El rey y el conquistador
Un a?o m¨¢s, el gran ausente ha sido Diego Ventura, incomprensiblemente olvidado por la Casa de Misericordia
El rey es Pablo Hermoso de Mendoza por aclamaci¨®n popular de familiares, amigos y paisanos, que lo reciben el loor de multitud y disfrutan con cualquier lance del maestro. Pablo torea en el patio de su casa y se le nota. Se le ve sereno y feliz entre los suyos. Y estos lo premian con generosidad. Por ejemplo, de las cuatro orejas que le concedieron sobraron dos, una de cada toro, pero a ver qui¨¦n es el listo que lo pone en entredicho.
Hermoso es un consagrado torero a caballo y volvi¨® a demostrarlo, al principio, ante un manso y descastado primero, y, despu¨¦s, ante el noble y brioso cuarto, que no hizo m¨¦ritos para el premio de la vuelta al ruedo
Lo cierto es que el rejoneador navarro destac¨® en la primera parte de la lidia ante el toro que abri¨® plaza; especialmente, a lomos de Berl¨ªn, con el que templ¨® a dos bandas y maravill¨® a su gente. Antes, con la colaboraci¨®n de Napole¨®n, recort¨® la embestida en un palmo de terreno. El toro se acab¨® y todo se diluy¨®, pero no el ¨¢nimo del p¨²blico que pidi¨® con inter¨¦s el doble trofeo despu¨¦s de un rej¨®n mal colocado.
EL CAPEA / HERMOSO, HERN?NDEZ, ARMEND?RIZ
Toros despuntados para rejoneo de El Capea, bien presentados, mansos, blandos y descastados, a excepci¨®n del cuarto, que recibi¨® los honores de la vuelta al ruedo.
Hermoso de Mendoza: rej¨®n trasero y bajo (dos orejas); rej¨®n en lo alto (dos orejas).
Leonardo Hern¨¢ndez: rej¨®n bajo (dos orejas); pinchazo (silencio).
Roberto Armend¨¢riz: dos pinchazos, bajonazo y cuatro descabellos (silencio); dos pinchazos y rej¨®n trasero y tres descabellos (ovaci¨®n).
Hermoso de Mendoza y Hern¨¢ndez salieron a hombros.
Plaza de toros de Pamplona, 6 de julio. Segundo festejo de la Feria de San Ferm¨ªn. Lleno.
La lidia del cuarto coincidi¨® con el bocadillo, ritual sagrado en esta plaza, y la labor del caballero navarro qued¨® m¨¢s diluida, a pesar de que, t¨¦cnicamente, fue mejor que la anterior. Destac¨® con Disparate, que se luci¨® con las ya famosas hermosinas, y las piruetas de Donatelli encantaron al personal. Una par de banderillas cortas a dos manos fue la mejor r¨²brica. Mat¨® bien y volvi¨® a pasear las dos orejas, en este caso con m¨¢s motivo y menos jolgorio de los tendidos.
El conquistador fue Leonardo Hern¨¢ndez, que debut¨® en esta plaza, y se gan¨® su favor a base de pundonor, buena t¨¦cnica y una desbordante ilusi¨®n. Se ha convertido el joven rejoneador en un torero de verdadera categor¨ªa, y lo demostr¨® ante un primer toro manso y muy parado ante el que se jug¨® el tipo para emocionar a los tendidos. Lo consigui¨® montando a Sol, un caballo albino, valent¨ªsimo, que se dej¨® llegar los pitones a la piel y templ¨® con aut¨¦ntica maestr¨ªa. Tampoco mereci¨® las dos orejas que pase¨® por la mala colocaci¨®n del rej¨®n de muerte. Lo intent¨® sin ¨¦xito ante el quinto, que se vino abajo muy pronto; tanto es as¨ª que se ech¨® antes de la suerte final y desluci¨® la faena. Antes se hab¨ªa lucido en unas banderillas al quiebro, pero no fue motivo suficiente para repetir el ¨¦xito.
Otro navarro querido, Roberto Armend¨¢riz, cerraba el cartel; pero no solo de cari?o se puede vivir. Se le debe reconocer su esfuerzo y pasi¨®n, pero torea muy poco y eso se nota mucho. Templ¨® bien ante su primero y mejor¨® sensiblemente ante el sexto, pero fall¨® con el rej¨®n de muerte.
Por cierto, se ech¨® en falta un a?o m¨¢s a Diego Ventura, ausente de esta feria por decisi¨®n incomprensible de la Casa de Misericordia. El asunto merecer¨ªa una explicaci¨®n que nunca llega.
La corrida de hoy
Toros de Fuente Ymbro, para Miguel Abell¨¢n, Paco Ure?a y Roca Rey.
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