Joe McPhee: ¡°Lo que hago es tan sencillo como caminar¡±
El saxofonista estadounidense, el ¨²ltimo de la estirpe de los creadores del 'free jazz', est¨¢ de gira por Europa. Su f¨®rmula: improvisaci¨®n, o ¡°creaci¨®n instant¨¢nea¡±, y reivindicaci¨®n social y pol¨ªtica
Joe McPhee es una leyenda viva. Este saxofonista de 76 a?os es considerado uno de los ¨²ltimos de una estirpe de m¨²sicos que revolucionaron el jazz. Nacido en 1939 y casi coet¨¢neo de Ornette Coleman, Don Cherry o Archie Shepp, a su edad muchos vivir¨ªan de las rentas. ?l no. ?l actuar¨¢ en Madrid junto a Chris Corsano, un bater¨ªa al que le saca 30 a?os y en cuyo curr¨ªculo se incluye haber tocado con Bj?rk o Thurston Moore. Al parecer fue este ¨²ltimo el que les present¨®. Moore, fundador de Sonic Youth, se arriesg¨® en una ocasi¨®n a intentar definir el sonido de McPhee. Dijo que eran ¡°r¨¢fagas de fuego de completa y absoluta libertad¡±. Tan absoluta es su libertad como su humildad. En el momento de contestar esta entrevista recorre Europa en una furgoneta en una gira por peque?os clubes como la Sala Clamores de Madrid. Sin aspavientos. El hombre que recogi¨® la antorcha que encendieron John Coltrane, Miles Davis, Thelonious Monk o Charles Mingus no ha tenido la vida dram¨¢tica de sus antecesores.
McPhee ha ido a su ritmo. Grab¨® su primer disco cerca de los 30 a?os y no fue hasta 1981, con m¨¢s de 40, cuando pudo dedicarse profesionalmente a la m¨²sica. Hasta entonces, este estadounidense de primera generaci¨®n, hijo de inmigrantes de las Bahamas, hab¨ªa sido soldado y obrero en una f¨¢brica de Poughkeepsie, una ciudad de 20.000 habitantes a 120 kil¨®metros de Nueva York. Aunque da la impresi¨®n de que, en lo que a McPhee se refiere, podr¨ªa haber estado perfectamente a 1.200. La mayor parte de su lib¨¦rrimo trabajo, entre el free jazz y la improvisaci¨®n, se ha realizado gracias a Europa. Incluso cuando era un aficionado. En 1975 uno de sus devotos cre¨® en Suiza el sello HatHut para publicar su m¨²sica. Hoy ambos, sello y artista, son dos de las grandes joyas de la m¨²sica considerada como arte, no como comercio ni como espect¨¢culo. ¡°El jazz es m¨²sica, es un lenguaje, es la vida¡±, dice McPhee tras emplear 50 a?os a extraer del saxo ¡ªy de otros instrumentos de viento¡ª sonidos que antes nadie sab¨ªa que estaban ah¨ª. El hombre empe?ado en borrar la l¨ªnea que separa interpretaci¨®n de composici¨®n escribe a partir de improvisar en directo. ¡°La improvisaci¨®n es simplemente una forma de crear, pero para m¨ª es muy importante porque estoy muy interesado en la creaci¨®n instant¨¢nea de m¨²sica. Es coger todo lo que me ha ense?ado la vida y usarlo para crear mi arte¡±.
¡°El jazz es m¨²sica, es un lenguaje, es la vida. La improvisaci¨®n es coger lo que me ha ense?ado la vida y usarlo para crear¡±
Eso da lugar a experimentos osados. En 2013, su ¨²ltimo disco en solitario, Sonic Elements, empezaba con cinco minutos de silencio casi absoluto. ¡°Pauline Oliveros, gran amiga y gran m¨²sica, me dijo en una ocasi¨®n: ¡®Escuchamos para o¨ªr. O¨ªmos para experimentar el mundo que nos rodea¡¯. Es parte de su filosof¨ªa Deep Listening, escuchar con todo su ser. Quer¨ªa que el p¨²blico hiciera eso. El concierto era m¨²sica dedicada a Don Cherry y Ornette Coleman. Quer¨ªa que la gente pensara en eso, no en m¨ª¡ enfocar¡±.
Esa pureza de intenciones, asombrosa en un m¨²sico de 76 a?os, es lo que hace m¨¢s especial su sonido. ¡°Hacer lo que hago es tan sencillo como caminar. Pones un pie delante del otro para asegurarte de que el suelo es firme y avanzas siempre en direcci¨®n a la estrella polar¡±, dice.
Hoy es ¨¦l la estrella polar para varias generaciones de m¨²sicos. Desde luminarias del jazz como Ken Vandermark, que le ha reivindicado como una influencia b¨¢sica, hasta renovadores del hip-hop como Madlib, que ha sampleado Nation Time, la grabaci¨®n en directo de 1970 que es todav¨ªa la piedra angular de su carrera. Esa en la que aparece en portada vestido como un revolucionario negro. ¡°Eran mis ropas, no un uniforme de Black Power. Por la ¨¦poca en la que est¨¢ grabado, la gente lleg¨® a la conclusi¨®n de que yo pertenec¨ªa a los Black Panthers, pero no. Conoc¨ªa la organizaci¨®n, pero no ten¨ªa ninguna conexi¨®n con ellos. Eso s¨ª, mi m¨²sica siempre ha sido un veh¨ªculo para la reivindicaci¨®n y las protestas pol¨ªticas y sociales desde el primer disco, Underground Railroad, una referencia a un sistema secreto por el cual los esclavos se mov¨ªan del Sur al Norte y estaba dedicada a los h¨¦roes de ese movimiento¡±. Porque si hay algo que tiene claro McPhee es la paternidad del jazz. ¡°Nace de la historia y la lucha del pueblo afroamericano. Es nuestra contribuci¨®n a la cultura mundial¡±.
Joe McPhee act¨²a el 9 de febrero en la madrile?a Sala Clamores (calle de Alburquerque, 14). Entradas, 12 euros. Reducida para menores, 6 euros.
This Is Our Language. Rodrigo Amado, Joe McPhee, Kent Kessler y Chris Corsano. Not Two Records, 2015.
Dream Defenders. Joe McPhee / Chris Corsano Duo. Mn¨®ad, 2014.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.