Cervantes, Jefferson y educaci¨®n para el siglo XXI
Jefferson fue un visionario y advirti¨® la riqueza del multiculturalismo y del biling¨¹ismo para su pueblo
Como si Miguel de Cervantes Saavedra y William Shakespeare hubieran hecho un pacto para dejar al mundo sin su genialidad, de golpe, el mismo d¨ªa, ambos fallecieron un 23 de abril, hace cuatrocientos a?os. Eso dice el mito ¨Cen realidad murieron con un par de d¨ªas de diferencia¨C pero la imprecisi¨®n en la fecha es solo un detalle. Hoy su obra est¨¢ m¨¢s viva que nunca y en el d¨ªa del idioma celebramos su legado.
Cervantes enriqueci¨® el espa?ol con la narraci¨®n de las ocurrencias del caballero de la triste figura y su fiel escudero Sancho Panza, y Shakespeare, por su parte, fue un dramaturgo sin paralelo que retrat¨® las emociones humanas m¨¢s nobles y viles en obras cl¨¢sicas como Romeo y Julieta, Hamlet y Macbeth.
Estos genios de la literatura, espa?ola e inglesa respectivamente, trascendieron su ¨¦poca, superaron las barreras del idioma y tocaron con su pluma la vida de artistas y l¨ªderes de todas las latitudes. Por ejemplo, Thomas Jefferson, uno de los padres fundadores de Estados Unidos, aprendi¨® espa?ol con una copia de El Quijote y un libro de gram¨¢tica, mientras cruzaba el Atl¨¢ntico camino a Europa.
?l era un convencido del ¡°poder que tiene la lengua como estrategia de relacionamiento¡±. Tanto que le insist¨ªa a sus hijas Martha y Mary para que leyeran esta novela como parte de sus clases y en una carta que le escribi¨® a su yerno, Thomas Mann Randolph Jr., le asegur¨® que el espa?ol era el lenguaje moderno que deb¨ªa saber todo americano, un recurso estrat¨¦gico para relacionarse con Latinoam¨¦rica y los inmigrantes.
No estaba equivocado. Jefferson fue un visionario y advirti¨® la riqueza del multiculturalismo y del biling¨¹ismo para su pueblo. Y es que, seg¨²n la Oficina del Censo en Estados Unidos, para 2050 unos 138 millones de estadunidenses podr¨¢n entenderse en el idioma de Cervantes, lo que la convertir¨¢ en la naci¨®n donde m¨¢s se habla espa?ol en el mundo. Una cifra que no sorprende, pues hoy uno de cada seis americanos es hispano y en cincuenta a?os esta relaci¨®n ser¨¢ de uno de cada cuatro.
Cada vez es m¨¢s importante pensar a Estados Unidos como una sociedad que se enriquece con la diversidad y fruto de la inmigraci¨®n. Debemos acoger a las minor¨ªas en todos los campos, desde un sistema de salud incluyente hasta una educaci¨®n de calidad que les d¨¦ a los estudiantes herramientas como profesores que manejen el espa?ol y el ingl¨¦s con proficiencia y se valgan de plataformas digitales.
Esta es una necesidad inminente teniendo en cuenta que, en busca de una mejor educaci¨®n que la que tuvieron sus padres y abuelos, los alumnos latinos encabezan el grupo que crece m¨¢s r¨¢pido en las escuelas p¨²blicas. De acuerdo al Pew Research Center, para el 2023 los hispanos podr¨ªan llegar a ser el 30% de los matriculados en las escuelas p¨²blicas.
Si bien cada vez m¨¢s j¨®venes hispanos finalizan la secundaria y se inscriben en la universidad, todav¨ªa los blancos los superan ampliamente en la obtenci¨®n de diplomas de ense?anza superior. Por eso es vital ofrecer en las escuelas p¨²blicas una educaci¨®n que fomente la diversidad, que responda a las necesidades espec¨ªficas de cada poblaci¨®n y que tienda puentes entre las culturas. Con esto me refiero a programas para aprender ingl¨¦s sin perder el idioma materno. Como indica un estudio centrado en la educaci¨®n biling¨¹e y bicultural de la Universidad de Texas, los hijos de inmigrantes que abandonan en la adolescencia el idioma de su pa¨ªs de origen familiar, al llegar a los 30 a?os tienden a tener menos ingresos que los que conservaron ambos idiomas.
Es la oportunidad ideal para borrar las fronteras geogr¨¢ficas con la ayuda del lenguaje y apoyados en las nuevas tecnolog¨ªas. Una tarea que debe ir m¨¢s all¨¢ de los l¨ªmites de Estados Unidos y permite que este pa¨ªs estreche lazos de cooperaci¨®n e intercambio de conocimientos con sus vecinos latinoamericanos.
As¨ª como es vital fomentar el biling¨¹ismo en Norteam¨¦rica, en Latinoam¨¦rica hay que derribar las prevenciones que tienen los ni?os frente al ingl¨¦s. No quieren aprenderlo porque no lo ven necesario y, para colmo, reciben una ense?anza deficiente de esta segunda lengua. Entonces se extrema la desigualdad que sufren estos peque?os y pierden la oportunidad de concursar en igualdad de oportunidades para ganar becas y regresar con m¨¢s conocimiento y conexiones a sus pa¨ªses de origen. Eso por no hablar de las desventajas laborales que padecen en un mundo globalizado.
Hermanar los sistemas educativos de Latinoam¨¦rica con escuelas en Estados Unidos, donde 4 de cada 10 estudiantes son hijos de hispanos, tiene mucho sentido. As¨ª como promover el aprendizaje entre pares, estudiantes con estudiantes motivados mutuamente por la amistad, por el sue?o de conocer otros horizontes y el aprendizaje de otra lengua como veh¨ªculo para lograrlo.
Como Jefferson lo preve¨ªa, e invitando a la mayor sensatez a quien resulte electo como presidente de Estados Unidos, es innegable la creciente poblaci¨®n hispana que suma ya 57 millones de personas. Debemos ayudarnos para darle a las nuevas generaciones la mejor educaci¨®n posible y hacer de las dos lenguas una poderosa llave que abra muchas m¨¢s puertas para nuestros ni?os y j¨®venes. Varias de las naciones m¨¢s pr¨®speras, como Suiza o Singapur, son oficialmente multiling¨¹es.
Con motivo del d¨ªa del idioma, es momento de fomentar una educaci¨®n biling¨¹e y prepararnos para ser talento mundial. Qu¨¦ orgullo ser¨ªa poder decir que en nuestras aulas se lee por igual a Shakespeare y a Cervantes, en su idioma original.
* Emiliana Vegas es jefa de la Divisi¨®n de Educaci¨®n del Banco Interamericano de Desarrollo.
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