Jos¨¦ Luis Cuerda, maestro del surrealismo rural

Este albacete?o de casi 70 a?os ingres¨® de ni?o en un seminario donde residi¨® tres a?os. Poco a poco, fue abandonando la fe religiosa y hoy en d¨ªa lo tiene clar¨ªsimo: ¡°Hay argumentos muy elocuentes sobre la inexistencia de un Dios todopoderoso y de bondad infinita. Si puede hacer lo que quiera y tiene una bondad infinita, ?por qu¨¦ nos hace estas cosas? ?C¨®mo puede dejar que un ni?o se muera con dolor? La Teolog¨ªa aguanta mal estos temas. Son insostenibles por pura l¨®gica¡±.

Intent¨® luego estudiar Derecho, carrera que tambi¨¦n abandon¨® pronto. ¡°Las grandes decisiones que he tomado en mi vida han sido sin pensarlas mucho porque si lo piensas acabas por no hacerlo¡±, reconoce ahora. Se afili¨® al Partido Comunista, en el que milit¨® apenas un a?o, quiso ser escritor (de hecho lo es) hasta que descubri¨® que el narrador de nuestro tiempo es el cineasta. As¨ª que cuando la familia se traslad¨® a Madrid, gracias al piso que su padre hab¨ªa ganado jugando al p¨®quer, ingres¨® en TVE, donde se fue formando como director en programas de todo tipo: documentales y noticiarios, cortos y largos.

Al cabo de los a?os, se ha convertido en un cineasta de peso, como director o como productor. Por si fuera poco, ahora cultiva vinos de Ribeiro y tiene sus bodegas. ¡°Me voy defendiendo, pero el del vino es un negocio muy complicado¡±, reconoce.

Lo m¨¢s conocido de su cine, adem¨¢s de la adaptaci¨®n de un relato de Manuel Rivas, La lengua de las mariposas, es la trilog¨ªa del ¡°surruralismo¡±, compuesta por Total, Amanece que no es poco y As¨ª en el cielo como en la tierra. Aunque muchos opinan que son puro desprop¨®sito, se trata, seg¨²n ¨¦l, de ¡°un retorcimiento de la realidad que sigue siendo realidad¡±. Y agrega: ¡°Lo que escribo suele estar lleno de ocurrencias que pueden parecer disparates, pero que nacen de lo que ocurre; son tan realidad como la realidad misma. La realidad mental es tan real como la f¨ªsica o la comprobable cient¨ªficamente, solo que con consecuencias distintas¡±.

Lo del ¡°surruralismo¡± (a ¨¦l no le gusta definirlo como surrealismo) proviene de ser ¨¦l pueblerino, como sus padres y abuelos. El mundo rural es su inspiraci¨®n, que en Total le llev¨® a convertir una aldea manchega en el Londres de 2598, tres d¨ªas despu¨¦s del fin del mundo, o en el mism¨ªsimo juicio final en As¨ª en el cielo como en la tierra.

La divertida y l¨²cida trasposici¨®n de estas aldeas ha hecho que se diga de ¨¦l: ¡°Cuerda es bueno para la salud mental¡±. Se r¨ªe al escucharlo. La verdad es que se r¨ªe bastante y de casi todo, particularmente de la falta de memoria que achaca a las edades: ¡°Hace unos d¨ªas, organizaba con unos amigos la metodolog¨ªa de nuestro di¨¢logo para que no se nos olvidase de qu¨¦ est¨¢bamos hablando¡±. Aunque a veces esa risa sea solo apariencia. Hay quien le recuerda en el funeral de su esposa leyendo el hor¨®scopo feliz que, seg¨²n un peri¨®dico, le correspond¨ªa a ella ese d¨ªa. ¡°No recuerdo lo que dec¨ªa el hor¨®scopo pero era tremendo y lo le¨ª en el p¨²lpito llorando. Soy muy llor¨®n. Las noticias diarias me hacen llorar y lloro al ver a gente emocionada¡±

¡°No me gusta c¨®mo est¨¢ organizado este mundo, que parte de la idea de que todos somos imb¨¦ciles, todos menos unos cuantos que nos miran desde arriba ri¨¦ndose y d¨¢ndose codazos entre ellos mientras comentan ¡®mira c¨®mo los tenemos¡¯. Todo es espantoso pero nada es indiferente¡±, dice. ¡°Me sorprende que la izquierda no encuentre un com¨²n denominador para hacer una pol¨ªtica contra los todopoderosos a beneficio de la poblaci¨®n, pero quiz¨¢s sea por lo que dijo el ex presidente uruguayo Jos¨¦ Mujica de que en ning¨²n otro momento hist¨®rico hab¨ªa encontrado uno en que los dirigentes pol¨ªticos fueran tan mediocres como los actuales¡±, sigue.

¡°Puedo entender que en caso de necesidad se mate por dinero o por una pasi¨®n amorosa sin freno; es una barbaridad pero puedo entenderlo, pero que se mate por ideas, por la patria, que no es m¨¢s que el sitio donde has nacido, y que eso tenga consecuencias administrativas, religiosas, econ¨®micas... es puro disparate¡±.

Pero eso no le hace conformarse. Tras haber descubierto a Alejandro Amen¨¢bar y haberle producido sus tres primeras pel¨ªculas, y de haber dirigido, entre otras, La marrana, El bosque animado o Los girasoles ciegos, Cuerda est¨¢ organizando varios proyectos propios: ¡°Pel¨ªculas, series, cosas numerosas que me apetecen mucho. Tengo un proyecto de una pel¨ªcula desde hace mucho tiempo que transcurre en el mundo del teatro, con dos actrices extraordinarias, pero en una de las teles en que lo present¨¦ un tipo me pregunt¨® que d¨®nde iba con esos dos dinosaurios. ?Por qu¨¦ se empe?ar¨¢n en que saben lo que quiere el p¨²blico si ellos mismos no tienen ni idea? Se acierta cuando se acierta, y ya est¨¢. Otro proyecto es Un a?o entero, que es el tiempo que pas¨¦ en una cama con una pleures¨ªa con cinco o seis a?os que luego se complic¨® con algo de ri?¨®n. Esa pel¨ªcula me apetece much¨ªsimo hacerla, quiero hacerla sea como sea, bueno, como sea no, porque no voy a bajar la guardia¡±.

Otro proyecto es la traca final de Amanece que no es poco, ¡°un espect¨¢culo audiovisual partiendo del teatrito de As¨ª en el cielo como en la tierra, cuando aparece Dios y afirma: ¡®Hay uno por ah¨ª que dice que me he muerto¡±.

Recuerda con emoci¨®n que a Woody Allen le gust¨® mucho La lengua de las mariposas: ¡°Como respuesta, le envi¨¦ unos vinos y me contest¨® que yo hac¨ªa tan buenos vinos como pel¨ªculas y se ofreci¨® a un encuentro que declin¨¦ porque yo no s¨¦ ingl¨¦s y hablar con un traductor es un co?azo¡±.