¡®Saxa loquuntur¡¯... o las piedras hablan

Las piedras hablan. O saxa loquuntur. Entre tesoros arqueol¨®gicos, en un extremo del espacio dedicado a la Hispania Romana en el Museo Arqueol¨®gico Nacional, Antonio G. Amador dispara esta frase, en lat¨ªn, en un lugar en el que cobra todo su sentido. Mientras, observa en un segundo plano a un grupo de una treintena de personas que oyen ensimismados la historia que esconden los milenarios tesoros. Todos, el que habla y los que escuchan, se comunican en lat¨ªn, incluso se llaman entre s¨ª por sus nombres traducidos a la lengua madre. Amador es el director de la Asociaci¨®n Cultural culturaclasica.com y coordinador del Curso de Verano de Lat¨ªn Vivo, Caelum, que organizan desde hace cuatro a?os en Madrid. Entre las actividades que m¨¢s entusiasman a los alumnos, cuenta, resaltan las visitas guiadas en esa lengua por el museo, que se celebran este fin de semana.

La mayor¨ªa de los que participan ¨Cunas 120 personas¨C son alumnos y profesores de Filolog¨ªa Cl¨¢sica, pero tambi¨¦n se une gente de otras ramas a los que simplemente les interesa el estudio del lat¨ªn como lengua, apunta Amador. ¡°Hasta ahora se ense?aba por el m¨¦todo tradicional, destripando textos pero nunca disfrutando de ellos, y lejos de comprender lo que nos transmit¨ªan los escritores antiguos. Todos nuestros esfuerzos van encaminados a que los alumnos puedan llegar a leer y a disfrutar de la literatura cl¨¢sica¡±, subraya.

Un buen n¨²mero de los alumnos repiten a?o tras a?o. Como Ludovica (o Luisa Blecua), profesora y gu¨ªa de la visita, que resalta que le supone una buena forma de ¡°aprender herramientas para poder explicar la lengua por el m¨¦todo vivo¡±. Ante el ¨¦xito de convocatoria, han decidido ampliar el recorrido por el museo, y adem¨¢s de adentrarse por el pasado de Grecia y Roma, se pasea tambi¨¦n por la exposici¨®n de Lusitania. Aparte de la lengua, para Blecua la visita es especial porque ¡°hay mucha interacci¨®n con el p¨²blico¡±, y eso, seg¨²n su opini¨®n, es fundamental en el aprendizaje de cualquier lengua.

Kevin Prell, o Eugenius en la jerga de sus compa?eros, es estudiante universitario. ¡°Vimos que el lat¨ªn hablado era una buena forma de acercarse a la lengua, por una parte. Por otra, ayuda a aprender un vocabulario que es m¨¢s complejo de adquirir solo de forma te¨®rica. Roberto Carfgani, Robertus, completa su argumento. ¡°No hay que olvidar que el lat¨ªn es un patrimonio cultural. M¨¢s incluso que cualquier edificio¡±.