Un ¡®thriller¡¯ morboso de Verhoeven y un drama de Farhadi cierran el concurso de Cannes

Como si Claude Chabrol, Roman Polanski y Brian de Palma se hubieran juntado a compartir opiniones, as¨ª es el talento de Paul Verhoeven para el thriller morboso. Como si Instinto b¨¢sico cruzara sus pasos con Las diab¨®licas de Clouzot as¨ª sabe el c¨®ctel de Elle. La pel¨ªcula que clausura el concurso de la secci¨®n Oficial de Cannes ha mantenido pegados a la butaca a los espectadores en su pase de prensa, gracias a la precisi¨®n del cineasta holand¨¦s ¨Cque inaugur¨® en 1993 este certamen con Instinto b¨¢sico- en un filme tan malsano como morboso, ir¨®nico y perverso.

Todo eso ya estaba en el libro de Philippe Djian, autor franc¨¦s cuyas novelas han alimentado pel¨ªculas como Betty Blue, El amor es un crimen perfecto o Impardonnables, y que fue el anzuelo que el productor Sa?d Ben Sa?d en la boca de Verhoeven. ¡°Me envi¨® el libro, me pregunt¨® si quer¨ªa hacer una pel¨ªcula adapt¨¢ndolo y respond¨ª que s¨ª. Muy sencillo. Es un milagro encontrar algo nuevo que no haya hecho antes¡±, ha contado esta ma?ana en la rueda de prensa el director de Showgirs, Delicias turcas, Starship Troopers, Desaf¨ªo total, Los se?ores del acero o El libro negro. En ese algo ¨²nico incidi¨® Isabelle Huppert, protagonista de este thriller: ¡°La gran cualidad es que no hay explicaciones, sino que el p¨²blico se crea sus propias hip¨®tesis. Mi personaje reacciona o no a lo que pasa, no hay m¨¢s¡±. As¨ª resume la estrella francesa una trama en la que encarna a la due?a de una empresa de videojuegos, marcada por un brutal acontecimiento que ocurri¨® en su infancia, y a la que en la primera secuencia viola un encapuchado. No lo denuncia a la polic¨ªa por lo que ocurri¨® en el pasado, y prosigue con su vida repleta de extra?as relaciones mientras se encadenan acontecimientos morbosos.

Para Huppert, toda esa brillantez ya estaba en un ¡°guion era perfecta con dialogo buen¨ªsimos¡±. ¡°La iron¨ªa ya estaba en la novela, que crea un mont¨®n de interacciones entre los personajes. Verhoeven supo llevar eso de manera brillante. La pel¨ªcula tiene m¨¢s de misterio y suspense que de ambig¨¹edad, mezcla muy europea¡±. A su lado, Verhoeven asegur¨® que de sus a?os en Hollywood y de su colaboraci¨®n con guionistas estadounidenses aprendi¨® varias cosas: ¡°Importa la estructura y la forma de ense?ar los detalles. Elle es un h¨ªbrido, como yo¡±. Preguntado por un posible paralelismo entre la narraci¨®n de Elle y la m¨²sica de Igor Stravinski, respondi¨® feliz: ¡°De ¨¦l aprend¨ª que lo mejor es ser breve. La estructura en su m¨²sica vive de su precisi¨®n, no le sobran notas. Us¨¦ eso en Elle. Adem¨¢s quer¨ªa que la pel¨ªcula avanzara hacia su objetivo sin descanso, y eso est¨¢ en Stravinski¡±. En ese sentido, habl¨® mucho con el guionista: ¡°Insist¨ª mucho en que la adaptaci¨®n siguiera la l¨ªnea de la novela y que la respetara, que no se parara a explicar cosas al estilo hollywoodiense¡±. Y eso que hubo un primer momento en que la pel¨ªcula iba a rodarse en Estados Unidos: ¡°S¨ª, as¨ª arranc¨® el proyecto pero el productor me dijo que Huppert ser¨ªa estupenda en el personaje que adem¨¢s le interesaba. La novela era francesa, se desarrolla en Par¨ªs... As¨ª que yo encantado. Huppert es inimitable, y solo ha podido surgir de un pa¨ªs como Francia¡±.

Sobre una posible vuelta del realizador a la industria hollywoodiense, fue contundente: ¡°Si hubiera un buen guion volver¨ªa a Estados Unidos, pero no he le¨ªdo muchos de ellos en estos a?os. Hago las pel¨ªculas que quiero ver y no las que puedan hacer dinero. Creo que en la ciencia ficci¨®n ya est¨¢ todo contado, que es momento de volver a la realidad. Para m¨ª Hollywood ha perdido contacto con la gente normal¡±.

La violencia de Farhadi

La segunda pel¨ªcula a concurso del d¨ªa, Forushande (que lleva el t¨ªtulo internacional de Le client), ha devuelto a su director, Asghar Farhadi, a su Ir¨¢n natal, despu¨¦s de rodar en Francia El pasado. El cineasta logr¨® la fama con su cuarta pel¨ªcula, A prop¨®sito de Elly (2009), Oso de Plata a la mejor direcci¨®n en la Berlinale. Luego estall¨® Nader y Sirim, una separaci¨®n: Oso de Oro en Berl¨ªn, premios a todos sus actores masculinos y femeninos, y el Oscar en 2011. En Forushande asistimos a la degradaci¨®n de un matrimonio, formado por un profesor de instituto y su esposa, llena de energ¨ªa. Ambos son actores, protagonistas por la noche de una versi¨®n de Muerte de un viajante, de Arthur Miller. Tras abandonar el edificio en el que viven por peligro de derrumbe, la pareja se muda a un apartamento en el que a¨²n est¨¢n las cosas de su anterior arrendataria, una mujer de vida disoluta. Una tarde mientras la mujer se ducha, alguien entra en el piso: lo que pasa en el ba?o nunca lo sabe el espectador ¨Cel mismo Farhadi ha ironizado en la rueda prensa que ¨¦l tampoco lo sab¨ªa, ¡°yo no estaba all¨ª¡±-, pero impulsa al marido, un intelectual de mesurado comportamiento, a entrar en una espiral de violencia y venganza.

Farhadi asegura que seguir¨¢ viviendo y rodando en Ir¨¢n, ¡°independientemente de las dificultades¡±, pero ya est¨¢ localizando en Espa?a para rodar su pr¨®ximo filme: ¡°La har¨¦ con actores estadounidenses y espa?oles, coproducida por El Deseo, de los hermanos Almod¨®var. Tras Una separaci¨®n me fue m¨¢s sencillo rodar en mi pa¨ªs, donde los cineastas vivimos una situaci¨®n compleja. Crec¨ª con esas dificultades con director, y los problemas se convierten en una fuente de energ¨ªa para los directores iran¨ªes¡±.

Que la representaci¨®n de Muerte de un viajante est¨¦ entrelazada con la trama no es anecd¨®tico: ¡°Estudi¨¦ Teatro y gradualmente me pas¨¦ al cine, empezando con el guion. Me gusta la experiencia de estar delante de los espectadores, y disfruta de la tradici¨®n teatral de mi pa¨ªs. El final de la pel¨ªcula remarca los paralelismos de la obra de Miller con el Ir¨¢n actual, con historias dentro de la historia. Aquel Nueva York de la obra se corresponde con la r¨¢pida expansi¨®n en la actualidad de las ciudades iran¨ªes, con los problemas de la gente por adaptarse con los tiempos modernos. Como Miller, he reflexionado sobre c¨®mo gente de mentes m¨¢s abiertas puede reaccionar de forma muy conservadora en algunos momentos¡±. Eso s¨ª, Farhadi no quiso entrar en ulteriores lecturas: ¡°Cuando hago una pel¨ªcula no pienso en teor¨ªas complejas. La gente se imagina a escritores con mente de ingeniero. Yo no soy as¨ª. En m¨ª todo se crea en un proceso m¨¢s subconsciente. Soy un mal jugador de ajedrez porque no me dedico a la estrategia. Es como conducir, que lo haces de forma autom¨¢tica, sin pensarlo. As¨ª escribo yo¡±.

El cineasta s¨ª aport¨® dos apuntes interesantes sobre el cuerpo y la violencia, las dos claves de su drama. ¡°En Ir¨¢n el cuerpo es algo muy privado, y eso lo ves en la secuencia del ni?o peque?o, que no quiere que le ayuden a desnudarse. Y esa creencia a¨²n est¨¢ muy arraigada. Yo no la comento, ni la interpreto, sino que la retrato. Lo que s¨ª muestro es como ese respeto puede llevar a la violencia. A m¨ª me interesaba reflexionar sobre la violencia, no la que estalla de repente, la irracional, que puedo entenderla, sino la premeditada, que puede llevar a la tortura. El p¨²blico puede ver su influencia en el proceso de degradaci¨®n del protagonista¡±.