El tercer exilio de Jos¨¦ Balmes, un pintor comprometido

Un fallo multisist¨¦mico derivado de una obstrucci¨®n intestinal ha sido la causa del fallecimiento el pasado 28 de agosto de Jos¨¦ Balmes (Montesquiu, Barcelona, 20 de enero de 1927 ¨C Santiago de Chile, 28 de agosto del 2016), uno de los artistas m¨¢s representativos del informalismo.

Era un ni?o de doce a?os, integrado en una familia de ideales republicanos, que se entreten¨ªa dibujando a los pasajeros del Winnipeg, el barco que trajo de Espa?a a m¨¢s de dos mil refugiados de la Guerra Civil, cuando lleg¨® a Chile en 1939. Durante su primer exilio estudi¨® en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile y obtuvo la nacionalidad chilena. Regres¨® a Europa a mediados de los a?os 50, viaje que marc¨® su carrera como artista, especialmente al entrar en contacto con el arte informalista franc¨¦s. De nuevo en Chile, destac¨® por un estilo pict¨®rico caracter¨ªstico, con obras de gran formato, en las que inclu¨ªa objetos, como peri¨®dicos o elementos que representaban luchas sociales y pol¨ªticas, con un dibujo preciso, de pincelada espont¨¢nea, y en ocasiones, aplicaci¨®n de materia con manos, spray y telas. Form¨® el Grupo Signo junto con su inseparable esposa Gracia Barrios (1927), Enrique Mart¨ªnez Bonatti (1930) y Alberto P¨¦rez (1926-1999).

Su compromiso pol¨ªtico le llev¨® a militar en el Partido Comunista y a realizar multitud de acciones a favor del gobierno de la Unidad Popular de Salvador Allende. La irrupci¨®n violenta de la dictadura de Augusto Pinochet, le oblig¨® a repetir la experiencia del exilio. Abandon¨® su cargo como decano de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile y se instal¨® en Francia, donde continu¨® desarrollando su carrera como artista, a?adiendo a tem¨¢ticas contingentes ya trabajadas, como la intervenci¨®n americana en Santo Domingo, la Guerra de Vietnam o el exilio, preocupaciones ligadas a las consecuencias del r¨¦gimen militar chileno, como los desaparecidos.

En la d¨¦cada de los ochenta vuelve definitivamente a Chile compaginando la creaci¨®n con la presidencia de la Asociaci¨®n de Pintores y Escultores de Chile, o la direcci¨®n del Museo de la Solidaridad Salvador Allende (MSSA), y recibiendo galardones como el Premio Nacional de Artes. Desde entonces, la familia Balmes-Barrios (que incluye a su hija, tambi¨¦n artista, Concepci¨®n Balmes), se ha erigido como un s¨ªmbolo de la resistencia desde el arte, del papel del artista en el colectivo y de la pintura como campo de batalla. Su compromiso con el arte, que sigui¨® ejerciendo hasta a?os recientes, y con la sociedad, le labraron el respeto y admiraci¨®n de sus contempor¨¢neos, m¨¢s all¨¢ de consignas pol¨ªticas. La enfermedad impide que pueda estar presente en la retrospectiva sobre su obra que tendr¨¢ lugar el a?o que viene en el Museo Nacional de Bellas Artes de Chile.

En una entrevista tard¨ªa le preguntaron acerca de su concepci¨®n sobre el m¨¢s all¨¢: ¡°El m¨¢s all¨¢ me latea. Amo mucho el m¨¢s ac¨¢. En el m¨¢s all¨¢, si es como lo pintan, como entre nubes, me aburrir¨ªa¡±. Jos¨¦ Balmes encara su tercer exilio legando una vida de activismo pol¨ªtico, de compromiso con su tiempo y de pintura volcada hacia una causa.