Rafik Schami: ¡°Un dictador teme m¨¢s al amor que a la raz¨®n¡±
El reconocido autor sirio, que escribe en alem¨¢n, publica ¡®Sof¨ªa o el origen de todas las historias¡¯, intriga de pasiones y amistades prohibidas bajo el r¨¦gimen de El Asad
Rafik Schami (Damasco, 1946), el escritor sirio que encandil¨® a los alemanes y a medio mundo con El lado oscuro del amor, solo se acuerda de Suheil Fad¨¦l cuando Hacienda llama a su puerta. Se olvid¨® de ¨¦l antes incluso de abandonar Siria hace 45 a?os porque temi¨® que, de no hacerlo, su familia ser¨ªa perseguida. Fad¨¦l no era peligroso pero s¨ª inc¨®modo para Hafez el Asad, el padre del s¨¢trapa que hoy bombardea a civiles. Los textos sat¨ªricos que este exmilitante del Partido Comunista escrib¨ªa en revistas clandestinas sentaban al r¨¦gimen casi peor que la onda expansiva de un coche bomba.
¡ªLl¨¢meme Rafik, por favor. Solo recuerdo que me llamo Suheil Fad¨¦l cuando tengo que pagar multas o llega la hora de los impuestos¡ª bromea antes de sentarse a hablar, en una terraza de Fr¨¢ncfort, sobre Sof¨ªa o el origen de todas las historias (Salamandra), una intriga de amores prohibidos, corrupci¨®n y amistad que abre los ojos, a quien a¨²n no lo haya hecho, sobre la dictadura que oprime a la poblaci¨®n siria y que est¨¢ hoy en el centro de una de las m¨¢s terribles guerras que ha vivido Oriente Pr¨®ximo.
El damasceno que conquist¨® a Alemania
- Rafik Schami dej¨® Siria hace 45 a?os y no ha vuelto. Ha vendido m¨¢s de 350.000 copias de El lado oscuro del amor (2004) y 100.000 de Sof¨ªa o el origen de todas las historias (2015) solo en Alemania, donde se instal¨®.
- Doctor en Qu¨ªmicas, trabaj¨® en la Universidad y en una multinacional farmac¨¦utica.
- Escribe en alem¨¢n sobre Siria, donde est¨¢ considerado persona non grata, y es un apasionado de las lecturas y narraciones p¨²blicas.
- Admirador de Camilleri y Markaris, sus maestros son Cervantes, Scherezade y los autores de la Biblia.
El protagonista de la novela, reci¨¦n publicada en Espa?a, es Salman B¨¢ladi, un acaudalado hombre de negocios damasceno afincado en Roma que aprovecha una amnist¨ªa para volver a su pa¨ªs tras 40 a?os en el exilio sin sospechar que un familiar despechado va a poner en riesgo la pl¨¢cida vida que comparte con su mujer, Stella, y su hijo, Paolo. ¡°La novela tiene mucho de autobiogr¨¢fico, s¨ª¡±, conf¨ªa el escritor, ¡°pero no todo. A m¨ª tambi¨¦n me traicionaron, pero yo no le pongo los cuernos a mi mujer¡¡±.
Rafik Schami, literalmente amigo de Damasco, o Suheil Fad¨¦l, como prefieran, criado en una familia rica de la minor¨ªa aramea y educado en un reputado colegio de jesuitas con las ¨¦lites del pa¨ªs, es uno de los escritores sirios m¨¢s conocidos del mundo y uno de los m¨¢s brillantes que ha dado Alemania en las ¨²ltimas d¨¦cadas. A este pa¨ªs, el primero que le abri¨® sus puertas, lleg¨® en 1971, huyendo de la censura y de un servicio militar que le hubiese obligado a investigar en armas qu¨ªmicas, sin saber una palabra de alem¨¢n y sin tener muy claro a¨²n a cu¨¢l de sus vocaciones iba a consagrar su vida. Su porte de caballero ha dado cobijo desde siempre a dos almas, la cient¨ªfica y la de contador de historias, que descubri¨® de ni?o y cultiv¨® de palabra ¡ªy a¨²n cultiva con ¨¦xito¡ª alentado por un profesor que le perdonaba los deberes cada vez que regalaba una narraci¨®n a sus compa?eros. Un buen d¨ªa sus amigos le animaron a poner aquellas f¨¢bulas por escrito. Comenz¨® a hacerlo en ¨¢rabe, pero hoy solo emplea el alem¨¢n literario que aprendi¨®, tozudo y pertinaz, copiando libros de autores como Thomas Mann, cuando sus textos fueron rechazados en los pa¨ªses ¨¢rabes.
¡ª?Le gustar¨ªa ser Salman y volver a su pa¨ªs?
¡ªHe roto con Siria y esa ruptura est¨¢ en el origen del libro. Salman vuelve a Siria porque yo no voy a volver.
El escritor, traducido a 30 idiomas, no quiere saber nada de su pa¨ªs, donde est¨¢ considerado persona non grata y solo ha logrado introducir sus libros de forma clandestina. Al menos, hasta que caigan El Asad y los 15 servicios secretos de los que ¡°es prisionero¡± y que controlan a una poblaci¨®n asediada por el Estado Isl¨¢mico y aturdida tras ver morir en este lustro de cruenta guerra a m¨¢s de 240.000 personas y huir fuera de sus fronteras a cinco millones ¡°porque no tienen otra alternativa al hambre y las bombas¡±. ¡°La ¨²nica esperanza es que caigan. Pero no se podr¨¢ construir un Estado democr¨¢tico sin los alau¨ªes. Habr¨¢ que integrarlos y perdonar. La poblaci¨®n siria debe darse la mano¡±. La reconstrucci¨®n del pa¨ªs, en todo caso ¡ªadvierte¡ª, llevar¨¢ tiempo y necesitar¨¢ del apoyo de otros pa¨ªses de la regi¨®n, que ahora financian al ISIS, y tambi¨¦n de EE UU y de esa Europa que ¡°act¨²a en contra de sus valores¡±. ¡°Siria no solo est¨¢ destruida por fuera¡±, dice. ¡°Est¨¢ destruida por dentro. Hay hermanos enfrentados, familias separadas. Ha ocurrido como en la Guerra Civil espa?ola¡±.
Sof¨ªa... no es una novela sobre la guerra civil, es el retrato de una sociedad multirreligiosa y multicultural incapaz de romper con estructuras at¨¢vicas heredadas que Schami conoce como si all¨ª viviera porque ha construido un archivo inmenso de estudios sobre calles, costumbres y tradiciones. ¡°El primer paso que debe dar Siria, como otros pa¨ªses de la regi¨®n, es la separaci¨®n entre la religi¨®n y el Estado, pero hay muchas transformaciones pendientes. Siria necesita una reforma radical que empiece por la destrucci¨®n del sistema de clanes. Y eso no se lograr¨¢ sin un sistema sanitario que evite que sea la familia quien deba ocuparse de los enfermos, sin ayudas al desempleo u otras similares que existen en Europa¡±.
Autor multipremiado
La literatura de Schami, editor de literatura ¨¢rabe y ganador de numerosos premios, es literatura sobre Siria, s¨ª, pero tambi¨¦n sobre el triunfo del amor. El escritor vive obsesionado por las trabas que imponen pa¨ªses como el suyo a las relaciones entre personas de distintos clanes o religiones. Padre de un hijo y casado con la ilustradora Root Leeb, que da personalidad a las portadas de sus libros, tiene motivos para ello. El primero tiene que ver con sus padres. Ella, empleada dom¨¦stica de origen muy humilde; ¨¦l, panadero de familia rica, cometieron el crimen de enamorase y tuvieron que huir del pa¨ªs. El segundo gran motivo lo presenci¨® un d¨ªa en Damasco mientras beb¨ªa t¨¦ en el balc¨®n de su casa: un chico mat¨® a su hermana, musulmana, por deshonrar a su familia con un cristiano. ¡°Cuando era ni?o, eran muy frecuentes los asesinatos por amores prohibidos. Es una enfermedad que destruye al ser humano y est¨¢ destruyendo a los pa¨ªses ¨¢rabes¡±, sentencia. ¡°Siendo adolescente me preguntaba por qu¨¦ esa mujer o ese hombre se sacrificaban por ni?os, extranjeros, enfermos... Y entonces llegaron las primeras crisis sociales, personales, donde la raz¨®n no ayudaba, solo ayudaba el amor. La raz¨®n es oportunista, el amor es altruista. Por eso lo temen los dictadores m¨¢s que a la raz¨®n y lo proh¨ªben. Se puede comprar a gente razonable, pero no a quien ama¡±.
Palabra de Schami o de Suheil Fad¨¦l, como prefieran.
¡°Europa tiene que facilitar un lugar seguro a los refugiados¡±
Rafik Schami es muy cr¨ªtico con la Europa que le acogi¨® hace 45 a?os cuando decidi¨® dejar de vivir bajo la opresi¨®n de la familia El Asad y buscar una salida legal para estudiar en Alemania porque es la misma que hoy levanta muros y alambradas. ¡°S¨ª, es cierto, Europa no puede acoger a todos los refugiados, pero tiene que facilitarles un sitio seguro¡±, dice. ¡°El problema es que falta liderazgo. Los pol¨ªticos europeos parecen representantes de empresas, solo les interesan las ventas y el dinero¡±, lamenta. ¡°Mi consejo suena pat¨¦tico, pero se trata de volver a los valores europeos y defenderlos m¨¢s que los cuadriculados negocios¡±.
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