¡®Birdman¡¯ ac¨²stico

La bater¨ªa y Antonio S¨¢nchez son uno mismo. Se conocen tan bien que son capaces de sonar juntos por m¨¢s de 15 minutos seguidos sin que alguno de los dos demuestre signos de cansancio. Si Birdman, la pen¨²ltima obra de Alejandro Gonz¨¢lez I?¨¢rritu, ya era una gran obra visual por la intervenci¨®n de Emmanuel Lubezki, Antonio S¨¢nchez recuerda ahora que es tambi¨¦n una gran obra sonora.

El baterista mexicano musicaliz¨® en vivo el filme que les dio a Gonz¨¢lez I?¨¢rritu y Lubezki el Oscar en 2015. La noche del mi¨¦rcoles el ritmo constante de los tambores y platillos de S¨¢nchez retumbaron por todo el Teatro Metropolitan de la Ciudad de M¨¦xico, abarrotado hasta las luces.

El ganador de cuatro Grammy record¨® la primera vez que conoci¨® a Gonz¨¢lez I?¨¢rritu en Los ?ngeles y c¨®mo tiempo despu¨¦s le invit¨® a colaborar con Birdman. En una encerrona con el director de The Revenant, S¨¢nchez empez¨® a idear el sonido que caracteriza a la historia de Riggan Thomson, protagonizado por Michael Keaton.

Durante las casi dos horas que dura el filme, Antonio S¨¢nchez aparec¨ªa y desaparec¨ªa del escenario. Una pantalla m¨¢s peque?a que proyectaba el filme frente a ¨¦l, hac¨ªa las veces de partitura para que el m¨²sico empezara a crear los beats que siguen a cada personaje de la cinta.

Hacia el final de la noche, con un p¨²blico extasiado y tras el ¨²ltimo cr¨¦dito en pantalla, Antonio S¨¢nchez se hizo uno con la bater¨ªa que le acompa?¨® en una esquina del escenario central. Los asistentes parec¨ªan a veces confundidos cuando S¨¢nchez bajaba la intensidad de los golpes y aplaud¨ªan solo para ver su ovaci¨®n apagada por una repentina secuencia de sonidos cada vez m¨¢s llenos de notas que recorr¨ªan todos los rincones de la bater¨ªa, pasando por cada tom y hasta el filo de los platillos.

Tras quince minutos, el m¨²sico dej¨® descansar los brazos para recibir aplausos de pie y culmin¨® una noche que confirma que hace mucho que el cine dej¨® de ser solo im¨¢genes en movimiento.