Victorino Mart¨ªn gana el Premio Nacional de Tauromaquia
El Ministerio de Cultura ha reconocido al ganadero por ¡°la excepcional temporada desarrollada por su ganader¨ªa este a?o, consiguiendo tres indultos en sendas plazas"
Victorino Mart¨ªn Andr¨¦s (Galapagar, 1929) acaba de ganar el Premio Nacional de Tauromaquia gracias, seg¨²n el jurado del galard¨®n, a ¡°la excepcional temporada desarrollada por su ganader¨ªa en el a?o 2016, consiguiendo tres indultos en las plazas de toros de Sevilla, Calasparra e Illescas, y ha se?alado ¡°la incomparable trayectoria de dicha ganader¨ªa, cuyo nombre ha quedado asociado a valores como la emoci¨®n, la bravura o la protecci¨®n del valios¨ªsimo patrimonio ecol¨®gico que encierra la Tauromaquia¡±.
Victorino Mart¨ªn es sin¨®nimo de ganadero revolucionario, un puntal esencial de la segunda mitad del siglo XX, buscador incansable del toro aut¨¦ntico y millonario en ejemplares de toros bravos que han desparramado la pasi¨®n en los ruedos. Su trayectoria demuestra que es un ganadero intuitivo, inteligente, independiente, ¨ªntegro y sagaz, sin pelos en la lengua y defensor de la autenticidad. No procede de noble estirpe ganadera. Ha preferido siempre servir al aficionado antes que al taurinismo. Ha sido un autodidacta cargado de sentido com¨²n y con un olfato especial para acertar con las necesidades de la fiesta moderna.
Comenz¨® a trabajar siendo un ni?o, con los rescoldos a¨²n de la Guerra Civil y tras haber perdido a su padre en el triste episodio de Paracuellos. Junto a sus dos hermanos varones se especializ¨® en el montaje de festejos populares con ganado morucho, y en 1960 compr¨® un lote de la ganader¨ªa de Hermanos Escudero, procedencia Albaserrada, y lidi¨® la primera novillada el 30 de abril del a?o siguiente en Zaragoza. El 29 de junio de 1964 sali¨® a hombros por vez primera en Aranjuez, y en el 65 se anuncia con novillos en la plaza de Las Ventas.
Pronto llegar¨ªan los ¨¦xitos, la expectaci¨®n, el reconocimiento y los premios. Baratero era el nombre del primer victorino al que se le dio la vuelta al ruedo en Madrid, momentos antes de que su matador, Andr¨¦s V¨¢zquez, paseara las dos orejas. Era el verano del 1969. En el 82, el 1 de junio, se celebr¨® en Las Ventas la llamada corrida del siglo: toros de Victorino Mart¨ªn, para Ruiz Miguel, Luis Francisco Espl¨¢ y Jos¨¦ Luis Palomar. Los tres toreros y el ganadero salieron a hombros en una tarde apote¨®sica que ha pasado a los anales del toreo.
En marzo de 2014, Victorino Mart¨ªn recibi¨® la Medalla a las Bellas Artes, y acert¨® a decir que hab¨ªa alcanzado el ¨¦xito gracias al trabajo, la lucha, la afici¨®n y la suerte. Y en junio del a?o pasado, la Comunidad de Madrid coloc¨® un azulejo en la Puerta Grande de la plaza madrile?a con la siguiente leyenda: ¡°A Victorino Mart¨ªn Andr¨¦s, ganadero infatigable y ejemplar, defensor de una tauromaquia ¨ªntegra, leyenda de la caba?a brava espa?ola¡±. Retirado el padre, es Victorino hijo quien dirige la ganader¨ªa.
El jurado ha estado presidido por Jos¨¦ Canal, subsecretario de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, y han actuado como vocales Javier L¨®pez-Galiacho, en representaci¨®n del mundo de las artes y la cultura; Fernando Galindo, secretario general de la Uni¨®n de Picadores y Banderilleros Espa?oles; Beatriz Badorrey, representante del mundo acad¨¦mico; Ignacio Lloret, representante con experiencia acreditada en la explotaci¨®n p¨²blica o privada de plaza de toros de primera categor¨ªa; Mar¨ªa del Mar Mayoral, representante del mundo ganadero taurino de acreditada experiencia; Antonio Lorca, representante de acreditada experiencia del periodismo o la cr¨ªtica taurina; Williams C¨¢rdenas, en representaci¨®n de asociaciones destinadas a la proyecci¨®n y protecci¨®n cultural exterior de la tauromaquia; Demetrio P¨¦rez Carretero, director general de Interior, Emergencias y Protecci¨®n Civil, de la Consejer¨ªa de Justicia e Interior de la Junta de Andaluc¨ªa; y Jos¨¦ Luis Bote, representante de la entidad premiada en la anterior convocatoria, Escuela de Tauromaquia de Madrid Marcial Lalanda.
Babelia
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