Yoko Ono da instrucciones a Buenos Aires

John Lennon trep¨® a una escalera instalada en la galer¨ªa londinense ?ndica, agarr¨® una lupa y descubri¨® un min¨²sculo "s¨ª" grabado en el techo. Corr¨ªa el a?o 1966 cuando el Beatle qued¨® deslumbrado por el mensaje optimista de Yoko Ono, la artista con la que mantuvo uno de los romances m¨¢s sonados del siglo XX. 40 a?os despu¨¦s, Ono anima a volver a subir pelda?os y repetir la experiencia en el museo Malba de Buenos Aires. Pintura de techo - Pintura S? es una de las 80 obras que invitan a participar al visitante en Dream come true, la retrospectiva de Ono que se inaugura este jueves en la capital argentina. Finalmente la viuda de Lennon no visitar¨¢ la ciudad por recomendaci¨®n m¨¦dica, pero grab¨® un videomensaje con una instrucci¨®n para los porte?os: "Divi¨¦rtanse y recuerden que estamos creando juntos".

La l¨²dica muestra, comisariada por el espa?ol Agust¨ªn P¨¦rez Rubio y el noruego Gunnar B. Kvaran, pone en el centro las instrucciones que Ono ha lanzado al mundo desde los a?os 50, casi siempre ligadas al pacifismo, el feminismo y el ecologismo. "Cada planeta tiene su propia ¨®rbita. Piensa en la gente cercana a ti como planetas. A veces est¨¢ bien s¨®lo mirarlos orbitar y brillar", puede leerse en Pieza final. "Toca a los otros", ordena la artista a quienes se adentran en un cuarto resguardado de las miradas ajenas. Un lienzo roto de grandes dimensiones invita a introducir en ¨¦l el brazo y estrechar la mano con el desconocido que est¨¦ al otro lado. Algunas acciones son m¨¢s irrealizables, como la que pide mirar el sol "hasta que se ponga cuadrado" y "escuchar el sonido de la Tierra girando".?

¡°Las instrucciones son la columna central de su creatividad, en ellas cuestiona la noci¨®n de arte y la reduce a una idea. Abandona el objeto, algo que ni siquiera hizo Marcel Duchamp, lo desacraliza y le quita su caracter ¨²nico". se?ala Kvaran. Destaca que la artista, nacida en el seno de una de las familias m¨¢s ricas de Jap¨®n, tom¨® distancia del mercado desde sus inicios, al volver imposible la comercializaci¨®n de su obra incorp¨®rea. A su juicio, el principal aporte creativo de Ono fue el aspecto participativo de sus piezas, "que llev¨® al arte a un rumbo nuevo" desde la transgresora escena neoyorquina de los a?os 60 y 70.

En esa ¨¦poca Lennon describi¨® a su mujer como "la artista desconocida m¨¢s famosa del mundo: todos saben su nombre, pero nadie conoce realmente qu¨¦ hace". La etiqueta se mantuvo intacta durante m¨¢s de cuatro d¨¦cadas, en las que pocas piezas lograron romper el peque?o c¨ªrculo de los entendidos del arte contempor¨¢neo. Una de ellas fue Cut Piece (1965), en la que se ofreci¨® al p¨²blico de un teatro japon¨¦s para que le cortara la ropa con ayuda de unas tijeras, como met¨¢fora de un ultraje. La obra fue hasta cierto punto premonitoria, ya que poco despu¨¦s ser¨ªa destripada sin piedad por una legi¨®n de fans que la se?alaron como culpable de la divisi¨®n de una de las bandas m¨¢s aplaudidas del planeta.

En Argentina a veces se asocia a Yoko Ono con Mar¨ªa Kodama, la viuda de Jorge Luis Borges, ambas japonesas identificadas con el rol de villanas y capaces de despertar odios fan¨¢ticos y amores incondicionales. En el caso de Ono, su imagen qued¨® parcialmente redimida a partir de la exculpaci¨®n de Paul McCartney en 2012, cuando asegur¨® que ella no rompi¨® el grupo sino que "ya estaba fragment¨¢ndose". Las palabras del Beatle llegaron en uno de los momentos de m¨¢ximo reconocimiento de la japonesa como artista: en 2009 se alz¨® con el Le¨®n de Oro de la Bienal de Venecia 2009 y aupada como una de las pioneras de la performance.

"Estamos todas juntas"

El v¨ªdeo de Cut Piece cobra mucha m¨¢s fuerza en el Malba por la pieza que la acompa?a, Resurgiendo, en la que cientos de mujeres latinoamericanas respondieron a la convocatoria de la japonesa para contar en primera persona la violencia machista. Colgadas una al lado de la otra, las fotograf¨ªas de los ojos de cada v¨ªctima acompa?an testimonios desgarradores de violaciones, intentos de abuso o situaciones en las que mujeres se han sentido acosadas por hombres."Quer¨ªamos que esta pieza estuviera en Argentina por la barbaridad de los feminicidios que ocurren en el pa¨ªs. Era muy importante dar ese contexto pol¨ªtico y social en defensa de los derechos humanos y de la integridad de las mujeres", destaca P¨¦rez Rubio. "Ten coraje/Ten rabia/ Estamos todas juntas", remarca Ono junto a los impactantes textos.

Abrumados por la dureza de los testimonios recibidos a trav¨¦s de internet, el comisario espa?ol detalla que en el correo de respuesta incluyeron el protocolo para actuar en casos de violencia machista. El a?o pasado, 286 mujeres fueron asesinadas por el hecho de ser mujeres en Argentina, seg¨²n los datos de la ONG Casa del Encuentro.

Junto a creaciones con mensaje pacifista, como la que llama a imaginar la paz en cualquier punto del globo terr¨¢queo, aparecen otras en las que insta al visitante a pensar a restaurar el mundo a partir de la reparaci¨®n minuciosa de objetos de porcelana rotos que se amontonan sobre varias mesas. "Es una met¨¢fora de la destrucci¨®n del mundo y posibilita su sanaci¨®n, limpieza y reparaci¨®n", se?ala Kvaran, al recordar que Ono padeci¨® en su juventud la devastaci¨®n de su pa¨ªs durante la II Guerra Mundial.

Las instrucciones de Yoko Ono no quedar¨¢n encerradas en las paredes del museo, sino que asaltar¨¢n la ciudad a trav¨¦s de vallas publicitarias, transportes p¨²blicos y medios de comunicaci¨®n bajo la misma premisa que daba en su videomensaje: "En la muestra hay arte, m¨²sica y performance. S¨®lo se necesita de su participaci¨®n".