Celia cuenta la verdad de la guerra
La popular ni?a creada por Elena Fort¨²n relat¨® la crueldad de la contienda civil espa?ola sin atender a ideolog¨ªas. La estremecedora novela se reedita ahora, 30 a?os despu¨¦s
Elena Fort¨²n aguant¨® toda la guerra civil en Espa?a. Vivi¨® en directo el hambre atroz, las bombas, el odio, tambi¨¦n la solidaridad y los cr¨ªmenes de un bando y del otro. Republicana de coraz¨®n y anticlerical, la escritora teji¨® en la calle un testimonio estremecedor sobre la lucha por la vida en la retaguardia de la contienda, sin atender a ideolog¨ªas ni victimismos. Celia en la revoluci¨®n, el eslab¨®n perdido de la saga de las historias de Celia, un libro buscado y perseguido por lectores y coleccionistas de la serie, sale de nuevo a la calle editado por Renacimiento.
Con una narraci¨®n sencilla y directa, po¨¦tica y desgarradora, la novela, escrita reci¨¦n acabada la guerra, es un relato autobiogr¨¢fico de Elena Fort¨²n (Madrid, 1886-1952), una mujer poco convencional que nunca milit¨® en ning¨²n partido pol¨ªtico pero que tuvo profundas convicciones republicanas. Se exili¨® luego a Buenos Aires. El libro se presenta en Madrid el pr¨®ximo d¨ªa 22 con la presencia de la alcaldesa Manuela Carmena.
¡°Es, sin duda, la novela que le hubiera gustado escribir a Baroja¡±, asegura Andr¨¦s Trapiello, autor del pr¨®logo. El entusiasmo de Trapiello por la reedici¨®n de la obra, que public¨® por primera vez Aguilar en 1987, es enorme. El libro desapareci¨® muy pronto del mercado y solo se pod¨ªa encontrar en algunas librer¨ªas de viejo a precios astron¨®micos. ¡°Es una novela autobiogr¨¢fica que no se decanta ni por el fascismo ni por el comunismo, sino que da voz a todos aquellos que no quer¨ªan adscribirse a ninguno de estos dos bandos. Es la gran cr¨®nica del miedo y el hambre, de los desgarros, las muertes y las separaciones. Es el testimonio de una persona dispuesta a reconocer y asumir responsabilidades pol¨ªticas, penales y morales. El ¨²nico compromiso de Celia y Elena Fort¨²n fue la verdad de lo que hab¨ªan vivido, independientemente de la ideolog¨ªa. Ah¨ª est¨¢n todas las cosas de las que nadie quer¨ªa hablar, incluidos sus propios cr¨ªmenes. Es la cr¨®nica que cuenta los hechos y las verdades tal y como fueron, alejados de la propaganda de uno y otro bando A la chita callando, Fort¨²n escribi¨® una de las grandes novelas de la guerra civil¡±, asegura Trapiello. El escritor incluye este testimonio vital dentro del corpus de lo que ¨¦l llama la tercera Espa?a, aquella de la que dieron cuenta gente como Aza?a, Juan Ram¨®n Jim¨¦nez, Clara Campoamor, Chaves Nogales o el diplom¨¢tico chileno Morla Lynch. Relatos de esa tercera Espa?a por parte de unos autores que proclamaron no la equidistancia, sino la ecuanimidad y que permanecieron sepultados e in¨¦ditos durante a?os por el ambiente tan poco favorable a escuchar y recibir la verdad m¨¢s absoluta.
La revoluci¨®n que se vivi¨® en Madrid conforma la primera parte de esta novela-cr¨®nica para luego pasar a las ciudades de Valencia, Albacete o Barcelona. ¡°?Esto es la revoluci¨®n! Yo me hab¨ªa figurado las revoluciones con muchedumbres aullando por las calles¡. Aqu¨ª hay silencio, polvo, suciedad, calor y hombres que ocupan el tranv¨ªa con fusiles al hombro¡±, cuenta en julio de 1936 Celia, esa ni?a de quince a?os que se hizo cargo de sus dos hermanas peque?as tras la muerte de su madre y que convive con un padre republicano y un primo miembro de Falange. ¡°A m¨ª, unas veces me parece que tiene raz¨®n pap¨¢ y otras creo que es Gerardo", asegura sincera. Las checas, las barbaridades de los fusilamientos al anochecer, los crueles bombardeos, las huidas de familias enteras, los gritos y las carreras desatinadas por debajo de los balcones... Todo sale a relucir en este desgarrador relato, en el que tambi¨¦n hay sitio para la felicidad y la poes¨ªa, el olor a tomillo, el radiante sol de oto?o o el sabor de una tortilla francesa calentita.
El manuscrito de Celia en la revoluci¨®n, escrito a l¨¢piz, en cuartillas ya oscurecidas por el tiempo y con una escritura muy borrosa, fue encontrado por Marisol Dorao, doctora en Filolog¨ªa Moderna en la Universidad de C¨¢diz, en los a?os ochenta. Estaba en manos, recuerda hoy Mar¨ªa Jes¨²s Fraga, tambi¨¦n doctora y estudiosa pertinaz de la obra de Elena Fort¨²n, del ¨²nico miembro superviviente de la familia de la autora, su nuera, una viejita despierta y locuaz que viv¨ªa en Estados Unidos y que entreg¨® a Dorao un bols¨®n lleno de papeles. Ah¨ª estaba la obra perdida, la que faltaba en la serie de Celia, la que une de manera definitiva el libro Celia, madrecita y Celia, institutriz. Algo faltaba en la saga y era Celia en la revoluci¨®n. Sin ¨¦l no hubieran tenido sentido las ¨²ltimas palabras de Celia, madrecita: ¡°?Qu¨¦ d¨ªa es ma?ana? Dieciocho de julio¡ Ojal¨¢ vuelvas pronto, dijo el abuelo. Y el coraz¨®n se me apret¨® sin saber porqu¨¦¡±. Para Mar¨ªa Jes¨²s Fraga, la reedici¨®n de la obra supone un feliz encuentro con esta periodista y escritora injustamente poco reconocida: ¡°De prosa sencilla y directa, con novelas dialogadas y muy divertidas, que se dirige al lector interpel¨¢ndolo, Elena Fort¨²n es una de las grandes de la literatura espa?ola¡±.
Mujer desdichada
Todos dicen que Elena Fort¨²n- su nombre real, Encarnaci¨®n Aragoneses, lo cambi¨® y tom¨® el seud¨®nimo de una de las obras de teatro de su marido, un militar mucho mayor que ella - fue una mujer desdichada. Su bi¨®grafa, Marisol Dorao, habla de su condici¨®n de lesbiana como una de las causas de la infelicidad en su matrimonio que, sin embargo, nunca rompi¨®. De sus dos hijos, uno muri¨® con diez a?os y el segundo se suicid¨® en Estados Unidos, pa¨ªs en el que se exili¨® tras la guerra. A?os antes, el marido de la escritora tambi¨¦n hab¨ªa decidido quitarse la vida en Buenos Aires, donde se hab¨ªa instalado la pareja. Al final de su vida (muere en Madrid en 1952) abraz¨® la religi¨®n cat¨®lica. A¨²n conocida por los libros de Celia, que empez¨® a escribir por cap¨ªtulos en un suplemento infantil de un peri¨®dico de la ¨¦poca, Elena Fort¨²n fue una prol¨ªfica autora de todo tipo de ensayos, reportajes y novelas, muchos de ellos hoy todav¨ªa desconocidos e incluso alguno in¨¦dito. Abelardo Linares lleva a?os buscando y revisando la obra de esta escritora dentro de la Biblioteca Elena Fort¨²n, dirigida por Mar¨ªa Jes¨²s Fabra y Nuria Capdevila-Arg¨¹elles . En breve se publicar¨¢n dos nuevos libros: la novela in¨¦dita Oculto sendero, un valiente testimonio autobiogr¨¢fico en torno al lesbianismo y el descubrimiento de su orientaci¨®n sexual y una recopilaci¨®n de reportajes, publicados en un peri¨®dico en los a?os treinta, con entrevistas reales a ni?os trabajadores, bajo el t¨ªtulo Un amigo en cada sitio.
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