Coco Chanel y Lauren Bacall se codean con Goya y Banksy
La feria de arte de Maastricht evoluciona hacia un lujoso escaparate en el que can¨®nicas obras antiguas o grafitis conviven con joyas o con una muestra de Ferran Adri¨¤
Si como dice Artur Ram¨®n, los galeristas como ¨¦l venden ilusi¨®n, y para ello necesitan que ¡°la econom¨ªa fluya con seguridad¡±, la Feria Internacional de Arte y Antig¨¹edades de Maastricht (TEFAF) es el mejor ejemplo de que ni la crisis, ni el frenazo del mercado art¨ªstico mundial en 2015, aguan la fiesta. Porque TEFAF es eso, una fiesta grande y selecta donde los coleccionistas revolotean para no perder la pieza ansiada. Fiesta exigente tambi¨¦n, ya que la investigaci¨®n necesaria para acreditar las obras de los galeristas no garantiza que vayan a ser expuestas. Todo depende del comit¨¦ de acreditaci¨®n, que las rechaza si recela de lo que podr¨ªa parecer una gran firma. Fiesta, en fin, que casi ha patentado el efecto sorpresa, ya sea por sus descubrimientos o su precios astron¨®micos. O por el robo de joyas, como ha ocurrido en sus 29 a?os de historia.
Esta vez, el hallazgo ha sido un Libro de las horas, de los hermanos Limbourg, legendarios miniaturistas medievales. Conocidos por el manuscrito iluminado de Las muy ricas horas del duque de Berry, el volumen ahora recuperado fue un regalo del duque a su sobrino, Luis de Orleans, y estuvo seis siglos en un archivo vien¨¦s. El anticuario suizo Heribert Tenschert, que lo vende por 12 millones de euros, lo vio en Internet y no par¨® hasta conseguirlo. ¡°Es una obra ¨²nica¡±, dec¨ªa ayer.
El desenga?o lo vivi¨® la galer¨ªa espa?ola Coll y Cort¨¦s (asociada a la londinense Colnaghi). Tuvo que retirar un San Sim¨®n, del Greco, porque los expertos lo atribuyeron a su taller. El disgusto fue compensado por una venta vertiginosa. La sala Mauritshuis, de La Haya, famosa por exhibir La joven de la perla, de Vermeer, le compr¨® un Bodeg¨®n de flores en una hornacina (1615), del holand¨¦s Roelant Savery, por 6,5 millones. Desde la casa londinense Fergus Hall, un H¨¦rcules, de Ribera, parec¨ªa montar guardia. Lo ofrecen por 4,4 millones. Este a?o, el arte espa?ol brilla con fuerza: hay piezas de El Greco, Zurbar¨¢n, Goya, Federico Beltr¨¢n Masses y Juan van der Hamen (galer¨ªa Caylus), adem¨¢s de Picasso, Mir¨® y Dal¨ª. La galer¨ªa L¨®pez de Arag¨®n ten¨ªa una Virgen del Rosario, de Zurbar¨¢n (850.000 euros). Tambi¨¦n una m¨¢scara romana de m¨¢rmol amarillo (2,5 millones). El retrato de Don Pedro Gil de Tejada, de Goya, colgaba en Stair Sainty, de Londres, y se vende por 3,6 millones. El lienzo es imponente, pero lo que de verdad emocionaba al galerista era una Salom¨¦ desnuda, en verdes y azules tenebrosos. ¡°Beltr¨¢n Masses entend¨ªa la psicolog¨ªa femenina, y result¨® muy controvertido en 1929 por su osad¨ªa¡±.
Ram¨®n tuvo m¨¢s suerte con su greco, una miniatura con el retrato de la nuera del pintor. ¡°Aunque los ¨²nicos que no regatean son los americanos, ya hay gente interesada¡±, dijo. Sale por 700.000 euros. El precio de su tabla de Los ¨¢ngeles coronando a la Virgen y el Ni?o, de Adriaen Isenbrandt, llegaba a 800.000 euros.
Insectos de titanio
?Pero no todo son lienzos, porcelanas, relojes o grafitis de Banksy, que lleva camino de mudar en cl¨¢sico. TEFAF atrae cada vez m¨¢s obras modernas y diversas, como joyas de factura asombrosa. As¨ª son los broches en forma de flores e insectos de titanio erizados de piedras preciosas del chino Walace Chan. ?l mismo las califica de ¡°m¨¢s all¨¢ del arte¡±. Lo contrario de un collar de esmalte negro y turquesa, de la actriz Lauren Bacall. O las dos pulseras Cruz de Malta, que Coco Chanel luci¨® medio siglo. Las due?as eran m¨¢s famosas que el adorno.
Con TEFAF de fondo, en el coraz¨®n de la ciudad el cocinero Ferran Adri¨¤ se asoma desde la casa Marres. Este centro cultural mezcla experimentos y exposiciones. En Ferran Adri¨¤: Notas sobre la creatividad, brilla el efecto visual de los preparativos: esbozos, dibujos, s¨ªmbolos, collages, utensilios de cocina, recetas, y modelos en arcilla de las piezas para sus cocciones. La muestra pas¨® antes por EE UU; en Maastricht es un gui?o al poder¨ªo econ¨®mico y la belleza del arte establecido.
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