Cine y cazuelas: el ¡®Viaje a Espa?a¡¯ de Michael Winterbottom

En el asador Txoko de Getaria (Gipuzkoa) se zamparon un plato de anchoas reci¨¦n tra¨ªdas, pulpo a la parrilla y un lenguado que calificaron de ¡°glorioso¡±, mientras hablaban de Don Quijote y Sancho Panza. En alg¨²n lugar de Santander que ahora no recuerdan, alguien les dio a probar un pan de pueblo con mantequilla con cuyo recuerdo a¨²n se relamen. En el Etxebarri de Axpe (Bizkaia) viajaron al misterioso mundo de la parrilla, y el lunes pasado, en M¨¢laga, en una tasca fant¨¢stica a la sombra de playa de La Malagueta, casi se desmayan con la ensaladilla rusa y el jam¨®n. Steve Coogan y Rob Brydon, brit¨¢nicos, c¨®micos-estrella de profesi¨®n y viajeros por tercera vez en pos de los placeres de la manduca y de la charla sobre lo divino y lo humano (m¨¢s sobre lo humano), protagonizan Viaje a Espa?a, una road movie podr¨ªamos decir que gastron¨®mico-filos¨®fica cuyo rodaje finaliza estos d¨ªas en M¨¢laga a las ¨®rdenes del director brit¨¢nico Michael Winterbottom.

Es el tercer moj¨®n de una trilog¨ªa que arranc¨® en 2010, en forma de teleserie para la BBC luego reconvertida en largometraje (The trip, El viaje), prosigui¨® en 2014 con The trip to Italy (Viaje a Italia, estreno ma?ana, viernes, en Espa?a) y se cerrar¨¢ ¡ªsalvo que queden m¨¢s ganas de rodar y comer¡ª con The trip to Spain (Viaje a Espa?a).

Aquel periplo hedonista por la campi?a inglesa, este viaggio por los templos gastron¨®micos de la Toscana, la costa amalfitana o Roma y la nueva excursi¨®n por las cazuelas de la vieja Iberia conforman, junto con la muy celebrada 24 Hour Party People ¡ªviaje enloquecido al universo musical del Manchester de los 70 y la Factory Records¡ª, una met¨¢fora de lo que bien pudiera definirse como la parte m¨¢s luminosa de la filmograf¨ªa de Michael Winterbottom (Blackburn, 1961). Un cineasta, uno de los m¨¢s destacados de su generaci¨®n en Europa, que en ocasiones ha utilizado la materia siempre fiable de la cruda realidad para firmar pel¨ªculas ¨¢speras, comprometidas y premiadas en los festivales, como Camino a Guant¨¢namo, Bienvenidos a Sarajevo o In this world.

?Dos caras de una misma moneda, dos mundos paralelos? No est¨¢ tan claro: ¡°A veces te tienes que mover m¨¢s en lo alegre y en lo divertido, y otras m¨¢s en la oscuridad.Y luego hay fronteras difusas entre ambas. Por ejemplo, me gusta trabajar con Steve Coogan y Rob Brydon porque hablan mucho de cosas serias, de la vida, pero lo hacen de una forma divertida, eso es todo¡±, explica Winterbottom, auriculares al cuello, mientras se come de pie un plato de paella en la calle, delante del restaurante Refectorium de M¨¢laga, donde rueda.

Santander, Getaria, Axpe, Sos del Rey Cat¨®lico, M¨¢laga¡­ son las etapas de este Viaje a Espa?a de Winterbottom en el que la pareja Coogan & Brydon a?ade al perolo amplias dosis de devaneos mentales, incluidas a partes iguales la reflexi¨®n filos¨®fica sobre lo que son (lo que somos) y lo que fueron (lo que fuimos) y la improvisaci¨®n humor¨ªstica. Un poco como en ese descacharrante y a la vez melanc¨®lico Viaje a Italia que llegar¨¢ este viernes a las pantallas, donde los dos c¨®micos brit¨¢nicos se sientan a la mesa y lo mismo alaban unos raviolis con pescado de roca que imitan la voz de Pacino o De Niro o los ademanes de Brando en El Padrino, recitan a Lord Byron o se r¨ªen de todo, y de todo es de todo: hasta de las piernas de Stephen Hawking.

¡°La forma de trabajar en las tres pel¨ªculas no difiere mucho, las tres son road movies en torno al tema de la comida, pero evidentemente el contenido, s¨ª. En la pel¨ªcula italiana, Steven y Rob hablan sin parar de comida y de los viajes a Italia de Lord Byron y Mary Shelley, ?lo que para un ingl¨¦s amante de la literatura es sagrado!, y en Espa?a, pues ya les ves, hablan sin parar de comida¡­ y de Don Quijote y Sancho Panza, lo que para un espa?ol¡­ ya sabe¡±, comenta el director de la pel¨ªcula.

El modus operandi de Winterbottom y su equipo para esta trilog¨ªa reviste un car¨¢cter h¨ªbrido: armaz¨®n + improvisaci¨®n. Puro jazz. ¡°L¨®gicamente ten¨ªamos un guion escrito y, por lo tanto, una l¨ªnea que seguir; antes de ir al rodaje hablamos los tres de temas que puede ser divertido tocar y todo eso, pero como lo que m¨¢s me interesa es que los di¨¢logos sean lo m¨¢s frescos y ¨¢giles posibles¡­ pues hemos improvisado bastante, s¨ª¡­ As¨ª que yo dir¨ªa que la pel¨ªcula, como les ocurri¨® a la de Italia y a la Inglaterra, s¨ª, tienen una estructura muy parecida a la del jazz¡±.

Ahora hay que escuchar al d¨²o de actores-bufones. Viejos amigos entre s¨ª y del director, se acaban de comer un plato de ib¨¦rico y hablan as¨ª de la pel¨ªcula: ¡°Michael te dir¨¢ lo que quiera sobre que hay un guion y todo eso, pero te aseguro que el 80% de lo que rodamos en esta trilog¨ªa es improvisado", explica muy serio Steve Coogan. Y Rob Brydon: ¡°S¨ª, hay un esqueleto armado por el director, que nos dice ad¨®nde quiere dirigirse, y luego estamos nosotros, que solemos saltarnos esa gu¨ªa cuando queremos. Pero es muy placentero como forma de trabajo. Nosotros tenemos que seguir la trama, claro, pero tambi¨¦n tenemos que crear cosas, ?y las creamos improvisando, ja, ja, ja!¡±.