Hallados en Holanda 34 dibujos del viaje a Brasil en 1637 de Frans Post
El Rijksmuseum prepara una muestra del pintor barroco, uno de los primeros artistas europeos que reprodujo paisajes de Sudam¨¦rica
Frans Post (1612-1680) ocupa un lugar destacado en la larga lista de pintores barrocos holandeses gracias a la invitaci¨®n del pr¨ªncipe Johan Maurits de Nassau, gobernador de la colonia holandesa en Brasil, para que reprodujera sus paisajes, flora y fauna. Fue el viaje de su vida, ya que entre 1637 y 1644, en la zona de Pernambuco y el delta del r¨ªo San Francisco, plasm¨® im¨¢genes destinadas a fomentar la emigraci¨®n a la nueva tierra. Varios de sus lienzos fueron regalados luego a Luis XIV, y de ah¨ª que la obra de Post figure en el Louvre. Aunque a su regreso sigui¨® evocando a Brasil desde su estudio en la ciudad Haarlem, nada se sab¨ªa de sus estampas de plantas y animales ex¨®ticos. En 2010, sin embargo, aparecieron 160 dibujos de aves en una carpeta dedicada a otros artistas en el Archivo provincial de Noord-Holland (al noroeste del pa¨ªs). Tras un estudio exhaustivo, se ha llegado a la conclusi¨®n de que 34 de las ilustraciones son suyas y llevaban all¨ª metidas varios siglos. Dado que fue uno de los primeros pintores europeos en reproducir paisajes de Sudam¨¦rica, el hallazgo se considera excepcional.
De La Haya a Pernambuco
Johan Maurits de Nassau era un hombre previsor. Mientras gobernaba Nueva Holanda, la colonia en Brasil (1636-1644), en La Haya constru¨ªan su nueva casa. Conocida popularmente como Mauritshuis, a?os despu¨¦s de su muerte fue adquirida por el Gobierno para convertirla en una galer¨ªa de arte. En Sudam¨¦rica, las cosas fueron mucho m¨¢s abruptas. La victoria sobre los portugueses en el noreste brasile?o, donde los holandeses se asentaron a partir de 1630, se transform¨® en 1649 en derrota en la Segunda Batalla Guararapes. Holanda capitul¨® en enero de 1654 de forma provisional, para ceder formalmente las posesiones a Portugal en 1661. A Johan de Witt, el nuevo l¨ªder pol¨ªtico de la rep¨²blica holandesa, le interesaba m¨¢s el comercio que las tierras, y a cambio de una indemnizaci¨®n de 2 millones de florines de la ¨¦poca, el Tratado de La Haya reconoci¨® ¡°la soberan¨ªa imperial¡± portuguesa sobre Nueva Holanda.
El pr¨ªncipe Johan Maurits, al que est¨¢ dedicada la Galer¨ªa Mauritshuis, en La Haya, reclut¨® artistas y cient¨ªficos durante su aventura brasile?a para que documentaran la geograf¨ªa e historia natural del lugar. Hacia 1630, los holandeses hab¨ªan arrebatado el control de una gran parte del noreste de Brasil a los portugueses, y la poderosa Compa?¨ªa de las Indias Occidentales ten¨ªa su cuartel general en Recife, en lo que hoy es el estado de Pernambuco. All¨ª arrib¨® Post en 1637, con 24 a?os de edad, y dispuesto a servir de cronista gr¨¢fico del gobernador. A la vista de sus dibujos, su actividad debi¨® ser fren¨¦tica. Detallista como sus colegas del Siglo de Oro, la finura con que plasma animales desconocidos para los europeos preparaba para un posible traslado a las Am¨¦ricas. Entre las l¨¢minas recuperadas hay un esbozo a carboncillo y un dibujo al guache y acuarela de un capibara. Familia de las chinchillas, y entonces desconocido en Europa, el aspecto simp¨¢tico del roedor le ha hecho muy popular con el tiempo. Post le dedica sendos estudios preliminares completos para una pintura hoy colgada en Par¨ªs.
La atribuci¨®n de los dibujos ha sido lenta porque ni Alexander de Bruin, conservador del archivo de Haarlem que los encontr¨® durante la digitalizaci¨®n de los fondos, ni los expertos del Rijksmuseum (?msterdam) que los han estudiado quer¨ªan equivocarse. ¡°La carpeta original conten¨ªa trabajos de los artistas Pieter Holsteijn el Joven y el Viejo, y fue regalada al archivo en 1888¡±, se?alan sus responsables. ¡°Como los de Frans Post no est¨¢n firmados, era preciso compararlos con sus pinturas posteriores¡±, a?aden en el museo de la capital. Post era conocido por sus paisajes, y los animales que aparecen all¨ª han sido analizados a fondo para poder adjudicarle las 34 l¨¢minas. ¡°Son el eslab¨®n perdido entre su aventura brasile?a y su obra en Haarlem¡±, asegura De Bruin, en un comentario colgado en la web del archivo para presentar ¡°un descubrimiento espectacular¡±.
Entre los 24 guaches y acuarelas y 10 carboncillos, destacan cocodrilos, jaguares, armadillos, zarig¨¹eyas, pecar¨ªes (jabal¨ª americano) y el puercoesp¨ªn brasile?o. El pintor a?ad¨ªa comentarios, y dec¨ªa a veces cosas como la siguiente: ¡°muy amigable y simp¨¢tico (de un macaco)¡±; ¡°cruel y destructor (del jaguar)¡±; ¡°huele como una gallina (del armadillo)¡±. Un calamar, un oso hormiguero o una serpiente completan la serie. En la expedici¨®n de la que Post form¨® parte, las piezas capturadas fueron disecadas. El museo Naturalis, de Leiden, las tiene en su cat¨¢logo y viajar¨¢n en octubre al Rijksmuseum para la muestra Frans Post, animales en Brasil. Acompa?ar¨¢n a sus dibujos y seis lienzos prestados por el Louvre, la Fundaci¨®n Estudar, de Sao Paulo y el museo Boymans van Beuningen, de Rotterdam, en el templo de Rembrandt y Vermeer, contempor¨¢neos de Post.
Babelia
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