Programa de mano para ¡®Historia de nuestro cine¡¯

Frente a la mala prensa que el cine espa?ol suele tener en muchos medios, Historia de nuestro cine descubre en La 2 (lunes a viernes) pel¨ªculas estupendas incluso para los m¨¢s recalcitrantes, otras muy buenas y hasta alguna obra maestra. Y tambi¨¦n, filmes mediocres, como los hay en cualquier pa¨ªs del mundo.

Esta semana, por ejemplo, dedicada a algunas actrices notables, podremos admirar a Imperio Argentina, la m¨¢xima estrella del cine espa?ol de los a?os treinta, en su Morena Clara (1936), de Flori¨¢n Rey, cuyo ¨¦xito popular fue tal que durante la Guerra Civil lleg¨® a exhibirse a la vez en los dos frentes.

Medio camuflada, se podr¨¢ ver una joya de Fernando Fern¨¢n G¨®mez, La vida por delante (1958), en la que ¨¦l mismo comparte protagonismo con Anal¨ªa Gad¨¦, la actriz argentina que deslumbr¨® al p¨²blico espa?ol de los a?os cincuenta. Esta comedia sobre las dificultades de la vida cotidiana del momento obtuvo tal ¨¦xito que se realiz¨® una segunda parte, La vida alrededor.

No menor atenci¨®n merece Funci¨®n de noche (1981), en la que Josefina Molina coloc¨® a la actriz Lola Herrera y a su marido en la vida real, Daniel Dicenta, frente a frente confes¨¢ndose sus anhelos y frustraciones.

Premios y festivales

La primera semana de febrero estar¨¢ dedicada a los Goya, con dos pel¨ªculas premiadas: El a?o de las luces (1986), de Fernando Trueba, que obtuvo el Goya a la mejor actriz de reparto para Ver¨®nica Forqu¨¦, y La buena estrella (1997), de Ricardo Franco, que logr¨® cinco estatuillas, entre ellas la de mejor pel¨ªcula. La programaci¨®n continuar¨¢ la semana siguiente con filmes policiacos, g¨¦nero al que el cine espa?ol cine dedic¨® mucha atenci¨®n, a pesar de aparentar lo contrario. Y ah¨ª est¨¢n Domingo de carnaval, que Edgar Neville rod¨® en 1945, desgraciadamente en blanco y negro, porque sus im¨¢genes inspiradas en cuadros de Solana piden a voces el color. Y atenci¨®n a otra joya del g¨¦nero, Apartado de correos 1001, realizada por Julio Salvador, hoy de culto, que en 1950 inici¨® en Barcelona la realizaci¨®n de filmes de cine negro.

Seguir¨¢n otras tres notables obras: El crack (1981), de Jos¨¦ Luis Garci, en la que Alfredo Landa mostr¨® una nueva faceta como actor; Fanny Pelopaja (1984), una de las mejores obras de Vicente Aranda, y Todo por la pasta (1991), con la que Enrique Urbizu se inici¨® en el g¨¦nero en el que luego ha sobresalido.

Coloquio: La Guerra civil

Tres ciclos m¨¢s se exhibir¨¢n en febrero. Uno estar¨¢ dedicado a la presencia espa?ola en el Festival de Berl¨ªn, aunque sin las ganadoras del Oso de Oro, a excepci¨®n de Las palabras de Max, de Emilio Mart¨ªnez-L¨¢zaro, que lo comparti¨® en 1978 con Las truchas, de Jos¨¦ Luis Garc¨ªa S¨¢nchez, y con el corto Ascensor, dirigido por Tom¨¢s Mu?oz, como homenaje a la reci¨¦n estrenada democracia espa?ola. Pero se podr¨¢n ver trabajos de Carlos Saura (Peppermint frapp¨¦, de 1967), Pedro Almod¨®var (?tame, de 1989) y Fernando Trueba (La ni?a de tus ojos, de 1998).

Otro ciclo dedicado a las pel¨ªculas que aspiraron al Oscar a la mejor pel¨ªcula en lengua no inglesa mostrar¨¢ dos que lo ganaron, Volver a empezar (Jos¨¦ Luis Garci, 1982) y Belle Epoque (Fernando Trueba, 1992), pero merece tambi¨¦n la pena ver las que se quedaron en puertas: Los Tarantos, de Francesc Rovira i Beleta (1963), y El nido, de Jaime de Armi?¨¢n, (1980).

Y para cerrar el mes, cine de terror con otra cinta de culto, El cebo (Ladislao Vajda, 1959); la poca vista La residencia de Narciso Iba?ez Serrador (1969), y otras pel¨ªculas muy notables, como La noche de Walpurgis, de Paul Naschy (1970).