa Mar¨ªa del Pozo, del Pozo del T¨ªo Raimundo. Aquella interesant¨ªsima experiencia, desconocida para la mayor parte de la gente, ha quedado as¨ª impresa, acompa?ada adem¨¢s de cientos de dibujos infantiles llenos de vitalidad y colorido, junto a fotograf¨ªas de las representaciones dirigidas en todo momento por los propios autores v actores.

Una adaptaci¨®n especial de La fierecilla domada, de William Shakespeare, adem¨¢s de varios cuentecillos teatrales de Mar¨ªa Novel y Carmen Suqu¨¦ y de Espona, han sido editados por La Galera, e incluso una versi¨®n de la inevitable Caperucita. En libros de teatro infantil existe asimismo una traducci¨®n de la obra de la escritora brasile?a Mar¨ªa Clara Machado, aparecidas en la editorial Escelicer.

El tema teatral es asequiblemente tratado en los cuadernos que para ni?os de diez a?os tiene publicados la Editorial Mi?¨®n. El teatro, El cine, Los juegos, son algunos de los t¨ªtulos, que se complementan, adem¨¢s, con Los cuentos del teatro, Los cuentos de los juegos, etc¨¦tera.

La preocupaci¨®n de la ense?anza por hacerse m¨¢s asequible y amena se deja sentir en la proliferaci¨®n de libros de divulgaci¨®n especialmente para ni?os de ocho a doce a?os. Desde los grandes y ampulosos ¨¢lbumes sobre el mundo de los animales, los bosques o los r¨ªos, hasta el estudio alegremente ilustrado de Las civilizaciones o la historia en general. La Biblioteca Altea tiene editados una serie de cuadernillos tambi¨¦n para los m¨¢s peque?os, con diferentes temas, Soy un p¨¢jaro, Soy un ¨¢rbol, etc¨¦tera, a trav¨¦s de los cuales pretende informar de lo elemental de la manera m¨¢s simple.

En el mismo estilo est¨¢n los cuadernos de la Editorial Mi?¨®n para ni?os de tres a?os, colecci¨®n de Ali Mitgutsch De la arena al cristal, Del grano de trigo al pan, con graciosos dibujos que dan una elemental informaci¨®n de la elaboraci¨®n de un producto b¨¢sico o un objeto.

Pero en este mismo terreno docente el ejemplo m¨¢s interesante por lo inusual y original lo constituye el equipo de maestros Rosa Sensal, con sus colecciones para ni?os. Primeras im¨¢genes, primeras palabras, es un intento sumamente interesante para ayudar de una manera amena y activa a los peque?os que comienzan a leer hacia los cuatro o cinco a?os. Las palabras aparecen en los cuatro idiomas espa?oles, catal¨¢n, castellano, vasco y gallego. Junto al texto, que puede versar sobre El vestido o Los veh¨ªculos, se utilizan fichas especiales, que son im¨¢genes para simplificar y hacer m¨¢s directa la percepci¨®n infantil. Para los mayores existen incluso diapositivas.

D¨ªa del Libro Infantil

Lo cierto es que la importancia del libro infantil es muy grande, cosa que s¨®lo muy recientemente ha empezado a comprenderse. Quiz¨¢ por ello las principales editoriales de libros de este tipo -impulsadas por Alfaguara- han acordado celebrar el 4 de junio el D¨ªa del Libro Infantil, dentro de la Feria del Libro 1977.

En el recinto de la antigua Casa de Fieras se instalar¨¢ una especie de miniferia especial para los peque?os, donde tranquilamente podr¨¢n disfrutar del placer de ojear y bucear un poco en el mundo de las novedades editoriales, sin la angustia de verse arrastrados a una feria de mayores, llena de incomodidades para ellos. En este recinto podr¨¢n disfrutar del libro de Alicia para los peque?os, preparada por el propio autor, Lewis Carroll. De una nueva edici¨®n de Historia de Babar el elefantito, el conocido cuento de Jean de Brunhoff, o Lo que sab¨ªa mi loro, de uno de los grandes poetas precursores de la generaci¨®n del veintisiete, Jos¨¦ Moreno Villa, que acaba de publicar la Editorial Alfaguara y que presenta a la feria como reedici¨®n de un libro inencontrable. Moreno Villa escribi¨® esta recopilaci¨®n de cuentos, poemas y canciones para los ni?os de los exiliados espa?oles en M¨¦xico, tras la guerra civil, y la ilustr¨® con sus espl¨¦ndidos dibujos.