Una vida llena de enigmas

Elvira Navarro public¨® hace dos a?os una luminosa novela en torno a la cual siempre me ha hago la misma pregunta: ?se puede vivir como si lo hicieras al margen del mundo, de sus reglas m¨¢s sofocantes? Y ?se puede ser feliz en una vida as¨ª? La novela se titula La trabajadora. All¨ª se relata la historia de dos mujeres que deben apechugar con sus respectivas fisuras mentales. Descoordinaciones que las sit¨²an en el filo de la marginaci¨®n, pero que nunca llegan a neutralizar sus almas y sus inteligencias. Digo esto porque ahora Navarro publica otra novela, no menos luminosa, titulada Los ¨²ltimos d¨ªas de Adelaida Garc¨ªa Morales.

El t¨ªtulo de la novela puede hacer pensar que estamos ante una cr¨®nica sobre la autora de El Sur. No estamos ante una cr¨®nica, pero s¨ª ante una vida llena de enigmas, ante esa vida y las personas que fueron testigos involuntarios de sus ¨²ltimos d¨ªas. Esta materia es obvia. Pero adem¨¢s la novela de Elvira Navarro funciona como un acta notarial de lo que nunca debi¨® suceder y sucedi¨®. Aqu¨ª ya estamos en el terreno pantanoso de las responsabilidades institucionales, adem¨¢s de profesionales, que se reunieron para hacer m¨¢s penosos los ¨²ltimos d¨ªas de esa mujer que en una ¨¦poca escribi¨® libros dolorosamente bellos y decidi¨® apartarse, en clamoroso silencio, del mundanal ruido de las letras.

Un d¨ªa, Navarro recibe un e-mail de una amiga suya, la tambi¨¦n novelista Rosario Izquierdo, coment¨¢ndole una situaci¨®n en la que estaba involucrada Adelaida Garc¨ªa Morales. Le explica Izquierdo, que hac¨ªa un trabajo para la Delegaci¨®n de Igualdad de la Comunidad Andaluza por ese tiempo, que le hab¨ªan contado que la escritora extreme?a se hab¨ªa presentado en dicha delegaci¨®n pidiendo prestados 50 euros para poder ir a visitar a su hijo a Madrid. Evidentemente, nadie conoc¨ªa ni sab¨ªa qui¨¦n era la escritora. Y tambi¨¦n, dado el anonimato de la escritora, nadie sac¨® de su billetero esos 50 euros y se los dio para que pudiera ir a ver a su hijo. Lo cierto es que Garc¨ªa Morales, que atravesaba un grave episodio depresivo, adem¨¢s de vivir de una pensi¨®n m¨ªnima que apenas le alcanzaba para sobrevivir, a los pocos d¨ªas muri¨® de un fallo cardiaco.

Pudo Elvira Navarro hacer con este material una cr¨®nica pormenorizada de esos desolados d¨ªas de Garc¨ªa Morales. Sin embargo, nuestra autora prefiere trabar dos escenarios. El de una realizadora de cine que decide hacer un documental sobre Garc¨ªa Morales contando con testigos cercanos y un m¨¦dico psiquiatra. Y el de la concejala que atendi¨® a la escritora y nunca atin¨® a resolver ese expediente humano con la urgencia y la eficacia que las circunstancias, tambi¨¦n muy humanas, exig¨ªan. Y aqu¨ª es donde entonces comienza el relato de Elvira Navarro. Las voces que llenan esta historia, procurando todas tener una idea casi documental de Adelaida Garc¨ªa Morales, sinti¨¦ndose casi autorizadas esas voces a arriesgar teor¨ªas sobre sus silencios, sobre su voluntario retiro del mundo y casi de la vida. Sinti¨¦ndose llamadas, como sucede con la concejala de turno, incluso a elaborar juicios literarios sobre la obra de la extreme?a (tras los cuales se encuentran los de la misma Elvira Navarro, si mucho no me equivoco).

Hice menci¨®n m¨¢s arriba a lo notarial. La lengua literaria que emplea Navarro, austera y afilada, es la ¨²nica posible para que lo que leemos tenga credibilidad narrativa. Ya que la credibilidad institucional, y parece que tambi¨¦n la individual, no est¨¢ en sus mejores momentos, nos queda la de las palabras exactas. Si no pones luz sobre algunos hechos oscuros, para qu¨¦ escribir.?

Los ¨²ltimos d¨ªas de Adelaida Garc¨ªa Morales. Elvira Navarro. Literatura Random House. Barcelona, 2016. 128 p¨¢ginas. 20 euros