La belleza del contorno
La belleza viene de Jap¨®n. ?Les parece inesperado el dise?o del nuevo Bernab¨¦u? La obra -encargada al equipo de GMP, L35 y Ribas&Ribas- posee una morfolog¨ªa id¨¦ntica al nuevo tarro de crema Viso Lifting Din¨¢mico de Shiseido que viene de Jap¨®n.
Los economistas y los soci¨®logos analizan el entorno, pero aquello que primero anuncia un giro cultural es el contorno. Zaha Hadid fue una precursora de esos cambios, como Gehry antes e Ingels ahora. Estos arquitectos modelan el objeto inici¨¢tico antes que se constituya su alrededor. Siembran un nuevo ambiente mediante una in¨¦dita simiente est¨¦tica.
El departamento de dise?o de Daimler (Gorden Wagener y su equipo) ha contribuido decisivamente a transformar en apenas unos a?os el aspecto de la marca. La mayor evocaci¨®n a lo org¨¢nico, la musculatura, el sexo, la boca o calandra, los ojos o grupos ¨®pticos ha plasmado su actual lema: ¡°claridad sensual¡±. La racionalidad heredada de Benz y la emoci¨®n de los primeros b¨®lidos de Whilheim Daimler. El lujo en el interior de los autom¨®viles imit¨® hace tiempo el alto aprecio japon¨¦s por el monocromatismo. El volante, la tapicer¨ªa, el salpicadero, los revestimientos del mismo color y la cabina ofreciendo un confort sin abigarramientos.
La belleza, parte de ella, viene de Jap¨®n y hace tiempo que Yohji Yamamoto influy¨® sobre la moda textil de Occidente. Incluso esta temporada gabanes de Calvin Klein, Gucci o Loewe muestran ese calculado descuido que proporciona holgura y comodidad.
Pero, ?qu¨¦ otra cosa holgada no es, en otro aspecto, la concesi¨®n del premio Nobel a Bob Dylan anteponiendo su vibrante contorno a la rigidez del novelista proverbial? ?O qu¨¦ decir de casi todo el sistema democr¨¢tico que ha terminado con la severa simetr¨ªa del bipartidismo para generar un caos o locus informal?
Quienes hayan visitado este octubre o los de a?os anteriores, la Frieze Art de Londres, nada de esto les sorprender¨¢ mucho. La belleza viene de la Luna y de Jap¨®n pero no ya del Jap¨®n tradicional sino de un territorio asaltado por se¨ªsmos est¨¦ticos como muestran en Tokio los importantes comercios que pueblan el barrio de Omotesando. Una experiencia crucial para detectar diferentes sacudidas. Pero tambi¨¦n, aqu¨ª y all¨¢, a nivel dom¨¦stico, las revistas de decoraci¨®n promueven estas semanas una iluminaci¨®n en contrapicado que alteran tanto el contorno de muebles y objetos como promueven otras formas de hospitalidad o luminaria sensual. ¡°Claridad sensual¡± que dice hoy Mercedes.
Sin emoci¨®n, sin afecto, sin mercedes el mundo pierde inter¨¦s. Se hallar¨¢, por momentos, menos ordenado geom¨¦tricamente, geopol¨ªticamente y geosocialmente. V¨ªctima adem¨¢s de irregularidades tanto morales como est¨¦ticas pero que, reactivamente, incrementan la energ¨ªa para perseguir la dignidad, la calidad de la justicia y la universal belleza de la paz.
Babelia
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