Pesquisas cariocas
Javier Montes presenta una hueca indagaci¨®n sobre el destierro en R¨ªo de Janeiro en su versi¨®n de tarjeta postal
A cuenta de la muy celebrada transversalidad, ha ido creciendo el n¨²mero de libros que, amparados en f¨®rmulas de la ficci¨®n narrativa, combinan otras modalidades de la prosa como el ensayo, la cr¨®nica, el reportaje, la apuntaci¨®n diar¨ªstica, el recuerdo autobiogr¨¢fico, etc¨¦tera. Hay algunos muy serios; otros, sin embargo, m¨¢s bien parecen confiarse en exceso a una ocurrencia o una idea simp¨¢tica. Algunos incluso pretenden provocar un efecto epatante.
Varados en R¨ªo, de Javier Montes, se presenta como una indagaci¨®n sobre el destierro en el para¨ªso. El para¨ªso es R¨ªo de Janeiro en su versi¨®n de tarjeta postal: ¡°La cidade maravilhosa donde reinan la belleza, el sol y la voluptuosidad de los cuerpos, la alegr¨ªa de un Carnaval perpetuo¡±. Los desterrados son Rosa Chacel, Manuel Puig, Elizabeth Bishop y Stefan Zweig, con un gran protagonismo de la primera y muy escaso el del ¨²ltimo.
La indagaci¨®n se desarrolla de muy distintas maneras seg¨²n los casos, pero sigue un mismo esquema. Partiendo de unos datos ¡ªobras de los autores, declaraciones en entrevistas, testimonios y confidencias de quienes los trataron, an¨¦cdotas y chismes?¡ª, se reconstruyeron las andanzas de los protagonistas cuyos pasos se persiguen. Al mismo tiempo, se aprovecha la ocasi¨®n para contarnos las propias peripecias del autor, justificadas por un llamativo fen¨®meno de mimetismo, muy pr¨¢ctico y rentable para el relato, pero casi siempre rozando el parasitismo, y con la particularidad de que al yuxtaponer las escrituras, la propia y la ajena, el contraste es clamoroso. Tal identificaci¨®n abarca acciones, conducta e incluso emociones y sentimientos. ¡°Es lo que he hecho yo¡±, ¡°es exactamente lo que siento yo¡± o ¡°lo mismo le pas¨® a X cuando estuvo por aqu¨ª¡± son expresiones reiteradas una y otra vez. Y no nos enga?emos, la presencia de un yo desaforado en un texto s¨®lo se digiere en el caso de los muy grandes. Pero aqu¨ª nos cuesta avanzar en una lectura que se apoya en la hinchaz¨®n m¨¢s que en la divagaci¨®n o digresi¨®n pertinentes, y que demasiado a menudo bordea la banalidad e incluso la cursiler¨ªa: ¡°El d¨¦bil haz de luz que Puig enciende en la oscuridad de la noche tropical para convocar fugazmente los rostros del sue?o¡±, por ejemplo. En el caso del escritor argentino, para no revelarnos de ¨¦l nada m¨¢s que lo ya sabido: su taca?er¨ªa, la omnipresencia de la madre o la curiosidad de que en R¨ªo nunca fue al cine (lo que Montes aprovecha para contarnos con cu¨¢nta frecuencia lo hizo ¨¦l). En el caso de Rosa Chacel, tanto vagabundeo le conduce a detectar algunos s¨ªntomas, que sin embargo se traducen en un diagn¨®stico errado. Desconoce o parece ignorar el autor que la escritora pas¨® m¨¢s de una d¨¦cada de su exilio en Buenos Aires, lo cual afecta al mencionado diagn¨®stico. Por otra parte, la lectura de La sinraz¨®n ¡ªaunque no est¨¦ ambientada en R¨ªo¡ª le permitir¨ªa entender la naturaleza del conflicto al que apunta. Y, sobre todo, elevar la an¨¦cdota a categor¨ªa. Podr¨ªan subrayarse otras flaquezas, ya que Montes parece desconocer textos fundamentales que afectan tanto a la visi¨®n de Chacel sobre R¨ªo como a sus relaciones con algunos escritores u otros pormenores.
No puedo pronunciarme sobre el caso de Elizabeth Bishop. Pero en cuanto a Stefan Zweig, escribir que ¡°se suicid¨® por cansancio¡± me resulta muy grave. Tambi¨¦n la apostilla ingeniosa: ¡°El suicidio de Zweig es el de quien se exilia de su exilio¡±. Sorprende adem¨¢s la total ausencia de referencias a Brasil, el libro de Zweig publicado en 1941 ¡ªy traducido de inmediato en Espa?a; hay reedici¨®n de 2006¡ª, donde Javier Montes encontrar¨ªa abundantes y sugestivos materiales para sus pesquisas.
Y es que a cuenta de sacudirse la caspa acad¨¦mica, algunos libros se confeccionan con espumas, lacas y reflejos. ?El resultado? Peinados estilosos y cardad¨ªsimos. Es decir, huecos.
Varados en R¨ªo. Javier Montes. Anagrama. Barcelona, 2016. 312 p¨¢ginas. 19,90 euros
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