Versos de acero y cobre

Mientras el cantautor Javier Ruibal rasguea su guitarra en una peque?a sala, afuera se oye el bramido de los camiones, las excavadoras y del gigantesco armaz¨®n que produce cobre en una f¨¢brica de Huelva. El m¨²sico gaditano (El Puerto de Santa Mar¨ªa, 1955) se prepara para charlar de sus composiciones con trabajadores de la empresa Atlantic Copper y, de manera sorpresiva, ofrecer un ¨ªntimo miniconcierto de seis temas.

Ruibal es uno de los nueve cantautores y poetas que protagonizan la iniciativa De la m¨²sica a la poes¨ªa, con la que la Fundaci¨®n Anastasio de Gracia (Agfitel) promueve la lectura en las f¨¢bricas. Tras haber distribuido gratuitamente en las ¨²ltimas semanas un centenar de ejemplares de un libro de cada uno de esos autores a los trabajadores interesados, se han programado, entre el 14 de noviembre y el 14 de diciembre, encuentros entre el escritor y los empleados para hablar de canciones, interpretarlas y responder a cuestiones.

Un premio Nacional de Poes¨ªa, Luis Alberto de Cuenca, fue el encargado de romper el hielo, en la sede de la constructora OHL en Madrid, el pasado 14 de noviembre. ¡°Acog¨ª con entusiasmo esta formidable iniciativa¡±, explica por tel¨¦fono este fil¨®logo y miembro de la Real Academia que, destaca, ¡°entre el p¨²blico hab¨ªa directivos y trabajadores¡±. ¡°Me invitaron por mi relaci¨®n con la m¨²sica a trav¨¦s de las canciones que compuse para La Orquesta Mondrag¨®n y Loquillo¡±. Sin embargo, De Cuenca se remont¨® en su intervenci¨®n a la Antigua Grecia, ¡°cuando la poes¨ªa y la m¨²sica iban juntas, luego se disociaron y ahora parece que vuelven a ir de la mano, y ello lo asever¨¦ con la lectura de poemas musicados y de canciones¡±. Del acto subraya que hubo ¡°much¨ªsimo coloquio, las personas que hab¨ªa all¨ª se lo tomaron como algo propio, no hab¨ªan ido solo a escucharme¡±. Esta propuesta por la poes¨ªa de Agfitel ¡ªque cuenta con la financiaci¨®n del Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte¡ª le recuerda a De Cuenca La Barraca de Federico Garc¨ªa Lorca durante la Segunda Rep¨²blica, cuando el poeta granadino ¡°lanz¨® el teatro en el medio rural¡±.

El pasado 23 de noviembre, Javier Ruibal comenz¨® su participaci¨®n recordando a Gabriel Celaya: ¡°Me siento un ingeniero del verso y un obrero / que trabaja con otros a Espa?a en sus aceros¡±, y mostr¨® su sorpresa por haber descubierto en su visita a la f¨¢brica onubense ¡°la doble nobleza del cobre, porque se utiliza para instrumentos de viento, y para material hospitalario, y yo fui ATS¡±.

El guitarrista y cantante, que habl¨® de su disco ¡°m¨¢s querido¡±, Pensi¨®n Triana (1994), defini¨® sus canciones como ¡°una olla gitana, que tiene de todo y alimenta¡±, y se?al¨® que al componer, ¡°a veces pones primero la letra, y otras la m¨²sica¡±, pero que, en todo caso, siempre se pregunta si lo hecho ¡°le habr¨ªa gustado a Alberti, a Lorca, a Gerardo Diego¡­¡±. De la m¨²sica que se hace ahora lament¨® ¡°la avalancha de canciones que hablan de la mujer como un objeto y se envuelven en algo vulgar¡±, y la fabricaci¨®n de ¡°artistas como rosquillas¡±.

Tras interpretar La flor de Estambul, su preciosa versi¨®n con letra de Gnossienne n¨²mero 1, de Erik Satie, uno de los trabajadores le pregunt¨® por el Nobel de Literatura a Dylan. ¡°Me parece bien, aunque no es un buen cantante¡­ pero la literatura tiene un trabajo de c¨ªclope que no hay en la canci¨®n¡±. Tambi¨¦n le interrogaron por el proceso creativo cuando compone para otros, como le est¨¢ sucediendo con una canci¨®n para Pasi¨®n Vega: ¡°Tienes que escuchar a quien te hace el encargo y ponerse en su piel¡±. De la conversaci¨®n, a Ruibal le llam¨® la atenci¨®n ¡°la conciencia que? hay de que este tipo de m¨²sica est¨¢ al margen de los grandes medios y las dificultades para expresarla¡±. El recital lo termin¨® con un cl¨¢sico de su repertorio, Atunes en el para¨ªso: ¡°Que me llamen infeliz / y que me encierren por loco, / si no es bonito vivir / siempre nadando con chocos¡±.

Entre el p¨²blico, seguidores de siempre como Javier Llorca: ¡°Ha sido un lujo. Esto no se ve en el trabajo todos los d¨ªas. Tener tan cerca a alguien a quien admiras, y me ha encantado lo f¨¢cil que ha explicado su manera de pensar¡±. Su compa?era Marina Ch¨¢vez descubri¨® ese d¨ªa al cantautor de gorrilla y perilla. ¡°Me ha gustado su autenticidad, hoy empieza mi admiraci¨®n por ¨¦l porque me ha llegado al coraz¨®n¡±. Y la fiesta acab¨® con el artista dedicando ejemplares del libro disco de Pensi¨®n Triana, y los trabajadores firm¨¢ndole el casco que hab¨ªa tenido que llevar por el recinto. Ruibal se lo puso de nuevo y se dijo: ¡°Parece que por fin voy a tener un trabajo de verdad¡±.