El cine y las producciones brasile?as dan la espalda a la crisis

La mayor¨ªa de los brasile?os recordar¨¢ 2016 como el a?o de la crisis pol¨ªtica y la recesi¨®n econ¨®mica. Pero quienes busquen otros ¨¢ngulos tambi¨¦n podr¨¢n decir que Brasil se ha consolidado en el sector audiovisual. El cine, la televisi¨®n y otras plataformas de emisi¨®n de contenidos avanza a contracorriente y es una potencia que resiste s¨®lidamente a los altibajos de la econom¨ªa.

En los ¨²ltimos dos a?os, Brasil ha entrado en una recesi¨®n con una ca¨ªda del 3,5% del PIB. Aun as¨ª, el sector audiovisual registr¨® un crecimiento durante 2016 con una expansi¨®n de m¨¢s del 10%. Cerca de 140 pel¨ªculas brasile?as fueron estrenadas, superando las 129 de 2015. Los brasile?os tambi¨¦n fueron m¨¢s al cine: 176 millones de entradas vendidas por las 173 millones en 2015 y las 90 millones de 2002, de acuerdo con el Observatorio Brasile?o del Cine y del Audiovisual (OCA).

El cine se ha comportado bien en momentos de recesi¨®n. Ver pel¨ªculas es la opci¨®n de ocio m¨¢s barata
La¨¦rcio Bognar, distribuidor

Las cifras no son casualidad. La industria celebra las pol¨ªticas p¨²blicas de los ¨²ltimos 15 a?os, que ha empleado a 200.000 personas y que en 2014 aport¨® a la econom¨ªa el 0,43% del PIB nacional. Dos a?os atr¨¢s, el sector gener¨® 24.500 millones de reales [unos 7.500 millones de d¨®lares] un crecimiento de 9% del mercado comparado con los 8.700 millones [unos 2.665 millones de d¨®lares] ingresados en 2007, de acuerdo con un estudio de la Agencia Nacional de Cine brasile?a (Ancine). A modo de comparaci¨®n, en 2014, la industria automovil¨ªstica obtuvo 22.740 millones de reales de facturaci¨®n [casi 7.000 millones de d¨®lares], seg¨²n la propia Ancine.

?C¨®mo es posible que la industria audiovisual navegue tan bien en medio de la tempestad econ¨®mica? Los expertos consultados por EL PA?S destacan que la crisis ha dado un cierto impulso al cine. ¡°Hist¨®ricamente, el cine se ha comportado bien en momentos de recesi¨®n. Ver pel¨ªculas es la opci¨®n de ocio m¨¢s barata¡±, dice La¨¦rcio Bognar, socio de Vitrine, distribuidora especializada en largometrajes nacionales independientes que ha crecido los ¨²ltimos a?os. M¨¢rcio Fraccaroli, de la distribuidora Paris Filmes, que cuenta con el 80% de cuota del mercado, lo suscribe: ¡°El cine es una alternativa para huir del aburrimiento de los telediarios¡±.

El apoyo del sector p¨²blico es el secreto de este ¨¦xito. Durante los ¨²ltimos 15 a?os, el pa¨ªs ha construido pol¨ªticas p¨²blicas s¨®lidas para el sector audiovisual. El esfuerzo comenz¨® con la creaci¨®n de la Ancine, en 2001 a lo que sigui¨® la creaci¨®n del Fondo Sectorial Audiovisual (FSA) en 2008, a partir del pago de un tributo para la difusi¨®n, producci¨®n, licenciamiento y distribuci¨®n de obras audiovisuales que se reinvierte en el propio sector. Este no opera a fondo perdido y existe en paralelo a las leyes que incentivan la producci¨®n a niveles estatales. Las ayudas menguaron a causa de la recesi¨®n, pero el fondo creci¨®. En 2013 y 2014, sus recursos ascendieron a 1.200 millones de reales [unos 368 millones de d¨®lares]. En 2015, la cifra alcanz¨® los 630 millones [193 millones de d¨®lares] y, en 2016, lleg¨® a los 730 millones [224 millones de d¨®lares].

El apoyo del sector p¨²blico es el secreto de este ¨¦xito. Durante los ¨²ltimos 15 a?os, Brasil ha construido un sistema s¨®lido de ayudas al sector audiovisual

¡°El FSA es lo que hace que el sector no sufra la crisis. Y es importante recordar que no se trata de dinero p¨²blico, sino de un fondo de inversi¨®n ¡ªy uno de los m¨¢s caros del mundo¡ª de donde tomas el dinero y despu¨¦s tienes que devolverlo¡±, explica Mayra Lucas, productora de Glaz Entretenimento. Para Mariza Le?o, la gran ventaja del FSA es una diversificaci¨®n financiera que ella denomina ¡°revoluci¨®n¡±. ¡°El fondo tiene, actualmente, l¨ªneas diversas y estimula y fomenta tambi¨¦n la producci¨®n regional, evitando la concentraci¨®n de la producci¨®n¡±, dice la productora al frente de Morena Filmes.

Otra revoluci¨®n lleg¨® con la llamada ley de la televisi¨®n de pago de 2011. Esta obliga a los canales a programar un m¨ªnimo de horas de contenido nacional creado por productoras independientes. La norma profesionaliz¨® el sector y estimul¨® el pleno empleo. Tambi¨¦n permiti¨® que los espectadores vieran m¨¢s obras brasile?as, producidas en su propio pa¨ªs y de calidad. ¡°Mi generaci¨®n solo produc¨ªa para el cine. En la actualidad, mucha gente ha empezado a ver la producci¨®n de televisi¨®n como algo desafiante e importante para sus carreras¡±, afirma Mariza Le?o. Y subraya: ¡°Ahora falta conquistar la televisi¨®n abierta¡±.

El impulso de la televisi¨®n retroalimenta al cine. Christian de Castro es un consultor especializado en econom¨ªa creativa que ha servido de puente entre productoras e inversores. Castro ve en el sector un ¡°enorme potencial¡±. ¡°Hace falta tener empresas preparadas para producir a escala industrial. Desde 2006 ha habido un aumento de venture capital [inversiones de riesgo] en Brasil. Es una generaci¨®n de inversores y fondos que pas¨® interesarse por actividades de base tecnol¨®gica, como biotecnolog¨ªa, farmacia y las varias ramas de la industria creativa. Ah¨ª fue donde se produjo el v¨ªnculo entre la propiedad intelectual y la inversi¨®n¡±, aclara.

Hasta 2006 la ¨²nica inversi¨®n privada que se conoc¨ªa en el mercado era la del banco Icatu en la productora carioca Conspira??o. Hoy existen inversores privados en al menos seis empresas: Gullane, Bossa Nova Filmes, Glaz Entretenimento, Oca Animation, AfroReggae Audiovisual y Downtown Filmes.

Con el fortalecimiento de las productoras con dinero privado, Brasil pas¨® a crear productos s¨®lidos que despu¨¦s son exportados. Es el caso de series de animaci¨®n infantiles como Gallina pintadita, de los productores Juliano Prado y Marcos Luporini, una de las marcas licenciadas que m¨¢s facturan del mundo, y El mundo de Luna, de TV Pinguim, que se ha emitido en m¨¢s de 70 pa¨ªses. Tambi¨¦n contenidos adultos como la serie Las canallas, de Migdal Filmes, que se emite desde 2013 y que Ben Stiller producir¨¢ una versi¨®n para el servicio de streaming estadounidense Hulu bajo el t¨ªtulo de Bitches.

Brasil cuenta con casi 3.100 salas de cine. La cantidad de pantallas, en comparaci¨®n con la poblaci¨®n, todav¨ªa es baja: alrededor de 66.451 habitantes por sala

Con los pies en el suelo

Aunque el nivel del sector se haya elevado hay algunos nubarrones que pueden oscurecer el panorama. Por ello los expertos afirman que hay que mantener los pies en el suelo. Viejos desaf¨ªos relacionados con la distribuci¨®n y la emisi¨®n de las obras presentan nuevas caras. Y la crisis tampoco puede ser desde?ada. ¡°No es realista creer que el consumo en general cae y que, en ese contexto, el cine va a permanecer estable¡±, recuerda Karen Castanho.

Distribuir y emitir a la velocidad de las producciones es el primer problema. En Brasil, las grandes pel¨ªculas de Hollywood dominan las salas. Seg¨²n datos del OCA, las 20 mayores cintas (nacionales e internacionales) de 2016 recaudaron juntas cerca de 100 millones de d¨®lares, el equivalente al 50% de la taquilla total. En ese contexto, los largometrajes nacionales podr¨¢n salir en hornadas seguidas (en 2015 se lanzaron 129 obras y la expectativa es de 140 para 2016), pero no encontrar¨¢n espacio en el circuito comercial. ¡°Nuestra principal dificultad es hacer que las pel¨ªculas lleguen a las salas¡±, afirma La¨¦rcio Bognar, de Vitrine. ¡°No hay espacio para dar salida a tanta producci¨®n¡±.

Brasil cuenta con casi 3.100 salas de cine. La cantidad de pantallas, en comparaci¨®n con la poblaci¨®n nacional, todav¨ªa es baja: alrededor de 66.451 habitantes por sala. Es una de las cifras m¨¢s bajas de Am¨¦rica Latina, donde Argentina tiene una sala por cada 47.606 habitantes y M¨¦xico 20.135.

Por eso, una apuesta segura son las plataformas de v¨ªdeo bajo demanda, como Netflix, Globo Play, Amazon Prime. Brasil ya es el octavo mercado m¨¢s grande del mundo en v¨ªdeo bajo demanda, con unos ingresos estimados de 352,3 millones de d¨®lares en 2016, seg¨²n el estudio sobre el Impacto Econ¨®mico del Sector Audiovisual Brasile?o. Para Mayra Lucas esta ¨¢rea carece de regulaci¨®n: ¡°El principal reto es entrar en el v¨ªdeo bajo demanda y en el streaming de forma m¨¢s sostenible, posibilitando la competencia y protegi¨¦ndose contra la pirater¨ªa¡±.

Otro impedimento es la crisis pol¨ªtica y econ¨®mica. Desde la salida de Dilma Rousseff y la llegada de Michel Temer a la presidencia, el Ministerio de Cultura se cerr¨®, se reabri¨® y fue dirigido por dos ministros diferentes, lo que hace que la incertidumbre flote en el ambiente. A esa ansiedad se le suma el hecho de que Manoel Rangel, presidente de la Ancine desde 2007 y considerado por los profesionales del sector como un gestor h¨¢bil, abandonar¨¢ el cargo en mayo. Todav¨ªa no hay un sucesor definido, lo que da pie a especulaciones sobre los rumbos que tomar¨¢ la agencia.

La inestabilidad en el rompecabezas del poder tienen la desventaja de disuadir a los inversores. Seg¨²n Christian de Castro ¡°es dif¨ªcil rascarse el bolsillo en tiempos as¨ª¡±. ¡°El mercado conf¨ªa en aquello que ve. En ese contexto oscuro, los principales actores retrasan un poco la decisi¨®n de invertir¡±. Ninguno de los expertos considera que el sector pueda recular. Todos prefieren augurarle buenos tiempos. ¡°Hoy no tenemos que inventar la rueda, solo lubricarla con aceite¡±, concluye Mariza Le?o.