¡®Al salir de clase¡¯ ya no est¨¢ de moda

El curso acad¨¦mico televisivo comenz¨® primero en el instituto 7 Robles. Casi a la vez, abri¨® sus puertas el colegio Azcona. Eran los centros educativos de dos de las series m¨¢s exitosas de la televisi¨®n a finales de los noventa, Al salir de clase y Compa?eros. Millones de adolescentes de los noventa y los primeros a?os del siglo XXI so?aron alguna vez con estudiar entre aquellas paredes. All¨ª todo era m¨¢s intenso que en la vida real: las pasiones, la amistad, los problemas. Al salir de clase emiti¨® su primer cap¨ªtulo en septiembre de 1997. El instituto Zurbar¨¢n de F¨ªsica o qu¨ªmica clausur¨® su historia en junio de 2011. Durante todo ese tiempo, las series juveniles fueron un elemento imprescindible de la parrilla. Ahora, la historia es otra. Este tipo de ficciones han quedado relegadas al recuerdo de los nost¨¢lgicos.

Los h¨¢bitos de consumo han evolucionado con la televisi¨®n por Internet. Al mismo tiempo, se ha multiplicado la oferta de canales. Al salir de clase, en Telecinco, cosech¨® una media de 2.429.000 telespectadores y una cuota de pantalla del 21,5 %. Se emit¨ªa a diario, en la sobremesa. Unas cifras que muy pocos programas actuales anhelan y muy pocos alcanzan. Ni siquiera en horario de m¨¢xima audiencia.

Compa?eros coincidi¨® en el tiempo con la ficci¨®n de Mediaset, aunque no en franja de emisi¨®n. Una media de 3.991.000 seguidores y un 25,0 % de share la avalaron cada semana en prime time. Ambas allanaron el camino para la explosi¨®n de productos juveniles que vendr¨ªa poco despu¨¦s. Un paso adelante, SMS, El internado, F¨ªsica o qu¨ªmica, Nada es para siempre... Todas permanecieron con los televidentes varias temporadas y consiguieron unos datos nada desde?ables.

Josep Cister, subdirector de Ficci¨®n del Grupo Boomerang, la productora de F¨ªsica o qu¨ªmica y Los protegidos, habla de targetizar. ¡°No eran exclusivamente juveniles, aunque estuvieran protagonizadas por adolescentes. Si no, jam¨¢s hubieran conseguido esas audiencias¡±.

Lejos quedan aquellos resultados. Lo que antes asum¨ªan los canales generalistas, ahora es producto de las emisoras tem¨¢ticas. Como Yo quisiera, de Divinity. Su primera temporada no ha superado los 200.000 espectadores, pero sus resultados no son comparables a los de anta?o. ¡°A la fragmentaci¨®n de canales hay que a?adirle el cambio en las formas de ver la televisi¨®n. Los j¨®venes se asoman a las nuevas tecnolog¨ªas¡±, apunta Sonia Mart¨ªnez, directora de Ficci¨®n de Atresmedia.

La segmentaci¨®n se ha convertido en la t¨®nica general en la estrategia de productoras y grupos. ¡°Cuando cont¨¢bamos solo con un canal, ten¨ªa sentido dedicar productos espec¨ªficamente a distintos grupos de espectadores¡±, explica Toni Sevilla, director de Ficci¨®n de Mediaset.

La situaci¨®n es diferente ahora. Al contar con m¨¢s canales, los productos de nicho se derivan a otras emisoras en lugar de programarse en la cadena principal, como apunta Sevilla. ¡°Pretendemos llegar con nuestra emisora principal a un amplio espectro de la audiencia. Series como El Pr¨ªncipe, Chiringuito de Pepe o La que se avecina incluyen tramas y personajes dirigidos a fidelizar al p¨²blico joven, pero no excluyen a otros p¨²blicos¡±.

Atresmedia sigue la misma estrategia de integrar a todos los p¨²blicos. ¡°Hay que intentar ofrecer contenidos que atraigan a los j¨®venes, que sean novedosos. Y se est¨¢ haciendo. Vis a vis, Mar de pl¨¢stico... son productos que abarcan a distintos tipos de p¨²blico, pero no echan a los j¨®venes¡±, indica Sonia Mart¨ªnez. De momento, ninguno de los grupos medi¨¢ticos se plantea rescatarlas en sus cadenas principales. ¡°Es el negocio. Tenemos que intentar abarcar un p¨²blico que tenga posibilidades de mantener un dato¡±, reconoce Mart¨ªnez.

M¨¢s receptivo se muestra Josep Cister, que cree que el producto acabar¨¢ por reinventarse. ¡°Son ciclos, y la segmentaci¨®n televisiva a¨²n no se ha asentado. Dentro de unos a?os habr¨¢ un nuevo F¨ªsica o qu¨ªmica¡±.