De V¨ªctor Jara a Podemos

Para hablar de Quilapay¨²n hay que remontarse al Chile de 1973. El grupo musical formado, por aquel entonces, por j¨®venes chilenos, creaba una de sus canciones de protesta m¨¢s conocida en el mundo de habla hispana ¡ªEl pueblo unido jam¨¢s ser¨¢ vencido¡ª y era nombrado embajador cultural del pa¨ªs durante el Gobierno de Salvador Allende.

Pero el 11 de septiembre del mismo a?o, esa ¨¦poca ¡°de sue?os¡±, como la definen los integrantes de la banda, se esfum¨® con el golpe de Estado que dio paso a la dictadura de Augusto Pinochet. Ese mismo d¨ªa Allende ¡ªel s¨ªmbolo de esa etapa y su mentor¡ª se suicid¨®, seg¨²n ratific¨® la Corte Suprema chilena en 2014, y pocos d¨ªas despu¨¦s, V¨ªctor Jara, director art¨ªstico de la banda antes de convertirse en cantautor, fue torturado y asesinado en el Estadio Chile de Santiago.

Ocho de los 11 actuales integrantes de Quilapay¨²n (tres barbas, en idioma mapuche) act¨²an este jueves en Madrid, en una gira que les llevar¨¢ a otras nueve ciudades espa?olas ¡ªPalma de Mallorca, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Bilbao, C¨®rdoba, Murcia, Vigo y M¨¢laga, donde ya estuvieron el martes pasado¡ª en conmemoraci¨®n del 50 aniversario de la banda. El mi¨¦rcoles, en la presentaci¨®n del tour en Casa de Am¨¦rica, dijeron que no se encontraban en Espa?a porque creyeran que necesita m¨¢s canciones de protesta o un mayor compromiso social, sino porque los miembros de Quilapay¨²n tienen "lazos afectivos e hist¨®ricos" muy importantes con el pa¨ªs.

Las vinculaciones saltan a la vista en los ¨²ltimos tiempos. Basta escuchar c¨®mo los l¨ªderes y simpatizantes de Podemos, la nueva formaci¨®n de izquierdas de la arena pol¨ªtica espa?ola, entonan El pueblo unido jam¨¢s ser¨¢ vencido al cierre de sus actos. "La canci¨®n simboliza la esperanza y, si alg¨²n pueblo pone en ella tambi¨¦n sus esperanzas, para nosotros es algo muy importante", opina uno de los componentes, Guillermo Garc¨ªa. Su compa?ero Hugo Lagos a?ade: "La canci¨®n ha sido interpretada por las m¨¢s diversas organizaciones y en distintos idiomas. Sab¨ªamos que Podemos la utilizaba; pero bueno, ya es la vida de la canci¨®n".

El mi¨¦rcoles se mostraron tambi¨¦n contentos, despu¨¦s de que el lunes un tribunal estadounidense declarase culpable del asesinato de V¨ªctor Jara al exmilitar Pedro Pablo Barrientos. Hern¨¢n G¨®mez, otro de los integrantes, envi¨® su apoyo "para la viuda [Joan Turner Jara] y la hija [Amanda Jara] por todo el esfuerzo que est¨¢n haciendo para que se haga justicia, porque han sufrido el negacionismo". A ra¨ªz de esta sentencia la familia del artista chileno recobra la esperanza de que Barrientos, ahora en libertad, sea finalmente extraditado y juzgado en Chile. "Por supuesto que es necesario que esto se haga, para profundizar en la democracia es imprescindible poner estos asuntos sobre el tapete. Jara es un h¨¦roe nacional", subraya otro miembro del grupo, Fernando Carrasco.

Jara nos ofreci¨® una forma m¨¢s profunda de entender la m¨²sica

Jara integr¨® el teatro y la literatura en el espect¨¢culo musical. "Es una forma m¨¢s profunda de entender la m¨²sica, que seguimos desarrollando, y se la debemos a V¨ªctor", agradece Carrasco. Ahora tres de los componentes son hijos de antiguos integrantes de Quilapay¨²n: Ismael Odd¨®, Sebasti¨¢n Quezada y Ricardo Ca¨ªto Venegas. Es la siguiente generaci¨®n que siente la necesidad de recordar "el pasado, figuras como la de Allende, los emblemas de otra ¨¦poca", pero tambi¨¦n busca "un nuevo significado a aquellas canciones", explica Odd¨®.

A pesar de que durante la dictadura militar todos los integrantes de Quilapay¨²n tuvieron que exiliarse (a Francia, en su mayor¨ªa), la banda sigui¨® en pie. Cuando su hoy director, Eduardo Carrasco, volvi¨® a Chile, decidieron seguir adelante, aunque a distancia, con una relaci¨®n que era y sigue siendo m¨¢s que profesional y m¨¢s que personal. Ahora, casi todos reunidos en Espa?a, recitar¨¢n la Cantata de Santa Mar¨ªa de Iquique, "porque sac¨® a la luz la matanza de trabajadores del salitre" en la ciudad chilena, apunta Odd¨®, fiel a las canciones "contingentes".